... D ...
Respirar es un eco,
último
del dolor antes del alma
en vilo.
Hablar es un eco,
invoca
a lo que menos deseas.
Anhelar es un eco,
mata
y te embriaga en la soledad.
Paranoia es un eco,
inevitable
vacío que deja sedienta
a la felicidad.
(Solo acepta)
Que la paranoia vuelva
a su persona más favorita
para atormentar el rastro
de paz hundida.
Que anhelar se convierta
en el vacio habitual otra vez.
Que hablar se vuelva en la adicción
que te hace caer
en las repeticiones que arrastras.
Que respirar sea el último
aliento mortal antes de trascender.
Solo acepta...