Dash

2

El encanto Dash.

Me quedo sin aliento luego de aquella corta pero difícil conversación, ese chico es nuevo, no lo había visto antes en la universidad.

─Oh vamos Rachel, es Derian Dash, hijo del más prestigioso político que ahora disputa por ser el nuevo alcalde de Denver, y a decir verdad está fabuloso──

Camino por los pasillos hasta la entrada, por hoy no tendremos más clases así que iré hasta mi habitación, soy una pereza andante, lo único que hago es comer y dormir.

Me vuelvo a topar con Derian, esos ojos negros como la oscuridad me atrapa de inmediato, mi piel se eriza. Decido quitar mi vista de él y sigo mi camino.

─Vaya chico, que manera de mirar tiene─

Sigo caminando y rodeo el campus de la universidad, ahí se encuentran nuestros apartamento tipo estudio. Hay otros más refinados que son para aquellos que pueden pagarlo, entro a mi apartamento tiro mis cosas en la sala y voy a mi habitación, cierro los ojos y me quedo dormida.

 

─Rachel, abre la puerta─ golpean fuerte la puerta

─RACHEL─

Me levanto de golpe, y voy hasta la entrada a ver quién toca la puerta de esta manera y cuál es la urgencia.

─Rachel Colton, que hace dormida hasta ahora? Acaso no piensas ir a la fiesta de iniciación como todos los años?─

─No tengo ánimos de ir Natasha, y esa no es la manera de despertarme, que ocurre contigo?─

─Oye vamos Rachel, no es para tanto, debemos ir no seas aburrida, recuerda que este nuevo curso se unieron los hermanos Cash, ya los viste?─

─No tengo ánimos de ir, si, uno de ellos está conmigo para un análisis de literatura. Bastante pesado y prepotente─

─Cuál de los tres?─ me mira con emoción

─Derian Cash─

─Oh vaya Rachel, me imagino que está de rechupete Derian o no?─

─Natasha, Derian es un chico normal, para nada atractivo─

─Eso no te lo crees ni tú, así que levanta ese culo de la cama y vístete, que iremos a divertirnos esta noche─

Coloco mala cara y aun así me voy a cambiar, me baño, busco una ropa cómoda y sencilla.  Salimos de casa y caminamos hasta una cuadra, donde sería la fiesta de iniciación, en un estacionamiento abandonado, la música a todo volumen, carros lujosos, vasos por el suelo, estudiantes fumando, bebiendo, teniendo sexo con ropa, todo era un caos. Debí quedarme en casa.

Natasha me agarra por el brazo y camina rápido hacia una multitud de estudiantes, todos están concentrados en algo, nos escabullimos entre los estudiantes y quedamos delante de todos. Ahí nuevamente veo esos ojos negros como la oscuridad, su mirada me penetra totalmente, mi piel se eriza y siento mi corazón latir rápidamente. No entiendo que sucede, ¿qué hacen?

─ ¿Que hacen?─ le susurro a Natasha

─Ellos son los Dash, y están peleando con Bruno sobre quien es el que manda en esta universidad─

─Que idiotas─ pongo los ojos en blanco

La voz de Bruno hace que preste atención a lo que dirá.

─Queridos amigos, estos hermanos creen que por tener todo el dinero del mundo vendrán a mandar aquí en esta universidad, y sobre todo quieren ser mejor que yo…─

Buuuuuuuuuuuu─ abucheos se escuchan por todo el lugar─

─Perfecto, como soy Damián Dash te reto delante de todos a que demostremos quien es el mejor, eso sí, si te gano te arrodillaras ante mí, frente a todos en el campus y me dirán de rodillas que soy mejor que tú, y nos respetaras por el resto de tu vida, aceptas?─ su sonrisa maliciosa me deja hipnotizada

─ Acepto, y si yo te gano te iras con tus hermano de esta universidad─ Damián sonríe.

─Acepto─ estrechan sus manos, Damián le pasa una llave a Bruno y todos volteamos a ver que iban a manejar, y eran unas BMW S1000 RR, las ultimas motos último modelo del año.

Me quedo perpleja al ver aquellas maravillosas motos, debo decir que se me cae la baba al verlas, son demasiados hermosas, sigo admirándolas hasta que Demián llama mi atención.

─Oye tú, ven, competirás junto a mi─

─ ¿Qué? ¿De qué hablas?─

─Que vendrás a competir conmigo, o acaso ¿eres sorda?─

─Yo no voy a competir, ni me montaré en esa cosa y mucho menos contigo─ refuto.

─ Te montaras por las buenas o por las malas, niña─

─Púdrete─ me doy la vuelta y lo dejo ahí hablando solo. Agarran mi brazo y me llevan arrastra, trato de ver y era Damián.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.