✨ Reflexión ✨
Las cosas inesperadas son las que más nos marcan.
No avisan. No golpean la puerta. Llegan como un torbellino —a veces suave, a veces arrasador— y cambian todo.
Cuando el giro es bueno, sonreímos. Miramos al cielo, damos gracias, soñamos más alto. Sentimos que todo tiene sentido.
Pero cuando no lo es…
Cuando la vida se parte sin previo aviso…
Ahí solo queremos desaparecer. Lloramos, maldecimos, buscamos culpables y nos preguntamos por qué. O peor aún, por qué a nosotros.
Lo cierto es que nadie nos prepara para los giros malos. Para esos que no pedimos y que aún así llegan, rompiéndonos por dentro.
Y sin embargo, incluso el dolor viene con propósito. A veces, solo a veces, perder algo nos obliga a encontrarnos.
A crecer.
A dejar ir.
A empezar otra vez.
Porque la vida, aunque no lo parezca, es un constante movimiento.
Y tal vez… solo tal vez, estamos aquí para aprender a bailar con esos giros hasta cumplir la misión que nos trajo.
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mundos paralelos, drama y romance juvenil, superacion personal y amor
Editado: 16.05.2025