Al otro día, mientras las chicas habían ido de compras. En el coliseo anexo al Palacio Feudal, se daba los inicios a las «Ferias de Sangre».
─Bienvenidos sean todos los habitantes de Raz Al"Nar, hoy iniciamos el evento más esperado del año en toda la provincia, ─decía el anunciador ezrahim al público─, estas ferias les damos la bienvenida como siempre a su Excelencia, el Conde Josías, le acompaña el Conde Ismail con otras personalidades y además tenemos un invitado especial, Su Alteza El Príncipe Vhalir, de la casa Khandir la casa gobernante del Reino de Aleshia.
La gente vitoreaba a grandes gritos, comienzan a tocar la música y se hace una parada militar en honor al invitado especial, después de las ceremonias reales, Josías pronuncia unas palabras y en eso Ismail le dice a Vhalir.
─Alteza, veo que se animó a venir.
─Fue una coincidencia, generalmente no hubiese venido, pero la situación lo amerita.
─¿Compras de su futura esposa?
─También a averiguar porque no le envías tropas de apoyo a Josías, cuando tu ciudad está en medio del desierto sin puertos tan importantes que cuidar
─Debo cuidar su isla también estimado sobrino, y mi amplia costa tampoco debe descuidarse.
─Pero me acabo de enterar que Enor te dio el mando sin notificar a mi padre de la marina de Kund"Nar.
─Simple papeleo, debes conversar con tu primo para formalizar.
─En tal caso tío, asegurate por favor de enviar navíos de patrulla hacia esta zona cuanto antes.
─Ten por seguro eso, que me aseguraré de ello tan pronto llegue a casa, sobrino.
En eso el Conde Josías dice al público con mucha emoción:
─Estimados asistentes, les doy la palabra al Príncipe Vhalir, para que de inicio formal a las Ferias de Sangre.
Aplausos y gritos de celebración se escuchaban a reventar en el aforo. Vhalir se levanta de su puesto seguido por los flancos por el Mayor Shamir y el Capitán Gideoni. Mientras la gente gritaba «¡Que comiencen, que comiencen!».
─¡Doy inicio a Las Ferias de Sangre! ─anunció con tranquilidad.
Dos hombres se ubicaron en la arena, la gente gritaba por doquier, y un tejnik miembro de la corte judicial subía al centro con un micrófono haciendo el anuncio.
Primer caso Alteza, ─dijo el oficial del juzgado─: a la derecha, tenemos un hombre comerciante, de la casta ezrahim de nombre Feza, solicita justa porque acusa al hombre de la izquierda, un tejnik llamado Rafel, que no le hizo un trabajo completo, el de la izquierda argumenta que si lo terminó y el juzgado determinó que ninguno cumplió con las partes, el primero no pagó la cuota inicial y el segundo no entregó el trabajo completo, pero no quieren llegar a ningún acuerdo, solo indicaron que se hará por justa de Eved, ¡Esclavitud o muerte!, que el acero decida la suerte de estos dos.
Dos hombres toman cada uno una espada y se colocan uno frente al otro en actitud de duelo.
─No son soldados, será rápido porque son torpes. ─comentó Josías a Vhalir y a Ismail.
─No te creas, algunos han entrenado, quizás nos brinden un espectáculo ─ especuló Ismail y pregunta─: ¿Que piensas Vhalir?
─Esto se debió resolver por medios judiciales, pero en fin, si deciden de esa forma, ¡allá ellos!
─¿Y tu futura esposa, por qué no está presente?, debería ver estas cosas tan aleshianas.
─No es el momento para eso, ella está concentrada en otras cosas, ─y mirando a Josías le dice para cambiar un poco el tema y para callar a Ismail─: ¿Cuando podemos reunirnos para discutir el plan de seguridad naval?
─Alteza, ya nos reuniremos, por ahora, disfrutemos del espectáculo que esta a punto de comenzar.
Los hombres que entran a duelo están frente a frente, saludan a la tribuna de los nobles y toman su distancia. El ezrahim le dice al tejnik:
─Te dije que te haré pagar
─Eso lo veremos ─contestó el otro.
Ambos hombres desenfundan sus espadas y se preparan para esperar el ataque del otro, el ezrahim se mueve rápidamente hacia la izquierda con su espada apuntada hacia el tejnik, mientras este muy tranquilo observa pasible como su mueve su contrincante, y da un paso al frente. En ese momento el ezrahim lanza un golpe directo contra la cabeza del tejnik que logra evitar apenas moviéndose un poco pero de forma rápida dando un pivote y quedando de nuevo de frente a su contrincante en posición inversa, el ezrahim de nuevo se mueve a su derecha para tratar de buscarle el flanco al tejnik que aún se mantiene tranquilo sin elevar su espada, esto aparentaba en el tejnik cierta tranquilidad y confianza. De nuevo el ezrahim lanza otro golpe con el filo de su espada que es de nuevo evitado por el tejnik, el frustrado ezrahim sigue lanzando y no logra dar con su escurridizo contrincante que todavía no blandía su espada y que no quitaba la mirada penetrante a su contrincante, el ezrahim sigue lanzando y en eso el tejnik logra adivinarle el movimiento y de forma veloz y certera, al dejar pasar el ataque, el tejnik lanza un ataque contra la muñeca del ezrahim logrando cercenarle la mano con la afilada espada, logrando desarmar el desafortunado hombre.
Los gritos de dolor del ezrahim se escuchan en el lugar, el tejnik permanece tranquilo mirando a su oponente. Y la gente gritaba:
─«¡Eved o muerte, eved o muerte!»
El funcionario judicial pregunta al tejnik:
─¡Decide que otorgas!
El tejnik impasible y concentrado mira a su herido contrincante que sigue lamentándose.
─¡Otorgo Eved!
─Se ha escuchado muy claro, se ha otorgado beneficio de eved.
Pero el ezrahim no estaba dispuesto a tomar el beneficio y con la otra mano se lanza al ataque de forma traicionera para apuñalar por la espalda al vencedor, en eso Vhalir le dice a Josías:
─¡Ventaja ilegal!
Pero el desconocido tejnik no estaba con la guardia baja, se voltea y con la punta de su espada repele el ataque y le asesta un corte por la parte posterior de su cuello matando al instante al tramposo ezrahim.