Capítulo 8: 24 de diciembre.

Uno pensaría que tras haber empezado el día en un mundo que siempre quisiste visitar y que es parte fundamental del sueño de toda tu vida, las cosas irían como la seda, pero lamentablemente este día no fue así. Un día que irónicamente debería ser de fiesta por la fecha misma y lo que esta significa.
Primero se escuchó un sonido muy agudo en mi cabeza a causa de una interferencia muy fuerte en mi chip, algo que básicamente nunca sucede por la tecnología que tienen que como dije desde el inicio no puede ser hackeada; posterior al sonido una voz doliente y con una clara dificultad para hablar comenzó a decir algo que daría a todos la noticia que desde hace un tiempo estuvo transitando por el sistema solar. “*tosidos*… A las personas… *tosidos* que puedan escucharme… *tosidos* No están a salvo”, parecía que había terminado de comentar pero tras la pausa prosiguió. “Saturno durante estos últimos años ha estado presentando un… *tosidos más fuertes* aumento tecnológico exageradamente alto y hoy lo han logrado… *hiperventilación de la voz* ya son capaces de lograr los viajes espaciales y ahora ningún sitio es seguro… Humanos de la población restante, todos aquellos que puedan oírme *pausa ligeramente larga nuevamente* No mueran” Tras terminar de hablar el silencio de hizo permanente, me asome por la ventana de mi habitación y todo por fuera estaba completamente detenido, aquella voz llego a absolutamente todos….
- ¿Qué sucedió? – Pregunto una voz femenina en mi cabeza.
- ¿Disculpa? – Respondí yo, sin recordar la voz. - ¡Ikoru! – Dije nuevamente tras recordarla. - ¿también escuchaste eso?
- Si… fue… raro. ¿Crees que sea cierto? – La voz de ella parecía estar muy tranquila a pesar de todo lo que eso significaría.
- No lo sé… - La voz parecía un poco fingida, pero había algo que me hacía pensar que no era falso.
En ese momento un mensaje general por parte de las autoridades se hizo emergente: “Les solicitamos que guarden la calma, lo que han escuchado ha sido una transmisión ilegal que no tiene relevancia con la realidad. Están seguros”
- Vaya… Parece que era simplemente una broma de mal gusto. – Dijo Ikoru, con su voz aún más tranquila de lo que ya estaba.
- Sí, eso parece. – En verdad no pensaba eso, pero simplemente lo dije para no alarmar. Los chip tienen una seguridad exageradamente alta, y únicamente las autoridades son capaces de transmitir a toda la humanidad… Y si dijeron que fue ilegal entonces algo extraño está sucediendo. – Oye te hablo en un ratito, ¿vale? Necesito hacer ir a buscar empleo jeje y con esto que acaba de pasar creo que la cosa se pondrá un poco extraña ahí afuera.
- Claro, claro. ¡Buena suerte! – Respondió Ikoru
Hubiera querido seguir platicando con ella, pero al menos por este día creo que no será posible, al caer en la cuenta del día me di cuenta de que Kolhun no se encontraba por aquí cerca.
- ¡Kolhun! – Dije llamándolo por llamada mental. - ¿Dónde estás?, ¿recibiste el mensaje extraño ese?
- Hola, Javier. – Respondió del otro lado Kolhun. – Salí desde hace tiempo, vi una oportunidad de trabajo muy buena y no quise desaprovechar entonces pues heme acá, y no. ¿De qué mensaje hablas?
- No recibiste ese mensaje… Que extraño. – Dije un poco confundido. – Entonces tal parece que solo nos llegó a algunos… No importa, ¡que tengas un buen día! Te veo más tarde, también debo de buscar donde trabajar.
La situación estaba siendo algo extraña… Ese mensaje solo nos llegó a algunos, pero la pregunta es: ¿por qué?, aun y cuando la guardia solar dijo que todo estaba en orden no creo que haya sido una simple coincidencia… Además de que tal parece que solo mandaron el mensaje a las personas exactas que recibieron el otro, de lo contrario Kolhun me habría dicho algo sobre ello… Solo espero que no nos estén mintiendo.
Al salir del departamento todo había vuelto al ritmo normal, personas flotando por los alrededores, autos de aquí para allá y algún que otro peatón que caminaba hacia un lugar que solo ellos saben dónde es; por fortuna había encontrado un posible empleo que iba exactamente de acuerdo a mis capacidades y era nada más y nada menos que conductor privado, sin esperar invitación puse el mapa y me fui hacia el sitio donde entrevistaban, y apenas llegar todo era horrible… Estoy seguro que me contratarían sin problemas pero algo me decía que no debía estar en este sitio, todo se veía realmente descuidado, los autos se veían completamente chocados y maltratados y en esta ciudad chocar a una velocidad promedio de 400km/h de una altura entre 200 metros y 500 metros, la cosa era de muy mal ver, decidí dar la vuelta e irme a buscar otro lugar pero antes de que siquiera pudiera dar el primer paso una mano tomo mi hombro y con una voz siniestra dijo:
- ¿Javier? – Ya había agendado cita y ahora no tenía escapatoria.
- ¿Señor Cortez? – Pregunté avergonzado de que me viera retirándome.
- Estás contratado. – Dijo simplemente a lo que voltee rápidamente.
- ¿qué?, Si ni siquiera me ha hecho una entrevista o una evaluación… ¿Así de simple? – Estaba realmente confundido por la situación y su respuesta me dejo más asustado de lo que ya estaba.
- No tenemos muchos postulantes, por lo que generalmente el primero que llega es el que se queda, y como puedes ver a tu alrededor, eres el único; te espero mañana a las 7 de la mañana en ese lugar. – Señalando la entrada y justo después se dio la vuelta y se fue.
Camine fuera de ese lugar completamente atontado por lo fácil que fue encontrar un empleo, y asustado por cómo se veía todo… Si no hay postulantes eso solo me hace pensar que todos los anteriores conductores se han matado conduciendo para ese sujeto de aspecto horrible, un tipo de quizás 2 metros de alto, en un traje blanco impecable, lentes oscuros, cabello rojizo peinado hacia atrás que le llega hasta el cuello y con más cicatrices en la cara que yo en todo el cuerpo… Que dios me ayude si es que puede.
- ¿Hola? – Dije en mi chip intentando conectarme con la mente de Ikoru.
- ¡Espera! – Respondió la voz al otro lado de la llamada tras varios segundos, y unos cuantos más tarde volvió a hablar. – Ahora sí, ¿dime?
- Tengo empleo… - Dije de una forma que no denotaba emoción en absoluto.
- Pues has de haber encontrado algo muy malo, si lo dices de esa manera. – Respondió ella burlándose un poco.
- No, no. Pasa que todo sucedió de una forma muy extraña. – Comencé a decirle a la vez que recordaba toda la escena para que la viera gracias a la conexión del chip.
Al verla, ella se imaginó a si misma encogiendo los hombros y desapareciendo como una nube que se la lleva el viento para después decirme que tenía que irse; la llamada terminó y tras 6 horas de haber despertado ya tengo un empleo que básicamente me contrató solo y el día me recibió con un mensaje que me hará pensar cosas tan absurdas como probablemente ciertas el resto de la semana… Insisto, espero que todo haya sido una simple broma de mal gusto de algún rufián que estaba aburrido.