Darksouth: Detrás de la verdad

Capitulo 30

Linda

Desperte antes que todos en la casa de Bea. Los tres dormimos en la sala, por lo que desde la cocina podia ver a Bea y a Todd dormir tan placidamente que me daba  envidia. Pues lo real de todo esto, es que he estado sentada en esta silla desde las cinco de la mañana y ya son las ocho. Apenas dormi dos horas. No he podido pegar el ojo debido al insomnio llamado  Edward Scott. Me estuve preguntando toda la noche en como fui tan tonta. ¿Cómo fue que cai en sus garras? Ahora recuerdo lo que bea me decía sobre el.  El tiene el don de persuadir y enamorar a las chicas…sobre todo a las rubias y tontas como yo. Me rio porque llorar ya lo he hecho mucho.

Apoyo mi codo en la mesa de la cocina y sostengo mi cabeza sin saber que hacer. Mi mente revuela al chico de rizos y ojos oscuros. Rememoro todo de él, cuánto me gustaba aun sin querer admitirlo. Cuantas peleas, golpes, palabrotas y molestias. Sin embargo, no puedo evitar sonreir con recordarlas. En su mayoría, Edward me hizo sentir bien en todo momento. Pero se que no puedo perdornarlo. Solo con pensar en lo de Sandy y el motel se me revuelve todo el estomago. Nunca crei que él fuera capaz de algo asi. Lo he visto, he visto como actua, como es en realidad…él, se abrió como nunca cuando fuimos a la cabaña ¿Cómo es posible que ese mismo chico me hubiera roto en un millón de pedazos? Quizas todo estaba dentro de su plan, pero todo fue tan convincente, tan verdadero. Pude notar el dolor en sus ojos al hablar de su madre. Tal vez eso fue verdad, pero quien sabe. Yo soy la menos indicada para saber eso. Crei conocerlo bien. Incluso lo he defendido ante todo aquel que lo ha juzgado sin conocerlo, pero ahora me doy cuenta de que jamas lo he conocido, ni siquiera yo me conozco bien. Recuerdo haberle dicho a Bea que jamás me involucraría con alguien como el, y aqui estoy. Destrudia por alguien como el. Que ironico se me hace todo.

A veces pienso que Edward era justo lo que mi vida necesitaba. Él llego como un tornado que se llevo todo a su paso incluida yo, y al final…el tornado paso a través de mi y  me dejo en medio de la nada. Me hirió y me hizo mierda…pero a su vez me hizo mas fuerte. Y se que si puedo sobrevivir a un corazón roto, a la decepcion, inseguridad y desconfianza…se que podre sobrevivir al huracán. Estoy segura. Sin embargo, no se si quiero quedarme a esperar esa catástrofe, la verdad es que no quiero, no puedo y no debo esperarlo. Debo irme, huir de ahí, buscar un lugar sano donde pueda vivir en paz de ese huracán que se aproxima, pero por otro lado, quiero hacerle frente, quiero convertirme en uno, quiero ser el huracán que remoline su vida. Y como soy tonta, solo quiero ser el huracan que acomode su vida, quiero ser ese tornado que sacuda su vida y lo saque de la oscuridad en que ésta, quiero ser la luz en él, aun cuando él solo me llevó a la oscuridad. Una horrible y dolorsa oscuridad.

¿Podre al gun dia volver a ser lo que fui antes de el? Aunque ahora que me lo planteo bien, no quiero. No quiero volver a ser la misma, quiero seguir descubriéndome. Quiero ser lo que soy realmente, a pesar de que esa parte irracional en mi, solo lo relacione con Edward. Me dice una y otra vez, que gracias a el me estoy descubriendo. Y aquí salta mi lado racional a decir que no es asi, que yo soy mucho mas de lo que puedo ser con el. Y se que  lo necesito para seguir haciéndome mas fuerte, porque Edward, tiene esa capacidad de hacerte potente. Te saca de quicio y quieres abofetearlo a cada rato, pero si no hubiera sido asi, jamás habría sacado esa fuerza interior que tengo. Y lo amo por eso, y se que esa sera la razón principal por la que jamás podre odiarlo. No lo odio. Yo lo amo.

Lo amo tanto que me quema el pecho. Tanto que llega a dolerme como una tortura permanente que existe en mi interior. Pero es un dolor soportable, de esos dolores que despues de un tiempo ya te acostumbras, y es mas, ante el minimo indicio de no sentirlo me hace sentir enferma. Quizás sea algo masoquista, o dependiente. Se supone que el amor no duele. El amor sana, el amor cura, y todo eso que siempre lo muestran en las películas. Pero en este caso, el amor arde. Me arde el alma cuando pienso en el, y no lo había entendido hasta hace muy poco, mejor dicho, hasta ayer. No crei que su engaño llegara a causarme tanto dolor. Aun siento el ardor recorrer mi cuerpo al recordarlos en esa habitacion de motel. Aun siento el vuelco que dio mi corazon cuando el nunca desmintió lo que Sandy decía. No se si alguien ha sentido esto mismo. Obvio que todo el mundo ha pasado por un corazón hecho trizas, pero me pregunto si a todos les afecta de la misma manera. Yo creo que no, pues de ser asi…nadie podría superarlo. Todos viviríamos con una nube gris encima de nuestras cabezas.

—¿Estas bien?—doy un respingo en mi lugar al oir la voz de Todd. Hago un pequeño movimiento con mi cabeza para despejar mi mente y volteo a ver a mi adormilado vecino.

—Si—susurro. No pretendía que mi voz saliera tan débil. Pero supongo, que después de haber estado tanto tiempo callada, es lo mejor que he podido lograr.

Todd me observa en silencio y me regala una tierna sonrisa. Se que no me encuentra bien, pero agradezco que no insista. Es muy tierno.

—¿Has desayunado? Tengo mucha hambre—dice dándome la espalda para abrir el refrigerador. De ahí saca una lamina de queso, la enrolla y se la come. Me da risa y logre soltar una pequeña carcajada. El abre los ojos sorprendidos y se rie también.



#41761 en Novela romántica

En el texto hay: amor, mentiras e intriga, pandillas

Editado: 25.05.2019

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