Capítulo 8

Capítulo 8

—Si hacemos el cambio de materiales en esta zona, el precio de los insumos bajaría considerablemente junto con el tiempo de construcción. —Señaló Blake mirando su laptop, se encontraba en la oficina de Sophie, el reloj de la habitación marcaba la media noche

—Disminuir los costos no valdrá nada si no podemos garantizar la seguridad y la longevidad de la construcción. —Dijo Sophie acercándose a su mejor amigo mientras abotonaba su blusa y le tendía su camisa al rubio

—No sacrificaríamos calidad ni durabilidad, en teoría esta zona será la menos utilizada, no habrá multitudes utilizándolo, pero lo que estoy diciendo es solo un consejo. —Aclaró el rubio tomando su camisa para vestirse

—Tenemos que ser cuidadosos con ese tema, una sola mala decisión y este proyecto podría venirse abajo, figurativa y literalmente.

—Mañana nos reuniremos con los contadores, ellos nos darán una visión más amplia de lo que podamos hacer y no hacer con el presupuesto asignado. —Dicho esto Blake cerró el aparato, los dos jóvenes salieron de la oficina rumbo al estacionamiento

—Nos queda poco tiempo para arreglar todos esos detalles, la fecha para comenzar con la construcción está cerca y no queremos ningún contratiempo. —Señaló Sophie arreglando su cabello, no le apetecía que los guardias lo vieran tan desordenado y comenzaran con los chismorreos en el edificio, aunque, según lo dicho por Blake, su extraña relación ya era del conocimiento de los empleados, en ese momento Sophie no pudo evitar preguntarse si Patrick ya sabía de eso, el chico solía comer en la cafetería, por lo que era posible que todo lo que se decía llegara a sus oídos y no le apetecía que el chico la juzgara por eso.

—Sobre lo del otro día acerca de la fiesta de tu abuelo. —Comenzó a hablar Blake atrapando la atención de la pelirroja, quien hizo acopio de todo su esfuerzo de no mandar a callar asu mejor amigo—. En serio deberías ir.

—Si tanto quieres que asista, tal vez deberías ir conmigo.

—No es una buena idea, ¿Ya olvidaste la última vez que vi a ese sujeto?, lo que menos necesita tu abuelo es una pelea en su celebración de cumpleaños.

—¿Y piensas que no habrá pelea si voy?, tal vez no lo hice en su momento, pero ahora lo único que me queda es odio por ellos. —Cuando termino de decir eso, Blake la tomo por los hombros deteniendo su marcha hacia el estacionamiento

—No te creo, mírame a los ojos y asegúrame que ya no lo amas. —Dijo el rubio bastante serio, Sophie quiso soltarse, pero el agarre de su mejor amigo era bastante fuerte, no tenía intención de responder eso, habían pasado dos años desde el incidente, a pesar de eso, en algún lugar de su corazón Sophie aun sentía algo por ese sujeto, pero si Blake sabia eso se molestaría, no porque él la quisiera, sino por el sufrimiento que esa persona le había causado a su mejor amiga

—No pienso responder eso, es ridículo Blake y si continúas comportándote así, me molestare contigo y eso es algo que no quiero hacer. —Blake la soltó permitiéndole continuar su camino, pero el chico la conocía bastante bien, aún sentía algo por el bastardo que la había herido tan profundamente, si tan solo no le hubiera prometido a Sophie que no lo volvería a buscar, iría a su encuentro y le volvería a romper la cara, esta vez se aseguraría de que no se volvería a levantar en mucho tiempo, si algo le había enseñado sus años en las calles era las mejores maneras de romperle la nariz a alguien.

Era medio día cuando Patrick despertó aliviado de que el fin de semana llegara de nuevo, ahogando un bostezo se dirigió a la cocina donde su madre le había dejado su desayuno en un plato, su progenitora se había ido temprano a su trabajo de fines de semana, el cual consistía de hacer el aseo en una casa enorme, una vez que termino su desayuno, tomo un baño rápido y salió de su casa rumbo al hospital

—Hey Kate, ¿Cómo está la mejor hermana del mundo? —Dijo asomándose por una pequeña rendija de la puerta, la aludida despego la mirada del televisor para posarla en su hermano

—¿Harás la misma pregunta cada que vengas?, soy tu única hermana, por lo que soy la mejor, aunque no quiera.

—Hieres mis sentimientos Kate, quiero ser un hermano mayor amoroso y tú lo arruinas. — Pat entro a la habitación tomando una silla para ponerla al lado de la cama de su hermana, por la forma en que la chica le había respondido su saludo, era claro para el que no se encontraba de humor para soportar las tonterías que Pat tratara de decirle para animarla, por lo que sin decir nada más fijo su vista en la televisión del lugar, seria Kate la que tomaría la palabra cuando quiera hablar. Fue solo hasta que termino la película que estaban viendo que la chica le dirigió la palabra a su hermano

—Lamento haberte hablado de esa forma. —Se disculpó apagando el aparato y mirando a su hermano, Pat pudo percatarse que los ojos de la chica lucían unas grandes ojeras, de igual manera su cuerpo lucía más delgado

—No te disculpes, solo tienes un mal día, todos tenemos eso de vez en cuando. —Dijo Pat tratando de quitarle importancia al asunto, sin embargo, su hermana negó con la cabeza antes de continuar hablando

—Aun así, no debí desquitarme contigo, estos días han sido horribles.

—¿Qué pasa?, ¿Has estado sintiéndote mal o algo así?