Narra Lucia.
Estoy acostada en la cama cuando la alarma suena, me levanto perezosa de la cama y me dirijo al baño hacer mis necesidades, me miro al espejo y no es nada lindo lo que veo parezco un perro con rabia, cepillo mis dientes y después me doy una ducha de agua fría, cualquier persona en sus cinco sentidos no se bañaria con agua fría y es que estamos en noviembre y el frío es intenso, lo se soy una loca pero me da igual.
Salgo del baño y seco todo mi cuerpo, me pongo mi ropa interior y después me pongo la primera ropa que encuentro, bajo a la cocina con mi mochila en la mano y miro a mi mamá que me esta preparando el desayuno, mi mamá es la mujer más fuerte que conozco en este mundo, después que mi padre nos abandonara ella se a dedicado a velar por mi todo el tiempo y por eso la amo con todo mi corazón.
-Mamá ya estoy lista.
-Por el amor de dios lucia, me has dado un susto de muerte- dice y se pone una mano en el pecho.
-Lo siento.
-Hay esta tu desayuno, huevos revueltos con tocino y jugó de naranja.
-¿Te he dicho que eres la mejor madre del mundo mundial?- pregunto.
-Me lo dices muy pocas veces.
-Pues eres la mejor madre del mundo mundial- la abrazo y le doy un beso en la mejilla- nunca lo olvides ma'.
-Nunca lo voy a olvidar mi niña, ahora ponte a desayunar que se te va hacer tarde para ir a la universidad.
Me pongo a desayunar y reviso mi celular para ver si tengo algún mensaje de madison mi mejor amiga, van varios días que no se nada de ella y me preocupa, ella no es de mantenerse ausente tantos días.
Término de desayunar y me cepillo los dientes, me despido de mamá y salgo de la casa.
Luego de un rato llegó a la universidad, saludo algunos de mis compañeros y me dirijo a mi salón de clases, me toca historia y la verdad es que la maestra es una de las mejores, da su materia como ninguna otra y no es por presumir pero soy una de las mejores de mi clase.
-Buenos días chicos, hoy les toca un pequeño trabajo individual se trata sobre criaturas como hombres lobo o vampiros, no quiero nada extenso sólo quiero que me digan su opinión sobre el tema, también quiero láminas de su criatura favorita, osea cual les gusta más si el vampiro o el lobo.
Hago apuntes sobre las cosas que voy a escribir y de ante mano también escribo cual es mi criatura favorita, y la verdad es que el lobo es un animal muy bonito, no se por que me gusta tanto.
Tocan el timbre de receso y salgo del aula me dirijo a la cafetería y me siento a dibujar, es uno de mis pasatiempo favoritos no se de quien saque el don por así decirlo por que mamá no sabe ni trazar una línea.
Término de dibujar y me doy cuenta que he dibujado un lobo, es negro con los ojos azules como el cielo, es lindo sonrío y salgo de la cafetería.
Entró a la próxima clase de ciencias la cual odio, lo raro es que no hay nadie en el aula salgo y me dirijo a secretaria para saber que pasa, me topo con algunos chicos que se dirigen a la salida olvido a donde me dirijo y voy a la salida, que mas da.
Salgo de la universidad y me dirijo a la cafetería en la cual trabajo, la paga es muy buena y las demás personas que trabajan hay son muy buenas, espero ver a madison en la cafetería ya estoy realmente preocupada el no saber nada de ella en todo el día.
Llegó y saludos alguno de mis compañeros de trabajo, me dirijo a ponerme un delantal y comienzo a tender los clientes, no veo a madison por ningún lado ya mejor le pregunto a uno de las muchachas para ver que me dicen.
-ámbar, has sabido algo de madison es que hoy no me ha enviado ningún mensaje y tampoco fue a la universidad, y ya me estoy preocupando- le pregunto con la esperanza de que me diga que si ha sabido algo de ella.
-si, ella vino ayer y nos dijo que estaba mal, no dijo de que o por qué, solo dijo eso y después se fue ha y también dijo que si podías cubrirla.
-Si, no hay ningún problema, gracias ámbar- le sonrió y después me voy a terminar mi trabajo.
Pasan las horas y estoy realmente cansada, estoy caminando por la calle cuando siento que me estan siguiendo, miro para todos lados y no veo a nadie de seguro es mi imaginación que me esta jugando una mala pasada, sigo camino cuando escucho de nuevo unos pasos esta vez miro detrás de mí y hay tres hombres.
Camino más rápido y ellos me persiguen, estoy cagada del miedo corro más rápido hasta que siento una mano en mi cabello, soy arrastrada a un callejón y uno de ellos comienza quitar mi ropa.
-Por favor, déjenme tranquila- sollozo.
-Si estás tranquila, prometo que no dolerá y será rápido.
Uno de ellos logra quitar mi pantalón, pataleo y grito ninguno de ello me hace caso y estoy cada ves mas asusta, ya no puedo hacer nada ellos son tres y son más fuertes que yo.
Siento como uno de ellos me penetra y ahogó un quejido de dolor, no soy virgen pero duele tanto como la primera vez, quiero que acaben ya, no aguanto un minuto más