– Entonces, señor Rosser, lo escucho. ¿Qué es lo que no debo saber? – Ví a Dustin tragar saliva. Abrió la boca dos veces y enmudeció en ambas ocasiones, ¡No sabe qué decir! Tengo que salvarlo de ésta situación.
– ¡Oh rayos! – lo dije de una manera tan sobreactuada que me sorprendería si la directora se creyera lo que voy a decir. – Le estábamos preparando una sorpresa; – los miré a ambos con complicidad para que me siguieran el juego – les dije a los chicos que debíamos levantarnos más temprano, obviamente no me escucharon.
– Lo siento, Jaeny. Intenté despertar a Jake pero nada funcionaba; creo que ya se arruinó la sorpresa. – levantó las manos sobre sus hombros y ladeó un poco la cabeza. Es un buen actor.
– Lo siento, chicos, me hubiera levantado más temprano pero me quedé hasta tarde rezando para que la tormenta no pase a mayores y podamos volver a nuestros hogares, sanos y salvos. – mí hermano tampoco se queda atrás; casi arruino toda la actuación con una carcajada, luego de que dijo "rezando".
– No te preocupes, Jake. – le pongo una mano en su hombro izquierdo en modo compasivo.
– Tranquilo, hermano, rezabas por el bien de todos. Está bien. – Dustin pone su mano izquierda en la nuca de Jake. No lo puedo creer, ¿Está llorando? Hermano, a veces me sorprendes. – No te preocupes, está bien. – observo a la directora, ¡Se lo está creyendo todo!
– De acuerdo, chicos. Jake, no llores, lo lamento, no lo sabía. – puso ambas manos en su corazón – Gracias de todos modos, por querer hacerme una sorpresa. Vuelvan a sus lugares antes de que los demás despierten.
– Usted manda.
Mientras regresábamos a nuestros lugares, no pudimos contener la risa. Estuvimos como diez minutos riendo sin parar.
Ya van a ser dos días sin mí diario. Estamos en el día seis; al parecer nadie ha comentado nada sobre el diario o lo que hay escrito en él. Comencé a hacerme la idea de que por primera vez, lo había olvidado en casa. Quizás en el apuro, por llegar a la escuela a tiempo, no lo guardé.
Era la hora del almuerzo; Jake me trajo en un plato spaghetti con salsa y albóndigas. Adoro las pastas.
Dustin estaba terminando de comer cuando se detuvo a ver algo a mis espaldas. Parecía hipnotizado.
– Oye, no mires ahora, pero, el chico de chaqueta gris, 1.85 de alto, medio moreno, cabello castaño rizado...
– El chico detrás mío; entendí, James Bond ¿Qué pasa con él?
– Te está observando detenidamente hace cinco minutos.
Me volteo disimuladamente y era cierto. Incluso cuando me giré no paró de verme; su rostro me resulta familiar... ¡Ya sé quién es! Abrí los ojos como platos y volví a mí posición anterior con brusquedad.
– ¿Qué sucede? ¿Lo conoces?
– Salvatore Films
– ¿Salvattore Films? Wow, sus padres en serio deben odiarlo.
– Dejando de lado su peculiar nombre; iba a mí clase de química. Hicimos un trabajo juntos una vez.
– ¿Sólo eso?
– ¿Esperabas alguna gran historia romántica? Lamento decepcionarte.
– No... – me cruzo de brazos y arqueo una ceja – Bueno, sí. Pero estaba pensando, ¿Escribiste sobre él en tu diario? – la pregunta me tomó desprevenida; la cabeza comenzó a darme vueltas, buscando las páginas que quedaron guardadas en mí mente. Efectivamente. Él estaba ahí.
– ¿Y qué si aparece?
– Cálmate, pequeña Montgomery
– ¡Te dije que no me llamaras así!
– De acuerdo, tranquila; sólo supuse una teoría.
– Tus teorías podrían evitar la frase "pequeña Montgomery".
– Pero pierde la esencia si no lo digo.
– ¿Cuál esencia? – Sin responder, recogió su plato y cubiertos, se puso de pie y se marchó hacia la cocina.
Volví del baño custodiada por dos profesoras, quienes también me ayudaron a subir las escaleras debido a mí rodilla. En serio, debo ir al médico cuando salgamos de aquí.
Me quedé pensando en la conversación con Dustin, no sólo la parte en la que tenía una teoría sobre Salvatore Films, la cual podría tener que ver con la desaparición de mí diario; sinó también en el momento que habló de la "esencia" ¿a qué se habrá referido? Y lo que es aún más extraño, ¿por qué se marchó así sin más? Espero no haberlo ofendido.
Aunque ahora que lo recuerdo... ¿Qué sucedió con Austin Gillespie? No volví a verlo. En realidad, nunca lo ví. Quizás me lo he cruzado antes, ¿Será que lo conozco? Creo que nunca lo sabré.