De mí enamórate [1]

Capítulo 56

Me desperté temprano para prepararme, el día por fin ha llegado. El sentimiento de melancolía me invadió después de que me levanté de la cama, al parecer todavía no podía creer que era la última mañana que vería mi habitación, el departamento completo. Me despedí por última vez de este lugar, ¡tantas cosas que he vivido aquí! Siempre creí que era algo bastante bobo el encariñarse con cosas materiales pero realmente me estaba costando salir de aquí. Tocaron la puerta, ya es hora de irnos, mis amigos querían llevarme al aeropuerto para pasar unas últimas horas juntos.

 

—¿No sientes algo raro dentro de ti al dejar este apartamento? —Cuestiona Mike—. Yo no vivía aquí y siento algo muy raro en el pecho.

—Si, por supuesto que me siento extraña, es algo triste saber que voy a salir y que ya no voy a regresar.

—¿Qué piensas hacer con el departamento? —Pregunta Becca.

—Pertenece a mis padres, ellos sabrán qué hacer.

 

Mike y Nick se encargaron de tomar mi equipaje y salieron del apartamento acompañados de Rebecca, yo me quedé unos momentos más, para darle el último adiós al lugar que me acogió este par de años.

 

En cuanto subo al auto ellos se encargan de recapitular viejas historias que habíamos vivido juntos. Aventuras en el parque de diversiones en dónde Nicholas perdió un converse en un juego, aquel día en el que me caí de la bicicleta y Mike no dejaba de tocar el raspón que me hice en la rodilla, cuando patinamos por Sunset Blvd. y accidentalmente chocamos contra un vendedor de souvenirs, aquel día en el que conocimos Skeleton, las noches de videojuegos, tantos momentos que me hacían querer regresar el tiempo para vivirlas una vez más.

 

        

 

Al llegar al aeropuerto Noah ya me esperaba en una de las salas con un vaso de café en la mano y con los lentes de lectura puestos con la vista en un folleto. Nicholas y Mike caminaron junto a mí con mi equipaje, Noah apenas nos vio se puso de pie para ayudar a mis amigos con todas valijas y así despedirse de ellos también.

 

—¿A qué hora sale tu vuelo? —Pregunta Mike.

—A las nueve, pero tengo que pasar por todos los trámites... Ya saben.

—Así que... ¿Son los últimos momentos que vamos a tener contigo? —Cuestiona Becca—. Hasta que regreses por las vacaciones.

—Vendré en navidad, lo prometo.

—Falta mucho para navidad. —Se queja Michael.

—Se pasará rápido. Prometo hablarles de vez en cuando.

—Son nueve horas de diferencia —Dice Nicholas—. Espero que podamos coincidir.

 

Noah volteó a verme, poniendo ambas manos sobre mis hombros, de alguna forma dándome a entender que era hora de que comenzara a despedirme.

 

—Ahmm… Elisse…

—Sí, sí.

 

Me volví hacia mis amigos, Becca se abrazó de Mike con los ojos cristalizados, estaba a punto de soltarse a llorar.

—Elisse, es hora de irnos. —Anuncia Noah.

 

Me acerqué primero a Becca, al ser la primera que se soltó a llorar, la abracé fuertemente, escuchándola sollozar en mi hombro. Acaricié su rubio cabello mientras le decía que pronto volveríamos a vernos, que incluso podía ir a visitarme junto con Mike a París.

Cuando nos separamos, tuve que mirar hacia el techo para evitar llorar como Becca, aún no quería hacerlo. Después vino el turno de Mike, él me abrazó fuertemente y al oído me dijo lo mucho que significaba en su vida, me agradeció por todo lo que he hecho por él y por los momentos, finalmente me dijo una vez más lo mucho que va a extrañarme. Escuché como su voz se quebró al decirme eso último, por al igual que yo, no quería romper en llanto aún.

 

—Cuídala mucho en París. —Le pide Mike a Noah, estrechando su mano y posteriormente dándole un corto abrazo a manera de despedida—. Fue un placer convivir contigo este tiempo, tengan un buen viaje.

 

Llegó el turno de Nicholas, quien me acarició el rostro como si fuera un lienzo que es tocado por un fino pincel. Nos miramos directamente a los ojos sin decir una sola palabra y finalmente nos entregamos en un abrazo que parecía eterno.

 

—No es necesario que te diga que te voy a extrañar como un loco. —Susurra a mí oído—. Ya lo sabes. Sé que vas a ser muy feliz, estás a unas horas de cumplir tus sueños.

—Me vas a hacer falta tú.

—Pero debes irte, Pierre-Cortot te está esperando, la vida de tus sueños te está esperando… Debes tomar ese vuelo.

 

Me besa en la frente dejándome ir. Volteé a ver a Noah, él tomó mi mano para comenzar a caminar; después de unos cuantos pasos voltee a ver a mis amigos por última vez. Miré a Becca sollozando en el pecho de Mike y él tratando de no llorar, cuando cruzamos las miradas nos dijimos adiós con la mano. Me rompía el corazón verlos así...




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.