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Miro a la mujer dormida, debajo de las sábanas se podía ver un resplandor azul, el se sentó a su lado y bajo la sabana y tocó la pequeña esfera de luz entre sus pechos, se sentía muy fría al tacto.

— extrema pureza 

Pronunciaron sus labios, esta mujer se supone que era su última opción, pero ahora se había vuelto irremplazable.

La cubrió y se acostó detrás de ella y la atrajo a sus brazos.

Era muy suave al tacto, de ello todas las mujeres con las que había estado eran así, solo que ningúna podía darle este frío que calmaba su cuerpo.

Hundió su rostro en el cuello de kagune y se hundió en el país de los sueños, tuvo un sueños más profundos y tranquilos, que los anteriores de esta temporada.

Los rayos del sol, empezaron a salir, varios funcionarios llegaron temprano a la reunión matutina, todos se apresuraron para no llegar tarde, el último que llegó tarde fue degradado de su posición.

— funcionario Asar, por qué camina tan rápido.

— jajaja que dice funcionario Bastia usted también lo hace.

Ambos eran hombres ya mayores que aparentaban unos 54 años, Asar  parecía un erudito y Bastia parecía un hombre criado en el campo de batalla.

Ninguno de los dos se llevaban bien y ambos eran representantes de la facion, norte y la del sur, bajo el mando del emperador dorado.

Los dos hombres caminaron lo más rápido que podían, temían que sus cargos fueran quitados.

— funcionario Asar escuché que su sobrina entrara en el palacio, es una lastima que solo sea una batería.

Las manos de Asar se apretaron en puños no podía creer que su pequeña y hermosa nieta tuviera ese destino, miro a Bastia y dijo.

— si es una lastima,escuché que su hija era muy favorecida

Bastia levanto el pecho con orgullo

— así es 

— es una lastima que no dure mucho

Después de dejar esas palabras se adelantó, Bastia se quedó paralizado por un milisegundo, cuando reaccionó persiguió Asar con una cara distorsionada.

— estás diciendo que mi hija será abandonada

— solo piénsalo, el emperador necesitaba muchas mujeres para dejar descendencia rápido, no sabía cuando podría ser consumido por su poder, pero con la aparición de la niña de ojos benditos, ya no necesitará su poder por lo que las mujeres del harem serán abandonadas, y mi sobrina sobrevivira aún más jajaja.

El rostro de Bastia estaba que escurría tinta ambos llegaron a la sala de reuniones, había dos líneas de funcionarios uno al lado derecho y otro al izquierdo.

El lado derecho era la faccion sur y el lado izquierdo el norte.

Ambos caminaron hasta el frente y se pusieron derechos, después de tranquilizarse miraron hacia el trono pero no había nadie, ambos se miraron y tenían la misma pregunta en sus mentes.

— ¿ Dónde está el emperador, el que nunca llega tarde?

Akil miro a abasi, el negó con la cabeza, el emperador nunca dejo que lo acompañaran a la hora de dormír, así que nunca lo esperaban cerca para ir a las juntas, pero de hecho jamás llegaba tarde.

Este era un completo desastre.

Kagune miro el lugar donde se encontraba, todo estaba oscuro, pronto sintió el suelo temblar, el collar en su cuello empezó a brillar e ilumino el lugar, miro a su alrededor y sintió que todo su cuerpo se paralizaba, estaba rodeada de yankus, Miles y Miles de ellos, su cuerpo cayó hacia atrás, su espalda impacto en el suelo, no se podía mover.

Sintió como los yankus se acercaban a ella, ellos soltaron sus enormes lenguas y empezaron lamer su cuerpo, por más que quería moverse no podía, sus lágrimas corrieron por sus ojos, sintió como era levantada y luego empezaron a jalarla de ambos brazos y sus pies, su cuerpo débil se rompió.

Ella abrió los ojos y su pecho subió y bajo rápidamente, su tez era pálida aún podía sentir sus lenguas por todo su cuerpo, ella seco sus lágrimas, el miedo aún era persistente.

— quedarse quieta 

Tras la voz ronca y baja que sonó a su lado ella reaccionó y miro a la persona que hundía su rostro en su cuello.

— ¡¡que haces aquí!!

— grito por instinto.

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