Demonología y parapsicología

¿Tiene algo que ver la demonología con la investigación paranormal?

La respuesta nos puede arrojar diversas consideraciones. A menudo se tiende a relacionarlo todo y no llegamos al fondo de la cuestión. Debemos darle otro punto de vista diferente si de verdad queremos conocer qué relación existe entre la demonología y mundo paranormal. Primero se debería empezar por establecer algunos hechos que se relacionan con el tema en cuestión que aquí vamos a tratar, demonología y parapsicología. Hay esencialmente dos definiciones del término demonología en el uso moderno:

1.  Demonología: (n.) El estudio y clasificación de los demonios.

2.  Demonología: (n.) la práctica de identificar y exorcizar demonios.

En la gran mayoría de los casos en los que hablamos a alguien del término: demonología, se interpreta bajo la suposición de que demonólogo es una persona, por lo general que investiga sucesos que podemos clasificar como: paranormales o de investigación paranormal. Normalmente además, se hace desde una perspectiva religiosa cristiana católica. Hollywood y las grandes producciones han conseguido entre otras cosas que la figura del demonólogo se asocie a este tipo de visión. Esa persona además, mitificada a menudo, posee un conjunto de habilidades específicas que le permiten localizar y exorcizar los demonios de un hogar, área o persona. El demonio, en este contexto, se refiere a la representación común de una entidad negativa. Pero hemos de darnos cuenta que un demonio es un “ser divino”, mientras que existe gran número de “entidades negativas”, que se manifiestan en diversas formas y tamaños y que responden a nombres diferentes. No todo son demonios por lo tanto, y eso hace especial al demonólogo que se especializa en concreto en estos seres de carácter divino. Por lo tanto los demonios son seres divinos y pueden ser equipados con todas las demás entidades negativas que se asocian con actividades de posesión, aparición o poltergeist.

Además, dentro de la demonología hemos de entender que existe un peso determinante de la tarea de identificar y expulsar, cuando es necesario, a los demonios de diversos escenarios de posesión. Sin embargo, como decía anteriormente, la relación entre demonios y entidades negativas no siempre se da.

Cuando se ha mencionado antes que la demonología expresada en su versión religiosa, es decir, abordada de los dogmas de una religión, presenta una perspectiva diferente a la de la investigación paranormal, debo aclarar que una relación con cualquier tipo de ser espiritual tiene el potencial necesario para ayudar a la investigación paranormal. Quizá para explicar mejor esto, es bueno acudir a la idea del “espíritu guía”, con el que todos estamos más familizarizados. Para la demonología, un “espíritu guía” es comunmente considerado como una entidad externa, ya sea benévolo cuya función es ayudar y guiar a una persona o tal vez un aspecto del subconsciente de una persona que tiene acceso a las corrientes psíquicas y energéticas internas y externas. Los que tienen relaciones con sus guías espirituales pueden referirse a ellos como ángeles o totems, dependiendo del individuo y de la tradición. Muchos investigadores paranormales utilizan sus conexiones con sus guías espirituales como se podría utilizar la conexión de un informantes externos o mensajeros. Como seres de espíritu, estas entidades suelen prestar asistencia a las investigaciones e incluso exorcismos de entidades negativas.

Por otro lado podemos hablar de algo diferente y que sirve para identificar la diferencia entre demonología e investigación paranormal. La nigromancia, así es como se debería definir correctamente el hecho de tratar de acceder a los espíritus de antepasados como forma de comunicación con los espíritus de los muertos sea con el fin que sea. Puede ser para, por ejemplo, recabar información acerca del pasado, presente o futuro, sobre el desenlace de un evento, o cualquier otro motivo y además, muy útil y relevante para los que realizan investigación paranormal.

La Nigromancia y la adivinación por los espíritus son prácticas que vienen floreciendo desde hace miles de años. Incluso en nuestra época, estas tradiciones están muy vivas. Los médicos ocultos de la magia ceremonial a menudo se inspiran en grimorios renacentistas para sus actividades mágicas o la invocación ceremonial de demonios y espíritus. Esta práctica se asocia a menudo con la figura del; mago ritual, que invoca una entidad espiritual y posteriormente realiza una serie de preguntas, dependiendo del resultado del proceso de invocación. De acuerdo con esta tradición, el espíritu o espíritus deberán ayudar al mago en cualquier número de maneras – a partir de la revelación de eventos futuros o de los lugares de tesoros escondidos a la concesión de talentos o habilidades especiales – la entidad o entidades recibirán entonces permiso para partir (a veces no antes de ser atados y prácticamente abusado por el nigromante). Por lo tanto,el uso de demonios y espíritus para obtener fines por parte de los seres humanos, no nos es desconocido.