Cuándo éramos jóvenes.

Epígrafe.

Para ti querido lector/a que estas ahí en este momento, detrás de la pantalla de tu móvil o computador, leyendo las nimias palabras de un intento de escritora, te agradezco por darme lo más valioso, tu tiempo.

Esos minutos en el transporte, tu cuarto, la comodidad de un mullido sillón con una tasa de café en mano, gracias sinceras de este humilde corazón por adentrarte en mi mundo y darme la oportunidad de hacer lo que más amo, crear.

Para ustedes amigos de la vida que cada día me llenan de experiencias nuevas y sonrisas gratas que hacen vibrar de alegría mi alma. Gracias.

Mamá, no podías faltar, la creadora de este ser que intenta buscar su camino y su lugar en una vida con obstáculos, te agradezco por todo ese amor dulce y sincero que me brindas cada minuto que pasa.
Sin ese apoyo incondicional no sería ni la mitad del ser en proceso que escribe en este momento.

Para ti recuerdo lejano que mantiene la herida en mi corazón aún latiendo, gracias por las experiencias que me diste en su momento tanto buenas como malas.

Y como lo último casi siempre es lo mejor, te agradezco a ti esfera de luz que me guía desde el cielo, con esa juventud arrebatada que se aún sigue intacta, gracias por esos años transcurridos en mi vida con tu brillante presencia física, y gracias por esos momentos que atesoro con recelo en mi corazón hoy que ya no te tengo aquí conmigo.

|•CandyNicolette.•|

 




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