Capitulo VI

-Cómo estuvo eso de que usurpaste en mi privacidad- soltó Jaden algo molesto  
- bueno tú me negaste la información  
-era motivo para que revisaras mi celular…? 
- tuve que conseguirlo por mis propios medios  
- que sea la última vez que  toques mis cosas Ethan  
-amargado – bufé  
- no soy amargado  
-si lo eres  
-que no  
-que si  
-No lo soy  
-si lo eres 
-no lo soy  
-si lo eres 
-bueno ya- puso su mano en el cuello de mi Camisa- escúchame y quiero que entiendas muy bien lo que te voy a decir  
-te escucho 
-la más mínima e insignificante cosa que le hagas, voy a matarte  
-uy mira como tiemblo- me burle  
- esto es serio Ethan 
-está bien- me soltó y camino fuera de mi habitación 
- espero que lo hayas entendido- fue lo último que el chico dijo antes de salir. 

Jaden parecía una fiera cuando se trataba de Natalie. Eso es lo que un verdadero amigo, ni siquiera fue capaz de darle un número a su hermano porque se trataba de su mejor amiga.  
Y creo que eso está bien supongo sería la clase de mejor amigo que yo quisiera para mi novia. Hoy había invitado a Natalie a salir con Migo y aunque Jaden este molesto no me importa mi pequeño ángel lo vale todo. Al parecer Natalie le dijo a Jaden que me diera su dirección ya que el dejo el papel en la pequeña mesa junto ala lámpara de noche. Se qué mi hermano confiaba en mí de lo contrario ya me hubiesen exigido salir de la vida de ella, Amo a ese Ángel y no lo puedo negar ella tan perfecta, dicen que cuando estás enamorado tus ojos se cuelgan de manera que los defectos de alguien no quedan a la vista haciéndola perfecta para ti. Pues en ese caso estoy súper enamorado de mi pequeño Ángel, y si ella es un Ángel que callo en la tierra es tan dulce que me cuesta creer que existan ese tipo de personas pero ella es el vivo ejemplo de la pureza de algunas almas y creo que eso y su perfecta voz me enamoró. 
La dirección que me entrego Jaden estaba cerca de nuestra casa tome las llaves del auto y conduje hasta la casa de Natalie. 
Me acerque a la puerta y toque el timbre el repique del eco resonaba en el lugar  
Uno 
Dos  
Tres  
Cuatro  
Sentí como alguien abrió la puerta y automáticamente una estúpida sonrisa salió en mis labios Sentía mi Corazón palpitar a mil por hora esa simple acción como su mirada, ahora estaba más que seguro que lo que sentía por ella era amor.  
Estaba enamorado de la chica más dulce y hermosa que había conocido, ese aroma que podía reconocer a kilómetros  de distancia ese que era tan de ella, su cabello, su forma de vestir, su forma de ser tan encantadora, su piel pálida pero perfecta, en dónde quisiera estar cada mañana al despertar, y encontrarla a mi lado, con su sonrisa, eso… eso sí seria perfecto para mí. 
Si es cierto que yo no era igual a los otros chicos, ni ella tampoco Lo era ambos éramos diferentes pero eso nos hacía encajables a menos para mí.  
Antes sentía que algo me hacía falta a pesar de tenerlo todo había algo que no llenaba el vacío y ahora lo entendía en mi vida faltaba ese ángel. 

-creo que estoy muerto- solté embobado en su mirada  
-porque dices eso…? 
--porque acabo de ver un Ángel y ellos solo están en el cielo  
- supongo que eso le dices a toda  
-nop- ella me miró atenta- eras de echo la primera conquista en toda mi vida  
- eso no te lo crees ni tu mismo- añadió la chica algo divertida 
- si no me crees Jaden te lo puede confirmar 
-digamos que te creo  
La chica camino y yo me adelante para abrirle la puerta del auto  
-adelante precioso Ángel – ella me respondió con su  Hermosa sonrisa 

En el camino ella puso unas canciones de al parecer su banda favorita, me gustaba escucharla cantar lo hacía realmente hermoso. Luego de un rato llegamos al cine y me baje rápidamente para abrirle la puerta. 
-baje preciosa dama- a ella parecía causarle gracia  
- todos son así  
- perdón…? 
-olvídalo a veces digo cosas sin mucho sentido  
-no lo creo, de un Ángel tan hermoso como tú  
Ella hiso silencio y nos adentramos en cine a ver la cartelera al final nos decidimos por una comedia  
-buenos nos podría dar dos refrescos grandes y no de fresa y tú…?- le pregunté a la chica  
-igual  
- si dos refrescos de fresa grandes y dos palomitas por favor  
Luego de recibir nuestro pedido nos dirigimos a la sala y nos sentamos en la parte superior a esperar que la película comenzará  
-Entonces ya tienes claro lo que estudiaras…?- preguntó sacándome de mis pensamientos 
-aun no pero supongo que será algo que tenga que ver con los negocios de mi padre  
-no se supone que debe ser algo que tú quieras…?  
--tu lo has dicho se supone  

Ambos quedamos en silencio cuando la película comenzó, yo solo me dedique a admirarla como se concentraba en lo que veía me gustaba verla  
reír, era simplemente perfecta.  
Estuve así casi toda la película, cuando de pronto sentí como acomodó su cabeza en mi hombro, una sensación extraña recorrió mi cuerpo, pero era una sensación agradable. Me gustaba, me gustaba saber que era ella la única que causaba ese tipo de efecto en mi.  

Sin duda estaba absolutamente enamorado de ese precioso Ángel