CAPÍTULO 18

BOOKNET NO ME MANDA NOTIFICACIONES NO SÉ QUE ESTARÁ PASANDO ¡YA TIENE 7 VOTOS! ES POCO QUIZÁS, PERO ME HACE FELIZ :") Y YO LOS HAGO FELIZ CON OTRO CAPÍTULO. AGRADABLE LECTURA!
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Maya y dos de sus hadas de la fauna se pusieron delante de la Claver la cual aún estaba en el suelo, no quería levantarse para no alarmar más a estas criaturas, Benjamín y dos de sus hadas estaban detrás de ella. Maya y Benjamín nunca salían sin ese par de hadas, ya que eran los más preparados del grupo, usaban más su talento y con éxitos. El talento de Maya consistía en dar vida a los animales del bosque aquellos que por alguna situación habían estado malheridos y débiles ellas se encargaban junto a Maya a sustentarlo en cambio el talento de Benjamín era opacar, a pesar de que era el hada del fuego siempre evitaba que se incendiara el bosque. Su grupo consistía en visitar las zonas más calientes y evitar un fuego inminente. Usar el arco era una especie de alma para protegerse de criaturas alocadas.

—Chupa sangres —Camilo soltó un bramido. Benjamín trataba de contener al lobo, ya que no quería una matanza entre ellos.

—Estamos de paso, además es más a la derecha su territorio —Gritó Maya sacando otra flecha. La que tenía se la había clavado en el torso al que desde el principio intentó atacar a Claver.

—Unas criaturas atacaron en nuestro territorio, para evitar que nuestras crías parezcan decidimos mudarnos de este lado —Gritó uno de ellos del lado de Benjamín.

—No queremos problemas, nuestro amigo lobo no atacará, pero solo si ustedes no atacan —Dijo Benjamín aún con el arco apuntándole al pecho a uno frente a él.

—¿Quién es ella? Su sangre es pura es una aldeana —Siguió hablando el vampiro frente a Benjamín.

—No les incumbe quien sea ella —Gritó Camilo, El vampiro mostró sus dientes y Camilo volvió a convertirse asiendo notar su fiereza.

—Basta ya, Debiste reunirte con nosotros Jack esto no se hace así —Gritó Maya.

—Desde cuando hay un control en este lugar. El rey Jorge no esta no tenemos que obedecer reglas —Respondió Jack en su defensa.

—Mientras sigamos cumpliendo sus reglas el rey seguirá en nuestros corazones, pero aquel que nunca lo amo de verdad no lo hará, seguirá en pleitesía con sus propios hermanos mientras el verdadero enemigo sigue ganando —Volvió hablar Maya.

—Ella tiene razón —Gritó uno de los Vampiros cerca de ella—. Yo soy fiel a mi rey aún después de la muerte, pero no tenemos donde recostar nuestra cabeza las criaturas pegajosas que le brota una especie de baba que derrite todo a su paso están por haya.

—Una de esas atacó a Dereck —Comentó Byron.

—¿Cómo podrían saber que Byron está en el árbol de las hadas? —Preguntó Claver.

—Quizás lo quieren a él —Le siguió Byron.  

—Por favor chicos, debemos encontrar el brillo antes que esas criaturas lleguen a los árboles de las hadas. No sabemos quién está detrás de esas cosas, pero necesitamos averiguarlo y solo si está Dereck a salvo podríamos seguir indagando —Dijo Claver, Se levantó del suelo amarrando una tela en su frente —. Soy Claver aldeana de Lovely estamos en busca del diamante azul. Queremos unirlo a su dueño el cual está en peligro —Esta vez le hablaba a los Vampiros.

—¿Por qué no lo dijiste antes? —Preguntó Jack. El grupo de ocho chupa sangres bajaron la guardia, si había algo que ellos deseaban era que Lovely volviera hacer como antes y viento esto era una forma de sentir esperanza.

—La reina nos humilló, nos votó de nuestra propia casa es hora de que la tomemos otra vez, que volvamos a nuestro territorio y, ya que ella engañó a Claver con un intercambio más le vale que tenga otro plan porque este se le salió de control —Esta vez hablo Camilo—. No quiero tener problemas con ustedes solo quiero que esa chica pueda tener en sus manos ese diamante y los otros. ¿Están con nosotros o con la reina Alicia? —Preguntó, los vampiros se miraron entre ellos.

—¿Estás bromeando?... ¿Quién es Alicia? —Contesto uno de ellos.

—Estamos con ustedes —Respondió Jack, Benjamín, Maya se dieron la mano en un saludo con cada uno.

—Lamentamos la piedra, queríamos confirmar que eras una aldeana —Dijo Jack al acercarse a Claver. La chica sonrió amargo tocando su frente—. No hagas eso.

—Está bien, y sí; no hay problemas —Respondió ella quitando su mano de la frente.

—Casi matamos nuestra salvadora —Comento uno de ellos.

—No soy su salvadora, los diamantes lo son —Musito Claver.

—Solo un aldeano puede tocar el diamante azul, solo un aldeano puede obtener el diamante del dragón y que él no dudes en ser obediente. Solo un aldeano puede encontrar el diamante blanco —Comentó unos de los Vampiros.

—Todo esto es solo un aldeano, comprometido, fiel a lo que ha venido hacer y sobre todo valiente, eso eres tú Claver —Le siguió Jack—. Ustedes vuelvan a donde están los otros cuenten por qué ha pasado, nosotros seguiremos con ellos —Señalo a dos más cuando menciono iremos con ellos. Los otros cinco se fueron al territorio donde se habían tenido que ocultar de las criaturas pegajosas. Claver y el grupo siguió adelante.

—Me alegra que se haya arreglado esto pensé que tendría que correr otra vez como anteriormente —Susurró Claver sintiendo punzadas en su frente.

—No pasará —Respondió Byron.

—¿A qué se refirió el apestoso con un engaño e intercambio de la reina Alicia? —Cuestionó Jack una vez estando al lado de Claver caminando delante.

—No sé cómo lo hizo, pero si me engañó para conseguir el diamante. Al parecer, no sé si sea verdad solo fue una conclusión de las hadas. La gran suerte que tengo de encontrarme con el mismo diamante sin darme cuenta, bueno la mitad de él, no sabía que lo era, pero usando un poco de su poder logro ayudarse el mismo.

—El único ser que sabe que es un diamante es Drygol. Los diamantes no saben que son diamantes hasta que otros se lo dice fue algo que hizo el rey Jorge para que no sean encontrados fácilmente.