Delirios de grandeza (cuentos medievales 1)

Capítulo 3

   Et siguió su camino fielmente de todos los días.  Llegó a una tumba hermosamente adornada de flores que se encontraba en los jardines de las afueras del castillos. Se sentó en frente y se le quedó observando con tristeza.

 

-Hola mi querida amada. Estoy aquí otra vez. He llegado un poco tarde porque me topé con un joven en el bar. Le conté nuestra historia. 

 

 Et guardó silencio recordando su lamentable pasado. Él hubiera deseado que las cosas hubieran ocurrido diferente. Que el príncipe que era su supuesto amigo no se hubiera obsesionado con su amada y él podría haberse casado y vivir felizmente a su lado. Pero nada de eso ocurrió, ellos nunca pusieron disfrutar de su amor.

 

-Él me ha dicho algo que me ha hecho pensar. Que tu hubieras deseado que yo continuara con mi vida y no me quedara estancado en el pasado.

 

  Et se quedó observando a la tumba.

 

-Como quisiera que me pudieras responder ¿qué hubieras querido para mí? ¿De verdad he desperdiciado mi vida? ¿Tengo que encontrar un nuevo rumbo.

 

  Una fuerte brisa fría hizo que cerrara los ojos. Al observar otra vez la tumba pudo ver una flor de cayena, la flor favorita de su amada. Observó por todos lados, pero no había ningún motivo para que esa flor llegara allí. No había árboles de cayena cerca. 

 

-¿Esa es tu respuesta amada mía? Te complaceré. Saldré adelante y viviré por los dos hasta que un día nos encontremos de nuevo, pero siempre te llevaré en mi corazón y en mis recuerdos.

 

 

*FIN*
Autora: LUZAURI RUMBOS COLMENAREZ




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.