Capítulo 32 Novios a escondidas

Alexa

Estamos juntos aunque es a escondidas, mañana le dan él alta a Cristian, Fernanda está aquí pegada como un chicle la verdad me incomoda, y me pone celoso saber que ella está cerca de él y yo solo lo puedo ver desde lejos, aún no hemos podido hacer la entrevista para pedirle disculpas a Sofía, gracias a dios no le han dicho nada de lo que le hicieron a su padre, porque si se entera sé que estará muy triste y se atormentará pensando que su padre morirá igual que su madre, voy a mi casa y, ya que he visto que Fernanda está a punto de matarme , me voy tranquila también porque sé que Cristian está bien si no, no me despegaba de él en ningún momento, estuviera quien estuviera no me daría miedo con tal de estar a su lado —Señora Cristina voy a casa, como esta Sofi— preguntó preocupada —Sofía dice que está bien, pero yo conozco a mi nieta sé que se siente sola y llora por los rincones, Alexa haga lo que sea para que mi nieta la perdone, ella la necesita — estas palabras me atormentan, ahora más que nunca tengo que tener el perdón de Alexa, me voy sin decir ni una palabra, voy a la revista —Jefa necesitó pedirle perdón a una niña y que mi vídeo se haga viral, sé que suena ridículo, pero esa niña es como mi hija y la he lastimado demasiado — añado —Está bien, no hay problema, así todos duran que amamos a los niños y que siempre los tenemos presenten —me preparo para la revista, todos los medios están pendiente a mí no saben para qué he organizado esta entrevista —Seguidores ahora más que nunca necesito su apoyo, ayúdenme a que una niña muy importante para mí me perdone, Sofía este mensaje es para ti, perdonadme mi vida, me he equivocado, pero sabes que te amo, eres como mi hija y eso nunca cambiará, por favor te lo suplicó perdóname — es todo lo que dogo y me marcho, mientras los periodistas siguen haciéndome preguntas tontas, no les respondo a ninguno solamente esperó que Socia vea esto y que me perdone algún día, es de noche ya reviso los comentarios de la revista y todos me apoyan —Vamos Sofía perdona a Alexa —son casi todos los comentarios que me llenan de alegría, estoy acostada en la cama, cuando suena el timbre de mi casa, a estas horas quien será, solo puede ser Paula, es la única que me visita a estas horas de la noche, abro la puerta —Sorpresa — me quedo en shock al ver a Cristián en la puerta —Que haces aquí estás loco, tienes que estar en el hospital —

—me he fugado para verte y sí, estoy muy loco, pero es por ti — me sonrojo al escuchar esto —Bueno entra— entra y ambos nos reímos, entra y me carga hacia la cama, nos besamos sin parar —Ahora si serás mía de verdad — me susurra esto me vuelve loca, me quita la blusa, mientras yo le quitó él pulóver, nos lanzamos hacia la cama con ganas —El preservativo — le digo que lo use, estamos juntos, la pasión y él deseó que sentimos sale a la luz, nos acostamos La luz impacta mi cabeza, nos hemos quedado dormidos, al girarme veo a Cristian desnudó en mi cama, abrazándose, creí que todo era un sueño y no es así, hemos pasado la noche juntos —Cristian— lo llamo para que se despierte, que sí se enteran de que no está en el hospital, esto será una bomba —Amor buenos días, quisiera despertar todos los días del mundo a tu lado — me besa Cristián y por supuesto yo le correspondo, no quisiera que se fuera, quisiera que estuviera todo el día a mi lado y no salir de esta cama y estoy seguro de que él también lo desea muchísimo —Sabes que me tengo que ir por mi hija, si no me ve hoy se volverá loca, por cierto amor vi lo que dijiste en la entrevista me encanto, gracias por querer a mi hija como si fuera tu hija, esto me hace admirarte y quererte mucho más, la noche de ayer nunca la olvidaré fue increíble— comenta esto besándome y poniéndose la ropa —Amor suerte con la loca de Fernanda —opino riendo —No te preocupes que lo de Fernanda y mío terminara todo hoy mismo, te amo— dice y me vuelve a besar, me siento muy feliz porque he estado con el hombre de mi vida y al fin terminara con la loca de Fernanda para empezar de cero conmigo Cristian Estoy muy feliz, al fin he podido hacer que Alexa sea mía solamente y de nadie más , voy a terminar con Fernanda, contrataré a mis abogados para que permitan que pueda ver a mi hija y estar con ella sin que Fernanda me la quite, ese es mi gran miedo por mi hija, llego a la casa —Papi viste lo que Alexa ha hecho por mí, la he perdonado ahora la quiero mucho más, Papi quiero verla pronto por favor —

—Si mi amor que bueno que la vas a perdonar — Fernanda nos interrumpe _ Que dices vas a perdonar a la traidora de tu niñera porque digo unas babosadas y por eso la perdonaste mocosa —la interrumpo. —A quien le dices mocosa Fernanda —le grito cuando se trata de mi hija soy un ogro —No me grites acuérdate que estoy embarazada — mi hermana sale al escuchar los gritos espantosos —Que sucede, están asustando a Sofi sus gritos se escuchan por toda la casa —

—Hermana por favor llévate a Sofi a otro lado, tengo algo que hablar con Fernanda —le doy un beso en la mejilla a Sofía y Lorena se la lleva a jugar —Escuchame que sea la última vez que le hablas a si a mi hija, si le hablas de nuevo así tendrás serios problemas conmigo —se ríe en forma de chantaje —Que me harás, me matarás que miedo —No te mataré, pero aunque te cueste reconocerlo sabes que no te amo, estoy enamorado de Alexa y no quiero estar más contigo, en cuanto pueda me divorciare de ti —

—Cristian me siento mal —la verdad no le hago caso porque siempre inventa algo parecido cada vez que discutimos —No voy a caer esta vez Fernanda quiero él divorció entiende de una vez — la miro y de repente cae en el piso, esta vez es cierto. —Ayuda— grito corren todos hacia la sala, mi padre va conmigo en el carro hacia el hospital, estoy muy preocupado mi padre la lleva en sus piernas mientras yo conduzco el coche —Hijo está sangrando —no puede ser ahora sí que estoy mal, si le pasa algo a mi niña es mi culpa porque no le hice caso a Fernanda cuando me digo que se sentía muy mal, gracias a dios ya Sofía estaba durmiendo y no se ha enterado de esta locura, no quiero que le pase nada a mi bebé, al fin llegamos al hospital, traen una camilla de inmediato y la meten en el salón. —Doctor como esta, estará bien mi hija— preguntó angustiado —Tendrán que esperar, solo les puedo decir que la bebé está en peligro —