"Mi búsqueda en esta vida consisten en la paz interior, pero la constante lucha contra el sentimiento de fastidio y halago de Abraham me lleva a preguntarme si es realmente la búsqueda correcta que estoy haciendo.
Las equivocaciones no son lo mío, ni antes ni después de lo sucedido, pero él solo quiere hacer que me equivoque o busque algo que no está dentro de mis planes.
Quisiera la paz que anhelaba antes de su llegada, pero ahora esa paz me está comenzando a parecer monótona y fría.
¿Quiero pasar frío el resto de mi vida?"
08 de mayo del 2015
─ ¿Qué sucede con Elisa Noa? ─ Es lo primero que escucho a mi madre decirme cuando nota que ya he bajado a desayunar.
Me encuentro tonta porque me he despertado hace apenas unos minutos, incluso mi cabello refleja el desastre que soy.
─ ¿Qué?
─Te he preguntado qué es lo que está sucediendo con Elisa─ dice y ahora caigo en cuenta de que irá la plática─, ya no la he visto venir por aquí y tu pareces estar en otro mundo.
"Mira solo esas horribles ojeras que tienes en tu rostro.
─Primero: Hola mamá amanecí genial aunque cansada, espero que tu hayas descansado─ digo sentándome en el comedor y ganándome una mala mirada de mi papá─. Segundo: Estuve hasta tarde por medio de una video llamada con Abraham para adelantar mi proyecto de historia.
"Tercero: No sé qué sucede con Elisa, no responde mis llamadas y no quiero desconcentrarla en este momento. Sabes que es muy distraída para las tareas, y supongo que está en su momento "Homework"
Ahora si me mira mal mi mamá y no me preocupo mucho, pero sé que si no levanto la mirada me podría ir mal.
─Tus momentos de sarcasmo no me agradan y lo sabes─ dice y yo solo me encargo de poner una mano en mi mentón para no caer del sueño que tengo y golpearme con la mesa─, y deberías intentar contactarla más tarde para que venga a comer. Me preocupa que no se pase por aquí como es de costumbre.
─Claro mamá.
Es todo lo que digo y siento mis ojos cerrarse, en verdad que siento todo mi cuerpo pesado y sin nada de energía,
El olor del rico desayuno de mi madre me levanta un poco, pero no con el ánimo de siempre, el proyecto está resultando mortal y no me agrada en lo absoluto.
"Por cierto Abraham vendrá en unas horas para seguir con el trabajo de historia.
Comienzo a masticar y me desconecto de todo y todos, aunque ese todos solo signifique mamá y papá.
Me le logrado bañar y ponerme un poco presentable y aunque intente adelantar más del trabajo no pude y lo deje ahí hasta la llegada de Abraham a mi cada. Me quede dormida en mi cama y solo cobre el sentido de mi existencia cuando mi madre vino a despertarme para que recibiera a Abraham.
Justo en este momento estamos buscando información para hacer el ensayo. Tenemos ya muy adelantado todo el proyecto solo nos falta el ensayo y eso está muy bien, claro si hablamos de lo que es trabajo de redacción.
Mientras él se encarga de ver la información que corresponde yo me encargo de ir buscando ideas para hacer la portada un momento tan trágico y significativo que marco al mundo.
Es triste que algo tan horrible tuviese que suceder para "haya paz" en el mundo, pero si mi opinión fuese muy importante diría que estamos a años de una tercera y no me alegra ese hecho.
Los acontecimientos que se presentan día con día son tan lamentables y repentinamente me encuentro rogando para que eso no suceda jamás.
4:00 pm.
Tengo tres portadas y me atrevo a decir que incluso hay una cuarta para la elección, pero no me gusta demasiado así que la descarto por completo. No se las muestro a Abraham porque tenemos un prioridad en este momento, que es el ensayo debe ser perfecto en términos terrestres y aplicables.
Tenemos información de todos los puntos que pide el ensayo, pero aún no sabemos en qué orden poner cada uno y eso lo está desesperando.
─Deberíamos tomar un descanso Abraham─ digo, y le quito su computadora para alejarla de él─, no hemos parado desde que llegaste y yo en este momento tengo mucha hambre.
─Concuerdo contigo─ dice y se levanta para estirarse─ puedo usar tu baño, necesito...
─No es necesario que me digas para que lo utilizas─ digo levantándome─. Solo entra, es esa puerta.
Acomodo todo lo posible los papeles y las libretas que se encuentran en mi escritorio y decido abrir las cortinas de mis ventanas para que entre un poco de luz solar.
Escucho la puerta abrirse y sé que es Abraham así que no volteo.
"Vamos a comer y luego elegimos las portadas.
Él hace un sonido de asentimiento y yo me alejo de la ventana para ir directo a la puerta.
Me sigue hasta el comedor en silencio y me alegro de que no quiera hablar. Llegamos a la cocina y el olor que despide lo que cocina mi madre es como un grito de gloria o algo que me devuelve a la vida.
Sé que Abraham siente lo mismo porque choca contra mí y eso hace que me ría un poco, volteo a verlo y le guiño un ojo. No sé porque hice eso, pero parece que fue algo involuntario y a modo de hacerle saber que mi madre sabe hacer buenas comidas.