Joaquín caminaba hacia el colegio junto con Violeta y Alma, él venía tirándola del brazo, intentando llamar su atención, estaba tratando de convencerla.
-¿Por que no?.
-Ya lo hablamos en mi casa, ayer me hiciste lo mismo, no me molestes.
-No sé porque quieres trabajar hermano.
-¿Tienes que hacerme entrar, acaso no somos amigos? Ayúdame en esto.
-¿Para que quieres entrar? No te hace falta dinero.
-Si me hace falta.
-Solo quieres entrar porque Isabella lo hizo, solo quieres estar cerca de ella, pareces un acosador.
-No tienes que seguir a esa chica, estoy segura que mi hermano no gusta de ella.
-¿Estas segura de lo que dices?.
-Vamos, hazme ese favor.
-No, dale su espacio.
-¿Tenes que ayudarme, acaso ese no es el lema de la amistad?.
-No me salgas con esas cosas.
-¡Te doy lo que quieras a cambio!.
-No tienes nada que ofrecerme.
-¿Estas segura? ¿No querías ese juego nuevo que salió?.
-N-No vas a convencerme.
-Lo estás pensando.
-Cállate, no me molestes.
Isabella estaba caminando por los pasillos de la escuela con Carla y Rocío, estaban cansadas y sin ganas de entrar, se notaba en su cara y en la forma al caminar, cargaban con el peso de una noche mal descansada, el cuerpo de Isabella estaba pesado, al igual que sus ojos.
-No puedo creer que estés trabajando, ya no vamos a tener nuestras tardes de glotonas, voy a extrañarte.
-Aun podemos seguir saliendo.
-No, ahora tienes responsabilidades, luego vas a tener un hijo y ya no nos vamos a ver seguidos, hasta que nos olvidemos de nuestra amistad.
-No exageres Rocío, solo esta trabajando para comprar el regalo a sus padres, no la vamos a perder, no seas tan dramática.
-No, a ti no te importa, porque no te interesa su amistad.
-¿Que dices? No tiene nada que ver niña pervertida.
-No soy pervertida cuatro ojos.
-Si lo eres, te la pasas imaginando a los chicos besarse.
-Y-Y-Yo nunca hice eso.
-Hace poco estabas fantaseando con que Joaquín tenía una relación oculta con Yamil, también lo emparejaste con Joel de la otra escuela.
-Tu porque no entiendes mis gustos.
-¡Joaquín y Joel son primos! Nunca podría entender tus gustos pervertidos.
-Chicas basta, no peleen.
-Hola Isa.
Las tres se quedan calladas al escuchar una voz masculina, fue por puro reflejo, la primera en darse cuenta que esa voz le pertenecia a Juan fue Isabella quien estaba más atenta a su entorno que las demás.
-Hola Juan, perdón por este lio.
-No te preocupes por esto, hace mucho que no tenía la oportunidad de hablar contigo.
-Si, es que ando trabajando y los estudios, estamos por cerrar el segundo trimestre y se me junta todo.
-Si, es muy complicado estas fechas, ¿Isa estás desocupada este fin de semana? Para que vayamos a tomar algo.
-Trabajo hasta el sábado, el domingo lo uso para descansar, perdón.
El timbre resonaba en los pasillos alertando la entrada a los cursos a los alumnos, como tradición hacia el sonido van ingresando a montones.
-Me tengo que ir, fue lindo hablar contigo de nuevo, nos vemos Juan.
-Claro, cuando quieras, si llegas a estar desocupada avísame así salimos a tomar algo.
-Claro, yo te aviso.
Las tres se alejan de él a pasos muy ligeros ganando distancia muy rápido, Juan decide entrar a su curso, al hacer unos pasos se topa con su amigo que lo estaba esperando.
-Veo que cada vez se te está complicando más la cosa.
-No sé porque razón está evitandome más de lo común.
-Antes era más fácil salir con ella, lo que pasa es que Joaquín te está ganando de nuevo.
-Seguro debe ser por su trabajo, nada más que eso.
-Claro, si tu lo dices, vamos que tenemos historia, antes que toque el timbre el profesor ya está en el aula.
Joaquín mientras estaba en clases le reposa un papel sobre el escritorio de Alma, estaba sin ninguna sospecha, con la intriga reflejada en su mirada lo toma y lo abre cubriendolo entre sus piernas para que nadie lo viera, su humor cambia al leer lo que contenía ese trozo de papel arrancado de la forma más deforme posible.
Ella de inmediato arranca sin piedad una hoja de su cuaderno de tamaño A4, con lapicera en mano, escribe solo una palabra, la remarcaba una y otra vez para que sus letras resaltarán y pudiera entender sin preguntar, una vez terminada en lo que en su cabeza era su obra de arte.
Lo lanza con mucha fuerza, este impacto en el hombro de él, lo levanta y va desplegando los dobleces que ella había hecho, mientras lo hacía su ilusión aumentaba, lee las dos letras que contenía aquella hoja y se decepciona, su respuesta era un no, un no rotundo, sin piedad, sin asco estaban grabadas esas simples letras de negación en esa hoja tan descuidada, se notaba por lo arrugada que estaba, por la tinta caída sobre ella.
Joaquín le gira su vista hacia Alma y comienza a reirse por la expresión facial que ella hizo al mostrarle otro papel que tenía la jugarían avsu pregunta, en ese momento cómico dentro de su cabeza le termina sacando el dedo medio, ella se defendia sacando su lengua, pero su burla no le dura ya que su profesora le llamó le atención.
-Alma, por favor repitame lo que acabo de decir, si es tan amable.
Ella se queda helada antes la palabras de su profesora, era más que evidente que no había prestado atención por discutir con Joaquín, ella mientras se ponía de pie lo insultaba en silencio y hacia todo los gestos que el tiempo le permitía hasta pararse.
Al hacerlo los nervios traicionaban su voz, su mirada la dirigía hacia varios lugares, no mantenía la vista en una sola posición ni si quiera un segundo, sus ojos son guiados por la voz de Joaquín quien le estaba susurrando la respuesta, ella comienza a repetir lo que él le decía sin pensarlo, memorizaba un segundo y lo largaba en el instante sin retener la información llegada a sus oídos.