Al día siguiente, cuando Demetrio abrió telegram, vio que tenía un mensaje de Tatiana.
—Analicé el código del archivo 0.exe y era un keylogger. Ademas pude obtener la IP de los atacantes, la cual se la envié a la policía con una denuncia por rebelión.
—¿Por que los denunciaste sin consultarme?
—Porque sabia que te daría miedo hacerlo.
En la noche cuando Demetrio veía las noticias, como siempre, oyó que un grupo rebelde había sido arrestado, pero uno de los integrantes llamado Manuel Tapias, había escapado. En la pantalla mostraban el rostro del profugo.
—¡Que feo! –pensó Demetrio.