Fue un lunes que me senté junto a ella
Y ahora no paro de pensar en ella
Tenía el cabello negro y los ojos más bellos del mundo, la piel era clara y su sonrisa sutil,
Tenía la mirada suave y una hermosa voz, ella se llamaba Sheyla
La veía cada lunes y viernes pero cuando la veía disfrutaba cada instante justo a ella.
Lo único que pensaba en toda la semana era en su sonrisa y su mirada que enloquecía mi corazón , cuando me despedía de ella al segundo la quería volver a ver.
Tenía solo 2 años para enamorarla, yo la veía con discreción pero no era suficiente necesitaba algo más, le dedique un poema, creo que le gustó
"Lo mejor de este día fue sentarme a tu lado, hablar contigo y saber que eres más dulce de lo que había imaginado, y esa sonrisa que me cautivó sin dudarlo."