Jueves 26 de octubre. 22:30pm
Atenea estaba "peleando" contra el aire. Se detuvo y respiró profundamente. Hacía tiempo que no practicaba mis movimientos, pero, realmente no sabía que hacer para desahogarme. Esta situación me enfada un montón y mi faceta amenaza con salir en cualquier momento. Desde que hablé con Ethan ayer no he parado de darle vueltas al asunto. Tras confesarme que está en algo con Eva, las piezas encajaron como un puzle. Esas dos son unas zorras que sólo me usaron para su beneficio. Sé que a Lucía le llamaba la atención Dylan, lo dijo uno de los días que quedamos cuando él no estaba, y ahora Eva está con Ethan. Por favor, hasta un ciego lo vería. Se querían hacer un dos para dos, pero son demasiado cobardes para acercarse por su cuenta. Por eso me hablaron primero y se me pegaron como unas lapas, con el fin de que los presentará, como acabó pasando. Al mismo tiempo se aseguraban de que yo no estuviera con ninguno. Seguro que quedar todos juntos solo era parte de ese proceso de acercamiento... Incluso empiezo a dudar de si Eva ama realmente a Ethan o solo aceptó salir con él para que Lucía tuviera una oportunidad con el mejor.
En cualquier caso, no dejan de ser unas tremendas zorras. Maldición, sólo de pensarlo me entran ganas de goleparles y destrozar sus caras de zorras hasta que supliquen perdón. Pero si trato de volver a empezar, esa no es la mejor solución. Atenea respiró. Debía calmarse. Actitud seria y calmada. No debes dejarte llevar por las emociones, sabes bien lo que pasó la última vez
Su mente viajó a un recuerdo de hace 2 años y medio. Era verano, al atardecer. Su traje blanco estaba lleno de sangre, no suya. Una suave brisa movió su cabello. Dejó caer una persona a la que había golpeado hasta la inconsciencia. El suelo estaba lleno de personas golpeadas e inconscientes. Llevaban trajes iguales, pero al mismo tiempo había varios diferentes. Haciendo referencia a las distintas bandas. Atenea se alejó de lugar con pasos despacios mientras que algunas lágrimas caían de sus ojos. Alejó de su mente el recuerdo.
Cuando llegue aquí prometí empezar de nuevo, lejos de ese mundo. El abuelo quería que tuviera un futuro distinto también. Por eso debo intentarlo.
El teléfono de Atenea vibró. Era un mensaje de Tayler
***
Jueves
-Hey Atenea, perdón por la hora, espero no molestar
10:40pm
Tranqui, no lo haces, aún sigo despierta, ¿que pasa?-
10:41pm
-Mañana tengo la tarde libre, te apetecería venir a jugar videojuegos a mi casa
10:43pm
-Suena bien, ¿a que hora?
10:43pm
*Ubicación*
-Esa es mi casa, ¿te parece bien a las 5pm?
10:44pm
Sii, allí estaré :)-
10:45pm
***
Tayler es un chico realmente amable e interesante. No esperaba que por aquella simple acción se pasara dos semanas buscándome para compensarlo. Mucho menos pensé que encontraría alguien con quien compartir mis Hobbies. En la situación en la que estoy con mi nuevo grupo, tener a alguien ajeno a él como amigo, me tranquiliza. Por cómo pueda acabar eso.
***
Viernes 27 de octubre
Atenea estaba parada frente a la casa de Tayler. Revisó de nuevo la dirección. No se había equivocado. La casa se veía grande y muy moderna. Teniendo en cuenta como viste Tayler, no me sorprende que su familia sea rica. Finalmente se decidió por llamar al timbre. Espero unos segundos y después abrió. En efecto, era su casa.
—Buenas Atenea. Me alegro que llegaras, pensé que te perdiste— dijo Tayler mientras le ofrecía pasar. El joven levaba un chándal negro. Era la primera vez que veía a Tayler así, por lo que su sorpresa fue aún mayor.
—Por suerte no, lamento el retraso— dijo Atenea. Obviamente no le diría que no entre antes porque pensé que no era su casa. Ese secreto me lo guardo para mí
—No importa— dijo Tayler— El salón está por aquí. Tengo preparado todo
Al igual que el exterior, el interior también era moderno. El suelo era de una madera marrón clarito. Las paredes blancas y con cuadros bonitos. Me llevo al salón-cocina. Era enorme. Los sofares eran de un bonito color café, con una mesita de cristal en medio. La tele, de mínimo 50 pulgadas estaba colgada justo en frente. Como había dicho, estaba todo preparado.
Tenía una play5 conectada a la tele con dos controles remotos y el fornite con la sesión iniciada.
—Aquí tienes, inicia sesión en tu cuenta y jugamos pantalla dividida— dijo Tayler mientras me entregaba un control— ¿Quieres beber algo? ¿O comer?
—Estoy bien, gracias— dijo Atenea mientras iniciaba sesión en su cuenta— Tu casa es muy bonita
—Y eso que solo viste el salón. Puedo hacerte house tour si quieres— dijo Tayler
—No hace falta de verdad, no quiero molestar— dijo Atenea
—No pasa nada. Acompañame— dijo Tayler
Él le mostró el resto de la casa. Empezó por el jardín. Las cristaleras del salón daban a este. El jardín tenía una piscina con sus hamacas y una barbacoa. Después siguió con las habitaciones que había al lado de la cocina, el baño entre medias de ellas, su despacho, y por último su habitación. Era una suite con baño propio donde había ducha y bañera con jacuci.
Esto es extraño, en la casa no parece haber rastro de otras personas viviendo. ¿En qué clase de trabajo pagan tan bien para poder costear se esto solo?... Me hago a la idea de unos cuantos, poco legales la verdad... Aunque no sé ve como esa clase de chico.
—Umm, Tayler, ¿vives solo?— preguntó Atenea. Preguntando salgo de dudas
—*Obviamente no puedo decirle que soy el líder de una mafia. Tampoco la considero de confianza como para contarle sobre mi pasado*— pensó Tayler— La mayoría del tiempo. Mis padres viajan mucho por trabajo y me la suelo pasar solo. Es por eso que tengo la habitación más grande. No les importó que la tomara