12/11/1448...días después de que ariel y misael se retiraran de la torre avalon, más bien, habían sido "invitados a retirarse", debían organizarse mucho mejor, hacer las cosas cuanto antes, la información que habían obtenido era de gran ayuda, aunque los ponía algo tensos el hecho de que se enfrentarían a un gran ejército liderado por 6 arcángeles, el tiempo era muy limitado.
pueblos y ciudades habían sido destruidas casi por completo, no seria extraño que no quedara nadie más en la tierra en solo unos días más, sin importar que, debían conseguir las cuatro armas restantes, para eso era necesario separarse por primera vez desde que iniciaron.
Arturo—...¡tsk! De verdad, lo siento mucho, estoy pidiendo demasiado, estamos con el tiempo en nuestra contra
Alice— esto es aún más difícil ahora, pero, ya llegamos hasta aquí, iremos hasta el final, son cuatro más, cuatro viajes y tendremos las siete
arturo— no, serán solo tres viajes mas, podría decirse que tenemos suerte que dos de ellas estén juntas, aunque será más difícil convencerlos, nos dividiremos en tres grupos y nos reuniremos en este punto del mapa
Eris— ¿cómo serán los grupos...y cuando saldremos?
Arturo— se que es muy apresurado y tienen dudas, verán...el primer grupo será "apolo y alice", el segundo "iris y naim", finalmente el tercer grupo "eris y yo"...no podemos tardar mucho tiempo, las cosas serán más complicadas ahora, el tiempo límite para encontrarnos serán catorce dias, por favor, preparen sus cosas, esta noche coman cuanto quieran y descansen bien, por la mañana realizaremos nuestro último viaje.
Esa misma noche, tal como dijo, comieron hasta no poder más, por alguna razón el tiempo pasaba mucho más rápido ahora que estaban algo nerviosos, sus preocupaciones podían notarse en el rostro de cada uno, ¿que pasaría cuando estén las siete juntas?, Todos sabían que intentaría hacer Arturo, eris estaría junto a él este último viaje, poco más de media noche y ella no podía dormir, nadie podía hacerlo en realidad, pero ella tenía muchas cosas en que pensar...¿por que fueron así los grupos?, En cada uno había un portador de historia...¿por que el la eligió para acompañarlo?, Pensó que ese podría ser uno de los últimos momentos junto a él, al pensar en eso, un dolor agudo y un sentimiento de vacío atacaron su pecho, no podía dejar eso solo así, tenía que hablar con el una vez más.
eris se levantó de su cama y fue directamente hacia la habitación de Arturo, mientras subía un piso más arriba, pudo ver una tenue luz que brillaba desde su habitación, su puerta estaba entreabierta y pudo verlo sentado delante de de un escritorio, sosteniendo una taza de café con su mano derecha y escribiendo con la izquierda, no quiso entrar como si nada, así que toco, en respuesta a eso se escuchó un "adelante", cuando entro a la habitación, el papel y la pluma ya no estaban, ¿lo escondió? o tal vez ¿lo imaginó?, Eso no importaba ahora, lo importante era hablar con el.
Eris— escucha,yo-
Arturo— hay algo que te preocupa, ¿verdad?
Eris—...es que...pensar que todo acabará pronto, no se siente muy real
Arturo— es muy real, podrías alegrarte, solo un poco más y nadie vivirá con miedo, todos serán libres de nuevo
Eris— si, eso lo se, pero...no se como explicarlo, pese a todo, fue divertido pasar tiempo aquí, no quiero que esos días terminen, se que cada uno irá por caminos diferentes cuando todo acabe
Arturo— puede ser cierto, pero eso no significa que nos veremos por última vez
Eris— "veremos" dices, pero tu...(hablando para si misma)
Arturo— perdona, ¿decías algo? No pude oírte
Eris— no, no es nada...escucha ¿podría pasar la noche aquí? Solo por una vez, quisiera dormir contigo
Arturo—...¿eh?...esta bien, si eso te deja más tranquila, puedes dormir aquí
Esa noche, ambos durmieron juntos, en el sentido más inocente de la frase, en solo unos instantes el dolor en su pecho y el sentimiento de vacío se habían disipado, sus preocupaciones tenían menos importancia, la calidez de estar junto a quien quería se antepuso a todo pensamiento, poco a poco sus ojos fueron cerrándose, como si se tratara de un sueño, todo parecía haber sucedido en segundos.
Parte 2
13/11/1448...actualmente eran las 06:00 AM, todos se habían levantado más temprano de lo habitual, sus pertenencias ya habían sido preparadas y estaban tomando su último desayuno en la torre, nadie se atrevía a decir algo, el ambiente estaba tenso, algunas manos temblaban, aunque ya habían hecho esto, es la primera vez que se separarian, no podían permitirse fallar.
para romper ese ambiente pesado, Arturo dio un aplauso llamando la atención de todos.
arturo— ...(suspiro) muchas gracias a todos, sin ustedes aquí, no podría haber llegado tan lejos, este es el último paso para ustedes, dieron lo mejor y por eso los admiro, demostraron fuerza y valentía ante situaciones inesperadas, han crecido mucho en este tiempo, les pido que me presten su ayuda una última vez...cuando todo esto acabe, por favor, ayuden a las personas más necesitadas, muchos hogares se han perdido, hay que mantener a las personas unidas para crecer y mejorar juntos...iris, naim...felicidades por estar juntos, a ustedes les daré un regalo especial...esta torre ahora les pertenece, este es y seguirá siendo su hogar
Iris— no, espera...dijiste que te gustaba este lugar, que la biblioteca era tu lugar en el mundo, este lugar te pertenece solo a ti
Arturo— ya no, este es mi regalo hacia ustedes, cuídense y no peleen entre ustedes dos, recuerda, incluso el hombre más terco abandonará su orgullo para proteger lo que más ama...naim, mira el jardín...¿sabes? Hasta la rosa mas hermosa tiene espinas, eso también forma parte de su belleza, no deberías cortarlas, así evitarás lastimarla y lastimarte a ti también en el proceso.
Lo que al principio sonaba como un discurso motivador, termino siendo una despedida, en unos días se verían de nuevo, pero esta era una oportunidad de despedirse con una sonrisa como si todos fueran una familia, no paso demasiado tiempo para que todos salieran, los grupos ya se habían separado.
Parte 3
07:15 AM, el primer grupo en adelantarse fue el de apolo y alice, dos personas que nunca habían hablado más de lo necesario, era algo incómodo viajar juntos ya que ninguno de los dos decía algo, dirigiéndose en dirección hacia el sureste por un camino rocoso, su destino era la ciudad del sol naciente, llamada así por su alta temperatura, si bien era el camino más corto, los caballos tendrían ciertas dificultades para cruzarlo.
mientras alice estaba a unos metros adelante observando el paisaje, donde a lo lejos se veían montañas y se escuchaba el canto de las aves en una mañana soleada sin rastro de una nube, apolo, por su parte tenía una mirada seria, el quería regresar con su gente lo antes posible, nunca imaginó que hablaría con "normalidad" con quienes consideraba su enemigo, Arturo era un caso medianamente aceptable, luego habló con ariel y misael, pero ahora su compañera tenía sangre de un Ángel corriendo por sus venas, por si fuera poco, la espada que el utiliza, originalmente pertenecía a Azazel, el Ángel que fue desterrado por proporcionar armas a los humanos.
mientras se sumergía profundamente en sus pensamientos, noto que alice se había detenido, la razón era porque sin notarlo ya era el mediodía y lo llamo para que comieran algo y pudieran descansar un poco.
13:10 PM, iris y naim fueron en dirección noroeste, en contraparte a el grupo anterior, el paisaje era algo hermoso, un campo llano rodeado de lavanda, el aroma y la vista eran relajantes, era seguro que ese camino les fue asignado a ellos para que pudieran pasar mas tiempo como pareja, iris y naim eran solo eran jóvenes de 16 y 17 años, esto seria una salida normal si la situación no fuera grave, pero ahora mismo podían disfrutar un poco, aliviar sus preocupaciones sin pensar tanto en el tiempo límite que tenían.
como si fuera en un abrir y cerrar de ojos, tras varios descansos, la noche comenzaba a aparecer, normalmente llegarían en varias horas a su destino, pero estos lugares no eran tan cercanos como hasta ahora, pronto no se vería nada, los caballos fueron amarrados y comenzaron a preparar el lugar para dormir en un hoyo en el suelo luego de colocar cuidadosamente varias mantas.
15/11/1448...dos días después de haber salido, Arturo y eris habían llegado a un pequeño pueblo que parecía haber sido olvidado por el mundo, no había un nombre para el mismo, ya que era un pueblo independiente, sin importar que tan lejos de el resto de pueblos o ciudades esté, los destrozos habían llegado sin problemas a este lugar.
no había rastros de plantas o agua, parecía un desierto total, los animales evitaron estar cerca de ahí, las casas parecían ruinas antiguas y como los refugios bajo tierra no habían sido preparados ahí, las pocas personas que sobrevivieron luchaban por permanecer vivos en esta situación desfavorable.
comida, agua, todo era escaso...mientras Arturo y eris apenas entraban al pueblo compartiendo lugar en su caballo, desde ambos costados saltaron dos personas cubiertas por una capa color arenisca, en el suelo se escuchó un golpe producido por dos impactos que chocaron al mismo tiempo, era una perfecta sincronía, el de la izquierda era muy veloz que casi no pudo ser visto, el de la derecha era más lento, pero tenia una fuerza bruta que provocó un temblor en los alrededores.
Eris— ¡...! Esp-esperen ¡alto!
—¡¿quien demonios son ustedes!? ¡¡NO TIENEN NADA QUE HACER AQUÍ...LARGOO!!
justo frente a ellos a solo unos pasos, una voz de una chica respondió a las palabras de eris, en su mano izquierda sostenía una espada de una hoja ancha de un color celeste y plateado, a su lado estaba alguien más, alguien que sostenía un hacha de combate totalmente negra con el filo gris ceniza con ambas manos esperando para acabar con todo de un solo golpe.
Arturo— ¡un momento! Mi nombre es Arturo y ella es eris, viajamos hasta aquí buscando a los portadores de la historia, es decir, a ustedes
—¡¿por que nos están buscando?! ¡¿que es lo que quieren?!
Ahora se escuchaba la voz de un chico joven, por su tono agresivo, seguramente seria difícil hablar con el, no solo eso, explicar todo y convencerlos seria un trabajo duro.
Arturo— terminar con todo de una vez, seré lo más breve posible, honestamente no hay mucho tiempo, estamos reuniendo a los siete elegidos por las réplicas, le pondremos fin a todo para volver a vivir como antes
— ¿planeas una última guerra?
— ¿como sabemos que no intentas robar nuestra única defensa? ¿Por qué confiariamos en ustedes?
Ante las miradas desconfianza, arturo baja del caballo dejando a eris en la parte delantera, se movió unos metros hacia la izquierda y aunque fuera un movimiento arriesgado, había decidido ser totalmente honesto.
Cuando se detuvo, estendio sus brazos hacia los costados, un par de alas sobresalieron detrás de él, negro y gris, como si se tratara de una leyenda viviente.
La chica frente a el había desaparecido en menos de 1 segundo, cuando por fin se había percatado de donde estaba, pudo esquivar un corte por muy pocos milímetros, ¿dónde apuntaba?, su cabeza estaba más arriba y su corazón no sería atravesado de esa forma, ¿era principiante con la espada?, no, ese ataque había sido de arriba hacia abajo, entonces, ¿quería cortar sus alas?...pensar era difícil ahora, desde atrás, nuevamente el corte de un hacha de combate se acercaba, este era más fácil de evadir, pero el impacto en el suelo hizo que perdiera el equilibrio.
Sus dudas eran correctas, al cortar sus alas podrían impedir un ataque desde el aire, Arturo cayo al suelo sentado, un corte ligero y un corte pesado se acercaban, el solo cerro sus ojos y espero algo inevitable.
Arturo— ¡...! ¿...?
Al abrir sus ojos, ambos estaban de pie ahí mismo, pero, ¿por qué no lo hicieron? La oportunidad no podría repetirse con tanta facilidad.
—¿por que no lo evitas? Por tus reflejos y velocidad podrías hacerlo, sin embargo tampoco atacaste ni una vez, solo defendias...¿por que?
Arturo— se los dije, ¿no?, quiero ponerle fin a tanta violencia,discriminación...quiero ponerle fin a esta vida de temor, si puedo hablar con ustedes y convencerlos, perder estas alas es un precio que estoy dispuesto a pagar.
A unos metros lejos de ellos, eris se había bajado del caballo para calmarlo, antes de llegar, Arturo le había pedido que no actuara si ellos comenzaban a pelear. Ella pensaba que era una petición peligrosa y algo descuidada, pero también confiaba en que tendría un plan, aún así, resignarse a perder sus alas era un cambio drástico y realmente descuidado.
Ante la respuesta de Arturo en esa situación, decidieron escucharlos por un tiempo.
Arturo y eris explicaron con detalle lo que harían y el porque los necesitaban, estos accedieron, pero bajo una condición, debían ayudar a conseguir agua y comida para varios días, ya que ellos no estarían, los ancianos y niños no tendrían forma de conseguirlo
Eris— ¡está bien, aceptamos ayudar a su gente!, ahora que estamos juntos en esto, nos presentamos adecuadamente...mi nombre es eris keira y el...bueno, ya saben...
Arturo— después de tanto tiempo y apenas ahora escucho el apellido de tu familia, vaya
—mi nombre es Lucía lune, tengo 21 años y utilizo la espada "durandal"
Luego de presentarse, se quitó la capa que la cubría, podía verse una chica joven de cabello corto hasta los hombros de un color castaño oscuro y ojos café.
— mi nombre es alex lune, soy el hermano menor,tengo 18 años y utilizo el hacha de combate de Ricardo l
Imitando a su hermana, se quitó la capa, dejando ver un cabello castaño más claro,algo largo y ojos café al igual que ella.
Tarde en la noche, fueron invitados a dormir en la casa de estos chicos, ahí solo vivían ellos dos y su madre. Al ver la situación de estas personas, las condiciones en las que actualmente vivían, acordaron levantarse temprano para cumplir con su parte del acuerdo.
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Editado: 29.07.2021