Crown of darkness

Cinquantatré.

Las semanas posteriores a la amenaza habían traído una sensación de estabilidad y recuperación. La decisión de trabajar desde la mansión había resultado ser una excelente estrategia. El imperio Di Marco había vuelto a ser uno de los más poderosos, y Angelo y yo estábamos en una mejor posición que nunca. El entorno familiar de la mansión y la seguridad reforzada proporcionaron un respiro necesario después de los recientes eventos.

Una noche, después de un mes de arduo trabajo y de ver los frutos de nuestros esfuerzos, Angelo decidió que era el momento de expresar su agradecimiento. La idea de una cena especial para celebrar y agradecer todo lo que había hecho Isabel resonaba en su mente. En un gesto que era tanto una muestra de su aprecio como una forma de hacerme sentir especial, Angelo decidió preparar una cena para nosotros.

Era una de esas noches en las que el ambiente en la mansión se sentía más íntimo. La cocina estaba llena de aromas deliciosos, y yo observaba desde el umbral de la entrada. Angelo estaba trabajando en la cocina con una habilidad que era casi artística. Había aprendido a cocinar con la misma precisión con la que manejaba los asuntos de la mafia, y ver su dedicación en esta tarea era una especie de espectáculo en sí mismo.

Lo que me sorprendió aún más era que, por primera vez desde que nos conocimos, Angelo no estaba usando la máscara que siempre llevaba cuando estábamos en público o trabajando. Desde que le dije que era perfecto tal como es, parecía haber dejado atrás la inseguridad que lo llevó a ocultarse tras ella. La confianza que me mostró al permitirme verlo sin la máscara era abrumadora, y me hizo sentir una conexión más profunda con él. La idea de que él estaba dispuesto a mostrarme su rostro completo, sin las sombras ni el misterio que normalmente lo rodeaban, era un acto de vulnerabilidad que aprecié enormemente.

Mientras Angelo se movía por la cocina, cada gesto estaba cargado de una precisión y gracia que solo él podía aportar. Sus manos trabajaban hábilmente con los ingredientes, y la forma en que se concentraba en cada tarea me recordó cuán meticuloso era en todo lo que hacía. La tensión en el aire era palpable, no por la amenaza de los días anteriores, sino por la emoción de la ocasión y el deseo de que todo saliera perfecto.

—¿Puedo ayudarte en algo? —le pregunté, rompiendo el silencio con mi pregunta.

Angelo levantó la vista de la sartén, sus ojos reflejaban un brillo de satisfacción. —No, Principessa. Quiero que solo te sientes y disfrutes del espectáculo. Esta noche, todo se trata de ti.

Sus palabras eran suaves pero llenas de significado. La atmósfera en la cocina estaba impregnada de una mezcla de nerviosismo y emoción, y mientras observaba a Angelo trabajar, me sentía agradecida por el esfuerzo que estaba poniendo en esta cena. Había algo reconfortante en el hecho de que él estaba dispuesto a hacer esto para mí, y la idea de que estábamos celebrando nuestro éxito juntos me llenaba de una felicidad inesperada.

Mientras el tiempo pasaba, la mesa fue preparada con esmero. Las velas estaban encendidas, y la decoración reflejaba un sentido del estilo que solo Angelo podía aportar. La música suave de fondo completaba el ambiente, creando una atmósfera que era al mismo tiempo elegante y cálida.

Finalmente, Angelo nos invitó a sentarnos, y la cena comenzó. Los platos que preparó eran exquisitos, y cada bocado estaba lleno de sabor y amor. Durante la cena, hablamos de los desafíos que habíamos superado y de los planes futuros, pero la conversación siempre volvía a la gratitud y al aprecio que sentíamos el uno por el otro.

La noche se convirtió en una celebración de nuestro éxito y en una reafirmación de la conexión que compartíamos. A medida que avanzaba la cena, la tensión del trabajo y de los eventos recientes parecía desvanecerse, reemplazada por una profunda sensación de satisfacción y alegría.

Angelo, con su rostro libre de la máscara, me miró con una mezcla de admiración y cariño. Era un momento de intimidad que no habíamos compartido antes, y mientras disfrutábamos de la cena, su presencia y la forma en que se entregó a esta noche especial me recordaron cuánto significaba para mí.

La cena terminó con una sensación de plenitud y una nueva perspectiva sobre nuestro futuro juntos. En medio de las luces tenues y el aroma de la comida, la cena que Angelo preparó para mí se convirtió en un símbolo de nuestro éxito, de nuestra relación y de todo lo que habíamos logrado juntos.

La cena se había desarrollado de manera perfecta. La cocina, una vez llena del aroma de la comida, ahora estaba en calma, y la mesa, adornada con velas que parpadeaban suavemente, ya estaba despejada. Angelo y yo, todavía con la calidez de la comida y la compañía, decidimos dar un paso más hacia el final de la noche.

Él me tomó de la mano, y juntos salimos al jardín de la mansión. La noche estaba clara, y la luna brillaba sobre nosotros, creando un ambiente mágico que parecía sacado de un sueño. El jardín, con sus caminos iluminados y sus flores que exudaban un perfume sutil, se extendía ante nosotros, un espacio que ahora se sentía como un refugio personal.

Mientras caminábamos, la brisa nocturna acariciaba nuestras caras, y el sonido de los grillos y el murmullo de la fuente cercana creaban una sinfonía de tranquilidad. La tensión de la noche se desvaneció en el aire fresco, y lo único que importaba era el momento que estábamos compartiendo.

Angelo me miró con una intensidad que me hizo detenerme. Sus ojos, que ya no estaban ocultos tras la máscara, mostraban una vulnerabilidad que solo yo tenía el privilegio de ver. Me detuve, y él hizo lo mismo, manteniéndome cerca de él.

—Principessa —dijo en voz baja, su tono lleno de emoción—. Quiero agradecerte por todo lo que has hecho. No solo por ayudarme a recuperar mi imperio, sino por estar a mi lado en todo momento. Tu apoyo ha sido crucial para todo lo que hemos logrado.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.