Que bella es la lluvia…, que hermoso es el sol…, las aves que cantan…, con estilo y al son.
Los campos tan verdes…, bañados de aquel color…, que solo las flores pueden mostrar con amor.
Los niños van jugando…, carentes de odio o rencor…, ya que nunca han presenciado la malicia del mundo, y así está mejor.
Las parejas son felices…, todas desbordan amor…, que comienza con una mirada, y termina con una nueva vida que llena el mundo de calor.
La comida no es un lujo…, todos conocen su sabor…, y comparten la mesa sin importar género, raza, y posición.
El agua es tan cristalina…, tan angelical su melodía…, y no se imaginan lo bella que se pone al reflejar el mediodía.
El dinero no define a nadie…, aquí no hay diferencia ni distinción…, el que puede trabajar lo hace, y quien no, se le ayuda con la mano en el corazón.
Tu físico no es importante…, aunque a veces puedes llamar la atención…, pero no por ser desagradable, solo que tu gran personalidad se ve aún mejor.
La violencia es despreciada por todos…, el diálogo funciona mejor…, ya que es mejor sentarse a conversar para poder alcanzar la paz y lograr un mundo mejor.
Todas las formas de amar son respetadas…, y puedes vestirte como te sientas mejor…, después de todo, la igualdad es una realidad, no solo una ilusión.
Salir a la calle no es peligroso…, mucho menos aterrador…, ya que todos pueden volver a casa sanos y salvos sin importar la hora, el lugar, o condición.
Este mundo es maravilloso…, sin duda es el mejor…, pero sería aún más hermoso si pudiéramos hacerlo realidad, ¿o no?