capítulo 24

Miro a mi alrededor y noto que estoy en un lugar totalmente desconocido.

Estoy en una habitación enorme, acostada en una cama enorme con sabanas rojas. Todo aquí en la habitación es lujoso, no lo puedo negar es muy lindo.

Trato de levantarme de la cama y noto que estoy atada de una pierna a la cama con una gruesa cadena.

-AUXILIO-gritó con todas mis fuerzas para que alguien me pueda escuchar.

La puerta se abre de par en par, para dejar a la vista a una mujer alta con unos años de edad a simple vista, tiene puesto un traje de cocinera.

-¿quién es usted?-pregunto a la defensiva.

La mujer no dice ni una palabra, saca de su bolsillo una llave y abre la cadena.

Me quedo viendo fijamente la mujer y cada uno de sus movimientos.

-levántate, toma una ducha y toma esta ropa-me habla seriamente y me entrega una ropa perfectamente doblada.

No hago ningún moviente y me quedo viéndola fijamente, como si esperar un ataque de su parte.

La mujer solo rueda los ojos y habla

-¿qué esperas niña?-dice mientras hace énfasis con sus mano.

Me levanto de la cama despacio y una vez será a la puerta del baño, entro con rapidez y le coloco seguro, miro a mi al redor en busca de un escape, pero no se encuentra ni una ventana.

MIERDA

Hago lo que la señora amargada me dijo y tomo una ducha en modo avión "las aletas y el motor"

Salgo de la ducha y me coloco la ropa que la mujer me entrego y por lo visto estas prendas son nuevas, ya que todavía tiene la etiqueta.

Salgo del baño ya totalmente vestida y la mujer me observa de pies a cabeza.

-siéntate aquí-dice señalando una silla que enfrente se encuentra un tocador.

Obedezco un poco dudosa y con mi cabeza a mil con funciones.

La mujer toma un peine y empieza a peinar mi cabello con total delicadeza, después de eso me agrega un poco de perfume.

-ya estas lista, sin maquillaje te vez más linda-dice asentando con su cabeza, como si estuviera hablando par sí misma.

Ignoro totalmente su comportamiento extraño y espero que me diga otra cosa.

-sígueme -dice abriendo la puerta de la habitación.

Me quedo un instante de pie y reacciono.

Camino detrás de la mujer y noto que es una casa enorme es "precioso"

-¿a dónde vamos?-pregunto a la mujer.

Esta no me dice ni una sola palabra, caminamos unos pasos mas y luego nos detenemos frente una puerta café de madera.

La mujer abre la puerta.

-sigue-me dice a lo cual yo tengo mucha curiosidad y obedezco.

Tomo un gran bocado de aire y me adentro a la habitación.

Cuando me adentro a la habitación me encuentro con lo que nunca me lo esperaba.

Enfrente de mi se encuentra mi madre de pie con una gran sonrisa, junto a un hombre que se encuentra sentado en una silla de escritorio enorme.

-bienvenida hija mía-habla el hombre de traje perfectamente elegante.

¿qué me acaba de decir?

-mamá ¿qué está pasando?¿qué haces aquí?-pregunto sin poder creer lo que veo...