Déjame amarte con una mirada

capítulo 10

He dejado a Faby en la plaza... y no dejo de pensar en lo increíble y agradable que es y no puedo creer como sucedieron las cosas, y lo que es más no puedo creer le hice el amor a Fabiana, a mi niña, mi amor...  y aunque ya no es algo que sea relevante yo soy su primer hombre y eso me enloquece.

Me contó que  su esposo nunca fue su esposo, o sea, estaban en planes de matrimonio cuando murió en un accidente de tránsito y me dijo que ella era muy conservadora y tan tímida que nunca hubo ningún tipo de intimidad entre ellos, aunque no debiera yo me siento feliz de ser el único hombre en su vida … es que es una mujer  tan candente ni ella se imagina todo lo que provoca en mí, es que su voz, su mirada, la forma de gemir..., esta mujer me tiene fuera de si.

Hoy quiero sorprenderla con algo especial y mi departamento será el lugar ideal para lo que tengo en mente, es íntimo y cómodo porque quiero tenerla en mi cama.

La espero en la cafetería como todas las tardes pero esta vez llevo mi jeep. Al llegar se sorprende cuando le digo que tengo algo preparado sólo para ella, me mira con curiosidad pero no dice nada y noto lo nerviosa y ansiosa que está por saber que es lo que tengo para ella pero se contiene de preguntar..., por eso me gusta es discreta. Cuando llegamos a mí departamento se nota incomoda y yo la tranquilizo y estoy satisfecho porque al abrir la puerta su cara se ilumina al ver lo que tengo preparado.

Llené el lugar con flores blancas y el piso lo llené de pétalos, en el centro  hay una mesa arreglada elegantemente y tomando su cintura la invito a sentarse y le digo que me espere unos segundos tengo todo preparado y llevo la cena y un buen vino. Esta feliz lo noto en su mirada enciendo unas velas y apago la luz, comimos rico, hablamos de todo, nos miramos con cariño con deseo, con amor. Luego le sirvo su tan típico té y yo un café

— Gracias Marcos, nunca nadie había tenido un detalle así  conmigo— dice emocionada

—me alegra saberlo— y me acerco más a ella y la beso muy   despacio disfruto cada rincón de ella,  recorro con mis manos su cuerpo suave tan blanco que al excitarse se ruboriza por completo esta hecha para recibir caricias, me dedico a tocarla, besarla y moder cada centímetro de su cuerpo y ella se deja hacer y gime con cada caricia y toca mi pelo mi cuello como amo sus manos sobre mi… bajo mi mano a su húmeda femineidad que suavidad noto como su cuerpo se estremece al sentirme ahí. En eso estoy cuando siento que llaman con insistencia a la puerta obligadamente nos detenemos Fabiana corre al baño mientras yo enciendo las luces y me arreglo un poco… abro la puerta y no puedo creer lo que veo-  es Diana que esta ante mi… 

—Buenas noches Marcos, se que no me esperabas pero vengo por ti… vengo a recuperar lo que es mío— me dice sin más preámbulos ¡acaso esta mujer esta loca!
Al girar veo a mi amada Faby que ha presenciado la escena y nos sigue mirando con su bolso en mano y pasa por mi lado se despide y se va quiero sin decir palabra..., yo solo quiero correr tras ella pero no puedo, Diana entra y cierra la puerta de un portazo.
Creo que será una larga noche y yo solo quiero ir tras mi Fabiana

—Y esa niñata ¿quién es?- dice Diana señalando a través de la puerta a Faby de forma despectiva— ¿es por quién me has reemplazado?

—¿Que quieres aquí Diana y como llegaste a este lugar?

—Martín visitó a tu padre y estaba Marcia contándole de que estabas en tu mejor momento— y acercándose a mi y hablando en voz casi en susurro dice- y yo quería comprobar que tan bien estabas 

—Ya me has visto ahora lárgate de aquí… no te quiero un minuto más en este lugar

—Vaya si que estas cambiado… y muy guapo

—No quiero saber más de ti Diana… ya no te guardo rencor sólo siento lástima por ti ojalá hayas cambiado pero por lo que veo no lo has hecho en lo más minimo

—Pero asi te gusté y aun me amas no puedes dejar de hacerlo soy lo mejor que encontraras en tu vida- lo dice con una soberbia y vanidad que llega a dar nauseas
—Pues fijate Dianita que equivocada estas, pues hay alguien mil veces mejor que tu y no le llegas hacer ni sombra al lado de ella no eres nada solo una carita bonita pero hueca vacia por completo

—Lo dices por la pueblerina que salió corriendo de aquí… si claro como no

—Pues si ella y esa pueblerina como tu la llamas pudo borrarte de mi vida por completo, se ganó el cariño y confianza de Marcia y es la mujer de mi vida y tu nunca serás como ella, jamás.  Así que lárgate de aquí sino quieres que llame a la policía y será peor para ti— digo con calma pero firme 

Diana no responde solo me mira con su acostumbrado desprecio y lentamente se levanta y camina hacia la puerta y se da vuelta y queda enfrente de mi

—Lamentarás tanto lo que estas haciendo ahora, te arrepentirás de haberme despreciado. Cuando te avergüences de ella y no puedas presumirla en público,  ahí verás el error que has cometido… cuando veas que no es como yo será demasiado tarde ya no estaré para ti

—Tienes razón Faby nunca sera como tú, ella es de las mujeres que son de un solo hombre, me respeta, no me engaña, no busca mi dinero, ama a mi familia, cocina de maravillas y querernos  es su prioridad… si, tienes razón es tan distinta a ti y no tengo nada de que arrepentirme



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En el texto hay: amor, miedo y angustia, mirada

Editado: 02.11.2018

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