Cross My Mind

~14~ Parte I

Caroline.

Las palabras de Niall seguían dándome vuelta, ella los había abandonado. ¿Cómo pudo hacerlo?, quien en su sano juicio sería capaz de abandonar a un bebe ¡A su bebe! Nueve meses en su útero, viviendo cada cambio corporal, sus primeras pataditas ¡Todo!

¿Cómo era posible?

No podía entenderlo ni, aunque el mismísimo Papa me lo explicara.

-Vamos. Estoy más que seguro que tienes miles de preguntas- susurro Niall con su vista clavada en sus lujosos zapatos.

-No quiero ser impertinente.

-Impertinente es tu segundo nombre Petit- aseguro mofándose.

-¡Vaya! Don gruñón tiene sentido del humor- rodé los ojos y no pude ocultar una sonrisa. Tenía razón tenía miles de preguntas y quizás debía aprovechar su Casi buen humor- quizás sea una pregunta estúpida, pero, ¿Por qué los abandono?

-Según lo que decía la mendiga carta, porque no nos amaba y se iría con el verdadero amor. Que resulto ser su padrastro. Y si te preguntas si supe de ella después de eso o durante estos seis años, la respuesta es no. Perdí contacto incluso con su familia, bueno en realidad fue decisión mía cortar todo laso con la familia de Heather. Sentí... que no merecían ser parte de la vida de mi hija.

-El error fue de ella, no de su familia.

-Ellos nunca me quisieron-rio- su padrastro decía que su pequeña merecía algo mejor y como no, si se acostaba con ella. Los primeros meses jamás llamaron, ni siquiera fueron a verla al momento que nació. Nunca hubo interés, así que mientras más lejos de mi hija mejor.

Un fuerte ruido llamo nuestra atención, la lluvia se había intensificado, la casa estaba en completa serenidad provocando que la conversación fuera amena.

- ¿Bebes algo? - pregunto el poniéndose de pie- necesito una cerveza.

-Dos cervezas serán- respondí elevando mi mano.

Niall camino con parsimonia hasta la cocina regresando de esta misma con dos botellas en sus manos. Me tendió una el cual acepte gustosa, el calor de la chimenea ya me estaba sofocando y aquella fría bebida alcohólica podría apaciguar eso.

-Tengo más preguntas.

-Como no- rio el levemente para luego beber un sorbo de su botella.

- ¿Por qué alejar más a su hija? - el clavo su mirada en mi con confusión- me imagino que no fue fácil quedarte solo con una Emily bebe y menos ser padre soltero. Pero en esos casos es común que los padres sean muy cercanos a sus hijos... pero no lo veo en ustedes. Déjame explicarme mejor, quizás si sean cercanos, pero no tanto. Sé que Emily te ama, pero a la ves siente mucho miedo.

-No creo necesitar a nadie que me diga como criar a mi hija o como ser un buen padre- espeto con enojo.

-Aquí vamos de nuevo- bufe- don gruñón volvió a las pistas, nadie te está diciendo como criar o ser buen padre como una forma de atacarte, solo intento... ayudarte, comprenderte.

- ¿Por qué? - no había notado su cercanía hasta ahora, podía sentir su aliento chocar contra mi rostro, provocando un gran nerviosismo en mi- porque quieres ayudarme o si quiera intentar comprenderme. ¿Por qué petit?, dame una razón lo suficientemente buena y creíble y te prometo por lo más preciado en mi vida que permitiré que lo hagas. Vamos.. convénceme con una sola frase.

Una sola frase. Me pedía convencerlo con una sola frase, me pedía que le diera una razón, una mísera razón para que me permitiera entrar, involucrarme más en un asunto del cual no tenía por qué hacerlo. Pero algo me decía que debía, que debía involucrarme, que debía indagar más, intentar conocer a aquel Niall Horan que solo unos pocos conocen o quizás casi nadie. No tengo razones para justificar mi actuar, simplemente me nace y ya. Y aquel hombre de los ojos más fríos que un tempano me pedía a gritos que lo intentara y allí la frase sacada de un libro de psicología de mi amiga me hacían sentido...

-Porque sé que eres más de lo que muestras. Que detrás de esa apariencia de duende gruñón hay una persona capaz de entregar mucho más que solo gritos y malos tratos. Lo sé y no me preguntes porque, simplemente... lo sé.

Su mirada era intensa, y por como apretaba su quijada podía asegurar dos cosas: o estaba intentando mantener la calma para no asesinarme o se debate en creer o no aquella razón.

Y cuando una sonrisa se expandió por sus labios relajando cada musculo de su rostro y cuerpo, supe que había hecho bien.

-Tu as gagné... petit- expreso.

No sabía lo que había dicho, no sabía que idioma fuera aquelpero si sabía que esto estaba recién comenzando.

***
Algo corto... Lo se. Pero era lo que habia quedado pendiente del anterior, es la primera parte.

Traducción : tu as gagné petit ( has ganado cachorra)



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En el texto hay: romance, drama, psicologa

Editado: 28.04.2020

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