CAPITULO 2 - UN VASO DE CAFÉ Y DOS DE TÉ

Antes de llegar a la escuela hicimos una parada a una tienda de conveniencia, todavía se tenia un poco de tiempo para comprar un vaso de café y dos de Té verde.

-Son 5 dólares en total, joven- habló la señora de mediana edad mientras le daba el ticket a Leo.

-Gracias, señora nos vemos hasta finales de verano- La señora ya nos conocia desde un buen tiempo, era de esperarse que Leo la tratara con más respeto que otra personas.

-Leo ahora si nos queda 15 minutos para ir a la primera clase, tardaste mucho en elegir que tonto vaso elegir-

-Dante no te quejes porque no te digo nada respecto a que odias el café, eso si que es muy raro amigo-

-Ya cállate y dime que opinas respecto al sueño- dije mientras empujaba la puerta principal.

-No lo sé amigo, no es como si yo soñara que mi padre esta de la nada y que además diga que estoy en peligro junto con alguien más-

Ambos entramos al auto y sin dejar su vaso en el lugar correspondiente, Leo arrancó el auto.

-Tan solo ve al punto, por favor-

-Esta bien, últimamente has pensado mucho en tu padre, se que no lo conociste como yo al mío pero en verdad tienes que dejar ese asunto porque no tengo idea de como enfrentar para que no te afecte en estos momentos de tu vida-

-¿Cuántas series te has visto para decir semejante consejo?-

-Te voy a bajar ahora mismo si te haces el gracioso, esta en tu decisión en tomarlo o no-

-Y dices que yo soy el tipo que nunca se ríe-

-Ya bájate de una vez-

-No seas así con tu mejor amigo, sabes que fue broma además, yo te iba a invitar dos rondas de cerveza- espero que no me baje del carro que si lo hace, le voy a joder una llanta.

-Recuerda que ya se nos hizo tarde y no puedes hacer ese tipo de tonterías y...-

-Dante, ya hemos llegado. Ahora solo cállate y empieza a salir rápidamente porque solo faltan 2 minutos, el edificio esta algo lejos idiota-

Demonios si es cierto, para que le hago caso al ir a una tienda.

Mientras ambos corríamos me pareció ver al mismo tipo de la parada de autobuses.

Gracias a dios pudimos llegar a tiempo a la clase, a pesar de que el asunto de firmar la calificación fuera algo rápido, el profesor no dejaba a nadie salir de la clase, oh vamos es el último día de vacaciones y este tipo no quiere dejar de ser el profesor ejemplar de la universidad. Al menos tengo algo de tiempo para arreglar el proyecto final de arquitectura, este sistema de materias normales y materias relacionadas con la carrera todavía es difícil de entender.

-¿Todavía sigues arreglando esas escaleras de tu proyecto?, no creo que nadie lo note al momento de exponer-

-Si tu pudiste notar que las escaleras las había pegado al revés, entonces el profesor se hubiera dado cuenta-, Ni siquiera puedo saber como Leo pudo notarlo antes yo pero de todas maneras me salvo la calificación-

Después de haber salido de esa clase, presentar nuestros proyectos y finalmente salir con una caja cada quien llena de otros proyectos y materiales, decidimos ir a mi casa.