Capitulo 27

Edward

Al  volver al motel me debato por entrar a mi auto o ir a buscar a Sandy, finalmente ni siquiera lo pienso bien cuando me encuentro subiendo las escaleras y rezando que ella aun siga ahi. El odio, la rabia, el enojo se acumula en mi sistema cuando me estoy acercando a la puerta, si no fuera mujer, me habría abalanzado a ella a sacarle la mierda, y debo recordarme una y otra vez que es del sexo femenino para no cometer una locura, sin emabrgo, al verla mis ganas de golpear desaparecen de inmediato, pues jamás le he puesto la mano encima a una mujer, y esta vez no sera la primera. Al notar mi presencia se levanta de la cama y me mira asustada. Noto que ha estado llorando en cuanto la veo a los ojos, sin embargo, se encoge en su lugar cuando trato con todas mis ganas de tranmitirle todo lo que siento a atraves de la mirada. Me quedo en la puerta mirándola. Siento asco. ¿Cómo pudo hacerle algo asi a ella?

—Edward…—comienza hablar, pero ni siquiera soy capaz de escucharla.

—¿Por que lo hiciste?—le digo sin dejarla acabar la frase. Doy un par de pasos y me siento en la punta de la cama recargando mis codos en mis piernas mientras oculto mi cara en mis manos.

—No lo se—dice en un hilo de voz. Esa no es la respuesta que esperaba—Edward por favor, perdóname—dice sollozando mientras siento como avanza hacia a mi.

—No te acerques—le espeto mirándola  los ojos. Veo el dolor atravesando su mirada pero ni siquiera me conmueve, me da rabia que se atreva a sentirse mal cuando acaba de hacer mierda a Linda. Una vez mas me recuerdo que es mujer—Por que…mierda…hiciste eso—vuelvo a preguntar tratando de calmarme y no perder los estribos. Me pongo de pie mientras me acerco lentamente a ella. Sandy retrocede sin quitarme los ojos de encima hasta que choca con la cama quien la obliga a sentarse en ella—¡RESPONDE MALDITA SEA!—grito. Ella se sobresalta y aparta la mirada asustada.

—No se—repite. Me doy la vuelta y golpeo la pared de ladrillo con mi puño solo para contener la impotencia y ganas de golpear algo. Ella ahoga un grito y volteo a mirarla nuevamente. Siento la punsion en mis nudillos que en el momento me impide cerrar la mano por el golpe, pero poco me importa—Tuve celos—dice al cabo de unos segundos y mi impotencia vuelve—Oi cuando le contaba a su amigo que la habías llevado a esa cabaña que tu madre te dejo…que habían estado juntos..—la observo sin decir nada mientras trato de tranquilizarme internamnete. Ella tiene la mirada clavada en el piso—A mi nunca me llevaste alla, nunca te quedaste mas de un dia un conmigo…nunca  fui…

—Nunca fuiste importante para mi—espeto con asco y rabia. Ella alza la mirada para toparse con la mia. Me acerco despacio y me agacho a su altura para no perder el contacto visual—Jamas te vere con otros ojos—digo lentamente sabiendo que le estoy haciendo daño—Nunca llegaras a imporatrme lo suficiente como para no querer hacerte sentir miserable como lo estoy haciendo ahora. Me da lo mismo verte llorar en este momento, incluso me da rabia que te atrevas a llorar después de lo que le hiciste a ella—me conozco lo suficiente para saber que la estoy atravesando con mi mirada—Ilusa por creer que algun dia me enamoraría de ti, jamás te di indicio de cariño, de aprecio, ni de amor, nunca te di nada Sandy—digo haciendo una pausa solo para observar como sus muros de rudeza caen frente a mis ojos. ¿No le gusto lastimar a Linda?
ahora que pague—Algo mas—digo mientras me pongo de pie y la miro, sin embargo, ella mantiene la vista donde mismo, como si yo aun siguiera estando de cuclilla frente suyo—Ten en cuenta, que esto no te lo perdonare jamás.

Dicho aquello doy media vuelta y cierro lapuerta de un golpe haciendo que resuene en todas las paredes. Me voy sintiéndome mas miserable que antes, crei que al lastimar a Sandy me sentiría mejor conmigo mismo, sin emabrgo, solo me produce arcadas. Me subo a  mi auto decidido a buscar  a Linda, siento que han pasado siglos desde que se fue corriendo detrás de un atobus. No se muy bien a donde ir, asi que solo me apresuro a ir donde Bock. Quizás ella esta ahí buscando refugio en el gimnasio. Me paso los semáforos en rojos sin importarme los bocinazos que me lanzan los idiotas detrás del volante. Al cabo de unos minutos dejo el auto mal estacionado y me bajo corriendo.

Ignoro todas las miradas que voltearon a verme, cuando abri las puertas de par en par tras el impacto de haberlas empujado con fuerza. Paso por alto a Bock que  amaga con decirme algo y me apresuro a caminar a paso rápido por el pasillo. Oigo golpes del cuarto en que siempre soliamos enfrentarnos, asi que termino corriendo los pocos metros que me separan de ella, sin embargo, al entrar solo veo a Peter. El me mira con el ceño fruncido y me marcho antes de que se animara a decir algo.

—¿¡Donde esta!?—le pregunto a Bock mientras me voy acercando. Me dirijo a su oficina y abro la puerta ignorando a Bock, sin embargo, ella no esta ahí.

—Se fue Edward—dice Bock detrás mio. Volteo a verlo y paso mis manos por mi pelo con desesperación.

—¿A donde se fue?—pregunto con la clara desesperación en mi voz. Al ver el rostro de Bock me indica que nada bueno esta pasando. Niego sin comprender y el agacha la mirada con dolor, con pena.

—No se donde fue—dice luego de un rato—Solo se que ella, no volverá en un buen tiempo por aca.