Descendientes Prohibidos

CAPITULO 4 - PIEDRA ARCOIRIS

Al terminar de limpiar mi cuarto entero me di cuenta de que en verdad si que tenia basura por todas partes, ahora que necesito un baño, Leo sigue tardándose demasiado.

-Sal del jodido baño de una buena vez, has estado ahí desde hace media hora-.

-Me estoy cambiando tonto, dos minutos más-

-Me niego, voy a entrar ahora mismo- al terminar la oración se escuchó como el vidrio de mi ventana se había roto, provocando que Leo saliera del baño a medio vestir y un gran susto por parte mía, ahora no podré comprar ningún disco durante una semana o dos.
 

-¿Ahora quién te odia todavía para romperte la ventana?- mencionó Leo mientras se colocaba la playera

-Ni idea así que por si las dudas quédate en la habitación de a lado y sigue con lo tuyo, yo me voy a bañar-.

-Dude, te acaban de aventar una piedra después de que vi a un tipo vigilándonos desde un árbol. ¿No te preocupa en lo más mínimo?-

-Que no había nadie viendonos y lo más seguro fue Jeremy  por ganarle en esa apuesta de la otra vez, ya sabemos que es un mal ganador. Ahora voy a bañarme, no toques nada hasta que termine de bañarme y ponerme ropa-.

Sin más rodeos, cerré la puerta y me metí a bañar.

-Ya apúrate Dante, tardas mucho-.

-Tu mantente en el otro cuarto que ya casi termino de vestirme-

-El entrenador me envió un mensaje, dice que también seré capitán pero sólo por dos meses después de vacaciones-

-Me parece bien, entra con el recogedor y la escoba-.

-Déjame ir por ellos-.

Al saber que Leo bajó por ambas cosas, decidí sentarme en la cama mientras miraba los pedazos de vidrio rotos acompañados de una piedra envuelta en un papel de aspecto viejo, Jeremy me las pagará en la fiesta de hoy.

-Deja de pensar mucho en lo que le harás a Jeremy, mejor limpiemos este desastre y tapemos esa ventana con alguna cosa-.

Ambos nos acercamos con cuidado para no hacer más desastre, poco a poco colocábamos los pedazos grandes en el bote de basura  mientras que los pequeños iban al recogedor.

Después de terminar absolutamente todo, nos decidimos por ver que rayos tenia la hoja:

-Hasta la nota esta en la piedra por un listón blanco, que considerado es Jeremy- dije mientras deshacía el nudo que tenia.

-Primero le dices gracias y después le jodes una llanta  o le das un puñetazo-.

-Mejor me hago la victima con su madre, no tendrá ni automóvil y ni dinero-.
-Mejor. Ahora quiero ver que dice la hoja- dijo al mismo tiempo que la agarraba primero que yo.

-Ay no dice nada, pensé que seria un mensaje tonto-.

-Leo, mira la piedra-.

En mis manos posaba una  gran piedra brillante de un color blanco con reflejos de distintos colores, es como si en verdad hubiera un arcoíris dentro ella.

-Dante, esa piedra esta genial hay que quedárnosla-.

-Apoyo tu idea pero ya es tiempo de irnos al bar que llegaremos tarde, me llevaré la piedra-

-Me había olvidado de eso, primero hay que poner algo en la ventana-.

Al final optamos por colocar un pedazo de cartulina con cinta decorativa alrededor de la ventana, somos un par de idiotas con poco tiempo.




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