CAPITULO 16
16
- Dime que es esta locura –me levanto y muestro mi ropa
- Te ves excelente, siempre he tenido sorprendentes ideas
- No seas humorista, ¿de verdad vas a mantener tu decisión de que este sea mi uniforme desde hoy en adelante?
- ¡Claro!, aunque voy a esperar las consecuencias en las horas venideras
- Los demás empleados se molestaran Gerardo
- Me encanta cuando dices mi nombre, ¡ven!–extiende una mano hacia mi
- No debo, solo resolvamos esto…
- ¡Ven!- me mira como un jefe dando una orden
-camino hacia él y cada momento que veo sus ojos más de cerca mi corazón se acelera aúnmás…
-me abraza y besa mi cuello –definitivamente aquí quiero quedarme todo el día-
- Cuando usabas el primer uniforme no podía cerrar los ojos y dormir sabiendo que te tenia frente a mí con esa falda ajustada y tus piernas largas y esbeltas asomándose
-sonrío-estoy alagada con sus palabras
- Por eso me echabas sin ninguna justificación
- Sí, pero ya nunca te sacare de ella por las malas- besa mis labios
- ¡Debo irme señor Gerardo!- me levanto rápidamente y camino hacia la puerta
- Siempre huyendo señorita- sonríe
…
- Hija, llegaste temprano y…- me mira “el uniforme”
- ¿Tu uniforme?, acaso no trabajaras hoy. ¿Te lo dio libre Gerardo?
- No, este será mi nuevo uniforme ¿Qué tal?
- ¡Woow! Pero y ese cambio, no te lo creo hija
- Si, él cree que me veo mejor así
- Solo no lo puedo creer hija, él, mi Gerardo, tomar esa decisión. Me tomara días asimilarlo…
-me escabullo rápidamente a mi habitación para que cesen las preguntas por parte de Gladis
-miro la biblioteca en mi cuarto y la veo más dotada que antes y la decoración de la habitación también ha cambiado, me gusta la combinación de colores pasteles
- ¡Oh! ¿Qué es todo esto? El closet está lleno de ropa que definitivamente no es la mía
- Estas sandalias me encantan, pero de donde salieron todos estos ¡jeans!
- ¡Esto es obra de Gerardo!, no debo aceptarlo
-salgo de la habitación y recuerdo que es hora de su desayuno por lo que es mejor esperar un poco, no le reclamare porque ha llenado mi closet con ropa nueva y de marca delante de todos
- Te vez muy bien con esta ropa hija
- Me ha asustado
- Perdona hija, pero sigo con lo que dije. Mi sobrino sí que se siente bien contigo a su lado, su humor es fantástico
- ¿Por qué lo dice Gladis?
- Es cuestión de comparar al Gerardo que era antes de conocerte con el que es ahora
- Pues…
- Solo sigue haciendo lo que haces hija. pero solo quiero que no sufras- susurra lo último y se aleja
-¿por qué lo dijo? Ella sabe lo que está pasando entre él y yo…
…
- Ya sé porque vienes con esa cara, lo de la ropa es por el cambio de uniforme
- ¿Si y las sandalias y los suéter?
- Por si te cansas con las zapatillas y por si te da frio
- ¡Qué considerado!, pero igual no la acepto
- Pero si ya estarás aquí los fines de semana, necesitaras más ropa y…
- ¿Qué? ¿Por qué estaré aquí los fines de semana?
- Porque estarás conmigo a tiempo completo, todos los días de la semana ya Alberto cambio el contrato
- ¿Y cómo sabes que aceptaría?
- Sabes que ya no tienes ese trabajo en el restaurant, por lo que no es necesario que busque otro, aquí te necesito todos los días de la semana
-y como se entero
- ¿Me espía señor Gerardo?
- No, es información que obtengo cuando me la niegan
- Pero debería ser confidente
- No para mí y si puede páseme la toalla señorita Natacha