Cuando mas te esperaba

Capítulo 15: Recuerdos

- ¿Ale? ¿Dónde estás? – Ella al parecer había entrado al baño, pero no escuchaba a nadie más que a mí, eso me hizo sospechar un poco y empecé a caminar de manera sigilosa.

Estaba caminando desde el balcón hacia adentro de la habitación muy despacio, solo escuchaba los carros pasando y como el agua corría por el lavadero del baño.

De repente escuché un pequeño sollozo, Ale estaba mirando el baño y estaba muy aterrada, la vi a lo lejos y me acerqué muy rápido para ver lo que había pasado.

- Ale, ¿Qué pasó? Acaso…

- S-Sasha-a…

Por algo me parecía muy familiar el lugar que había escogido, cada detalle, no me di cuenta al principio, pues seguía acomodado tal y como lo recordábamos hace 10 años atrás. Sí, esa casa era donde cada verano veníamos junto a mis padres a pasar un fin de semana, “el lugar perfecto” según mi padre, estaba ubicado a pocas calles de la plaza, pero a la misma vez estaba cerca de la playa, era hermoso, la mesa redonda para cuatro personas un mueble donde jugábamos Ale y yo, y en el baño estaba la cerecita que a ambos nos hizo llorar.

- E-es… Aquí... ¿tan pequeño era?... – No podía dejar de derramar lágrimas, mi voz estaba entrecortada.

Al lado de la puerta del baño había un dibujo que hice cuando era pequeño, recordé que en ese día mi padre se ofreció a ayudarme y los dos lo terminamos, justo al lado estaba marcado cada año y como crecíamos con el tiempo. Eran recuerdos muy valiosos para mí, Ale lloraba también conmigo y me abrazó fuerte en el cual pude sentir como los sentimientos fluían. Cuando ambos volteamos pudimos ver en la puerta como una tierna anciana de piel morena con su vestimenta de trabajadora estaba viéndonos con una mirada calmada y feliz, recordé que le decíamos “Ñita”, ella era la mucama que siempre estaba en los pasadizos limpiando cada rincón, jugábamos con ella cada vez que la veía pasar por el lugar cuando era pequeños.

- Ay niñitos, como han crecido. – Esa voz, era la voz de una persona que deslumbraba cariño en todas sus acciones. – Los dos nos acercamos a abrazarla fuerte. – Hace años me enteré de la noticia de sus padres, jamás hubiese pensado que tuvieran ese tipo de final.

- Jamás nos hubiéramos acordado de este lugar de no ser por esas marcas en el baño, ¿Cómo es que se quedaron allí por más de 10 años?

- Después de que se fueran por última vez, escuché que estarían empezando a quedarse más por la capital, y me dio mucha tristeza no volver a verlos, siempre esta habitación ha tenido un privilegio para ustedes, pero después de unos meses el lugar se quedó en quiebra, y estuvieron a punto de demolerlo, no sabíamos a quién pedirle ayuda, así que llamé a su padre para notificarle lo que había pasado, él hizo una importante donación hacia este lugar y se salvó de ser demolido, después un día limpiando la casa, sin pensar mucho una casa me informó que alguien pintado el baño donde ustedes siempre se quedaban por vacaciones, así que fuimos al cuarto, y al ver con mis propios ojos lo que estaba allí, me negué a borrar el dibujo y las marcas, es por eso que lo mande a cubrir de manera especial para que no se haga daño alguno, y desde entonces se quedó allí, en memoria a ustedes.

- ¿Y las personas que alquilaban el cuarto?

- Siempre que venían preguntaban por esa pintura y el por qué estaba tan bien cuidada en el baño. Cada persona de aquí sabía la historia y de sus padres, y siempre se quedaban asombrados con la historia. Desde allí este lugar cobró una reputación muy importante.

- La verdad me impresiona como ha crecido este lugar, y nos alegra mucho que mis padres hayan formado parte de esto. Gracias… - Yo me acerqué y la abracé con cariño, pues me había tocado muy en el fondo de mi corazón.

Recordar a mis padres era muy difícil para mí, pero en esta ocasión dejé atrás ese miedo, y simplemente los abracé en mi memoria. Ale sonrió y la abrazó también, aunque ella estaba mucho más emocionada que yo, la tarde avanzaba y ambos queríamos recorrer todo lo que había en esa ciudad, tal vez tengamos más recuerdos en la ciudad misma, nos alistamos de manera simple y salimos a pasear por la plaza, en ese momento recordé que debía llamar a Ayla, aunque probablemente estaría leyendo un libro antes de dormir.

- Hi Ayla, sorry if I’m late, nos demoramos un poco más de lo esperado.

- Hi Sasha!! Don’t worry, aún estoy despierta. – Escuchaba como se acomodaba en su cama para atender mi llamada, probablemente ya estaba durmiendo y yo la desperté, mal de mi parte.



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En el texto hay: lagrimas, amor, suspenso y duda

Editado: 23.02.2020

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