Kiana
Fui directo al parque más cercano, me senté sobre un columpio y comenzó a llorar descontraladamente recordando cada preciado momento junto a Kevin, el día que lo conocí, nuestras clases juntos, el hermoso lugar, este último me hizo sentir verdaderamente única, como si hubiese sido especial para el pero ya veo que solo fue una ilusión que hoy fue rota al igual que mi corazón
No lo puedo negar más, estoy enamorada de Kevin desde el primer momento en que lo vi, mi chico guapo, con su sonrisa encantadora, ojos Inspiradores y mirada llena de vida y ternura
Al repasar cada detalle de el solo lloraba más y más era obvio que un chico tan perfecto como el no se fijaría en una tonta como yo, fui una ilusa al creer todo lo contrario
Siento un brazo en mi hombro y me gire esperando que fuera Kevin el dueño de aquel que de alguna manera me brindaba consuelo en la oscuridad de mis penas e ilusiones
Al girar me me encontré con un chico rubio, ojos verdes grandes, estatura bastante alta, una figura imponente que en su mirada expresaba comprensión y ternura, me quedé mirándolo un poco pero luego me recosté en su pecho y seguí llorando. Lo sé solo una loca lloraría y se dejaría consolar por un completo desconocido pero el me abrazo y en sus brazos me sentí segura, me brindaba un consuelo con solo ese abrazo y unas delicadas caricias en mi cabeza, este chico es como mi ángel en la oscuridad, con el que puedo llorar sin sentir pena, buscar un consuelo y encontrarlo en el.
Huele a una fragancia masculina deliciosa y a jabón de baño, su olor me hipnotiza a tal punto de no querer separarme de sus brazos jamás pero mi conciencia me pide a gritos que me separe, así que decido obedecerla y aún con lagrimas asomándose en mis ojos tomo una pequeña distancia
-Lo lamento- digo a aquel chico de brazos fuertes que me han brindado consuelo con tan solo un abrazo, es como un ángel pensandolo bien
-No tienes porque, necesitas a alguien que te brinde consuelo y apoyo así que aquí me tienes a mi- me dijo con una hermosa sonrisa y abriendo sus brazos invitandome a un abrazo que no dudo en aceptar
Me aproximo y entro en sus brazos y unas cuantas lágrimas se me escapan pero el las seca apresuradamente
-Ya no llores más, lo que sea haya pasado no merece tus lágrimas, me llamo Christian Walker, seré tu amigo de ahora en adelante, te brindaré consuelo en días oscuros, te apoyaré en los malos momentos, estaré hay para ti en los momentos más importantes de tu vida, seré un amigo real- me dijo al oido acariciando mi cabeza con una de sus manos mientras la otra reposaba en mi cintura
Jamás había sentido esto que siento con este chico pero sea lo que sea no quiero que termine nunca
NOTA: Mis queridos lectores lamento mucho la tardanza con este capitulo, espero lo disfruten y sigan disfrutando de mi libro