Capitulo 8 El ciclo de los rascacielos

Todos se encontraban inconscientes en el suelo, sin fueron David y Del quienes los encontraron antes que todos, sin muchas cosas que pudieran hacer los comenzaron a arrastrar a un lugar seguro.

El lugar era distinto de la habitual, el lugar se miraba ostentoso, edificios tan grandes que no se alcanzaba a ver el final de ellos, un tono azulado oscuro pareciese ser de noche tenue en aquel mundo, pero una sensación abrazadora del sol decía que era plena luz del día, por las ropas de los chicos hacía que sudaran rápidamente, en los alrededores de aquellos edificios de hormigón y vidrios reflejantes no se miraba nada.

Los chicos habían metido a todos en el edificio más cercano. Para Del y David alcanzaron a escuchar el sonido que hacia el portal donde miraron a los chicos contemplar el paisaje para segundos después desmayarse, esto también les había sucedido, pero no tuvieron la suerte de ellos.

El edificio se sentía inhóspito, no se miraba a nadie merodeando por los alrededores, eran quienes estaban revisando aquel edificio en busca de respuestas pero solo eran habitaciones vacías, solamente había cosas en las recepciones, incluso el ambiente a su lado era visible desde dentro del edificio, los relojes que colgaban de las paredes siempre marcaban las 12:43, cuando el la manecilla iba a llegar al 12, volvía nuevamente a comenzar, era un bucle de tiempo tan extraño que los chicos no entendían nada, ni personas, ni una guía clara solo edificios vacíos sin vida aparente.

Esperaron tranquilamente a que todos despertar, una de las condiciones más extrañas de aquel lugar era que no existía el sonido del habla, ellos podían hablar, pero las palabras nunca llegaban a los oídos del otro, pero las sonidos del reloj, sus pasos se escuchaban perfectamente lo que hacía que se perdieron más fácilmente.

Algo extraño de aquel lugar era que cada cierto tiempo algunos grabaron aparecían por el edificio poniendo letras sin sentido, otros algunos dibujos de niños pequeños y los más inquietantes de ellos que pusieron los pelos de punta a ambos chicos cuando exploraban “Abandona toda esperanza”, “no existe salida en este lugar”, “Dios nos ha abandonado”, “solo somos marionetas en un juego de ajedrez”, “En la deriva perdiendo la esperanza de todo”, “Sáquenme de aquí” “Mama lo siento”.

Mensajes tan crípticos que en ocasiones rondaba la cabeza de los chicos, algunos de los cuerpos por razones desconocidas, se encontraban iluminados de una manera diferente, a veces eran luces rojas, verdes, naranjas, de ellas provenían voces, algunas de charlas comunes, otras de personas discutiendo. Pero ningún color representaba emoción, era una sensación extraña de ser observado en esas habitaciones, por lo que ninguno terminaba las conversaciones que provenían de ellas.

Pasaron alrededor de 20 minutos más y los chicos hablan despertado finalmente, intentaron comunicarse, pero todo era completamente en vano, los recién llegado se tocaban los labios y solamente hablaban para ellos mismos, miraban el lugar con pánico en ese momento por asares del destino se mira otra grabado, pero esta vez todo la sala de estar estaba repleta de ellos incluido el suelo, se quedaron confundidos era la primera vez que un suceso como ese pasaba.

Las palabras “Aléjense” era la palabra que más se repetía en las paredes, las letras y garabatos tomaron vida y se dirigían a un punto en concreto del techo dictando palabras que se considerarían alguna poesía ortodoxa de un mal poeta.

“Aquellos quienes fuimos una vez, nos perdimos en el vasto mundo azulado.

De la calma a la tranquilidad, se consideraba un paraíso libre de la agitación.

Todos gozaban de él gran regalo que se entregó, nadie cuestiono el porqué.”

Después de aquello las palabras tomar forma de un texto común y corriente.

“Todo lo que fue una vez termina convirtiéndose en experiencias vividas, todo aquí azulado, vivimos bajo el sol abrasante todos los días, nos deshidratamos, nos morimos de hambre, algunos se comían entre ellos, otros se alejaron, pero el destino era el mismo, todos terminaríamos en el mismo lugar. Esperando el milagro un edificio surgió de la nada, era la forma en que los dioses nos ayudaban, un lugar para resistir las temperaturas, aunque vacío y sin vida el edificio, cubría del sol y era para agradecerse, en el miramos por primera vez la hora siempre la misma, nunca cambiante, las habitaciones vacías, se escuchaban voces que era lo que decían en aquel momento, me sentía tan observado cuando abría aquellas puertas.”

El texto dejaba de aparecer y desaparece todo paulatinamente, los chicos estaban tan confundidos. Cuando finalmente estaban tranquilos para pensar en ideas era complicado organizarse. Utilizaban sus celulares para expresar sus ideas

“Chicos vinimos por ustedes este lugar es muy peligroso, esperemos que la anomalía fuera de aquí suceda para poder retirarnos. Sin fecha exacta – Isaak.”

“Pasaron alrededor de 1 hora o menos desde que entramos en este lugar, como ustedes nos desmayamos al entrar. Sin fecha exacta – Del.”

“Tenemos que seguir moviéndonos no me agradan este tipo de lugares tan cerrados deberíamos investigar más lejos. Sin fecha exacta – Pist.”

“No podemos ni siquiera terminamos de explorar este edificio, en algunas habitaciones hay pistas, puede que con ello desvelemos como salir de aquí, aunque es muy extraño ver ese tipo de habitaciones donde se puede entender las conversaciones. Sin fecha exacta – David.”

“Pist tiene razón este lugar no me agrada demasiado, y si vagamos en otro edificio para encontrar algo más. Sin fecha exacta – Edward.”

“Vayan ustedes Yo y David terminaremos de investigar este edificio, vayan al de enfrente entre los 4 entre más busquemos mejor. Sin fecha exacta – Del.”

“Vinimos a este lugar para encontrarlos y sacarlos, ahora nos dicen que deben investigar aquí este lugar tan inhóspito para encontrar la salida. Sin fecha exacta – Bruno.”