Habían pasado cerca de dos meses, Ethan estaba totalmente curado gracias a mis intensos cuidados que constaban de no dejarlo hacer esfuerzos, había descansado más que bien hasta integrarse en las rutinas nuevamente, decidimos hacer mención de lo nuestro una semana después de que él se repuso, era un chico increíble, tanto espere por mi primer amor hasta encontrarlo a él.
Las patrullas eran cada vez más seguidas debido a que Lawrence se percató de zombies que escapaban de la pared de sillas en la entrada a la otra planta de la escuela, gracias a Sue y Judy pudimos conocer el paradero de otra escuela, una universidad que estaba a 3 horas de nuestra ubicación.
Sue: Si no estoy mal, la universidad está completamente vacía, el virus comenzó en vacaciones y por esa razón la escuela no tendrá a nadie dentro, además surtían la tienda escolar una semana antes con productos para medio año, la cual está intacta.
Judy: Si, también según el boletín que encontramos en la dirección de aquí, llenaban las bombas de agua para medio año debido a que los alumnos de deportes usaban las duchas.
Zion: Si eso es cierto y el colegio es privado, debería tener camas, ¿No?
– Me temo que no, si es privado tiene dormitorios, pero no están amueblados con las cosas necesarias.
Zion: Bueno, algo es algo.
Ethan se acercó con dudas abrazándome por la cintura desde atrás mientras todos nos mirábamos.
Lawrence: Como su líder debo decir que esto es una locura, pero si desean intentarlo, adelante.
– La comida esta por acabarse, debemos encontrar una solución, además no sabemos si de verdad esta la escuela con suministros.
Ethan: Bueno me apunto, este edificio está muy mal, la comida casi se termina y… seamos sinceros, el aroma a sangre podrida cada vez es más insoportable.
Scarlett: No iré, es muy peligroso con esas cosas afuera.
Sue: ¿Y no es peligroso que los zombies estén por derribar las sillas? Sea como sea, también iré.
Después de esa conversación estuvimos de acuerdo todos en ir a esa dichosa universidad, estaba con Ethan empacando nuestras cosas cuando se acercó por detrás apretándome contra el escritorio.
Ethan: Debemos tener cuidado con este viaje, prométeme que no te vas a separar de mi en ningún momento.
– Si me separo de ti promete que me buscaras, porque eso hare yo si tú te separas de mí. – Susurré dándome la vuelta quedando frente a él. –
Ethan me miro con sinceridad antes de levantarme por los muslos colocándome sobre el escritorio, abrió mis piernas quedando en medio de ellas, sonreí besando sus labios, era un beso lleno de promesas que al menos yo no pensaba romper, suave a diferencia de los besos apasionados anteriores.
– Si yo muero, debes saber que te amo demasiado, me has dado los mejores meses de mi vida, eres un chico increíble, me arrepiento de no haber tratado antes contigo, siento que pudimos pasar tantas cosas geniales juntos…
Ethan: Lo importante es ahora, daré mi vida por ti, antes de que tú te mueras lo haré yo por ti.
– No, Ethan tu eres lo más importante para mí, si te pasa algo… no podré lograrlo sin ti.
Ethan: Entonces vivamos ambos, como uno solo.
Lo abrace con fuerza quedándome así unos minutos, al final terminamos de juntar nuestras cosas en las mochilas quedándonos abrazados durante la noche. El nuevo día comenzó con un soleado cielo, el bello durmiente a mi lado seguía en el bosque de los sueños, me levante de la colchoneta cubriéndolo con aquellas frazadas, dejándolo dormir unos minutos más, aliste bien lo que llevaríamos. Estaba viendo por la ventana y un suspiro salió de mis labios cuando sentí dos brazos rodearme desde atrás.
– Pensé que seguías dormido. – Susurré alzando mi vista.
Ethan sonrió besando mis labios dulcemente. – Me dejaste solo, era obvio que me iba a levantar.
– Estaba revisando las cosas, estoy nerviosa por lo que pueda suceder una vez estemos afuera.
Ethan: Hey, deja de pensar cosas, estaré a tu lado en todo momento y no dejare que nada te suceda…
Asiento buscando consuelo en sus fuertes brazos los cuales me rodearon en un fuerte abrazo. – Eres lo más especial e importante para mí, te amo.
Ethan: Yo te amo aún más pequeña.
Después de estar así por unos minutos salimos con nuestras cosas al aula 1-C, ahí ya estaba la mayoría, a excepción de Zion y Scarlett.
– ¿Y los otros dos?
Lawrence: Scarlett no quiere irse y Zion fue por ella.
– Ya veo… – Susurre observando a Eugene, él solo se acercó a Ethan susurrándole algo.
Ethan: Ya venimos.
– ¿Dónde van? – Pregunté a Ethan él cual solo me sonrió sin decir nada.
Lawrence: Irán al sótano, por las armas para defendernos si algo sale mal.
– ¿Armas?
Lawrence asintió fijando su vista en la ventana verificando que no hubiera muchos zombies para nuestra salida.
Judy: Lawrence se encargó de buscar silenciadores en una de las veces que fuimos a buscar comida, estamos listos para que todo salga bien. – Sonrió dándome un abrazo. – ¿Lista Mad?