Siento tu alma inconexa a la realidad,
Siendo extraña y ajena,
diferente a lo que llamarían vida.
Te veo bailar y reír
como si estuviera más allá de tu tacto,
más allá del fervor de tu corazón.
Pero el espesor de tus palabras
me hace dudar de tu veracidad.
Sé que hay algo que no veo,
quizás en tus ojos,
en tus labios,
en tu cuerpo,
en tus movimientos
o en el amor que profesas.
¿Qué podría ser el detonante de tu alma?
¿Qué me permitiría verte como nadie más lo ha hecho?
Cuánta vida podría ver en aquellos ojos que parecen brillar.
Cuánta felicidad podría sentir aquella que desea vivir.
Cuánto amor podría tener aquel corazón que no se siente feliz.
Aún si me equivoco sobre ti
Anhelo creer,
quizás incrédulamente,
que conozco a quien
con tantas ganas desea
mucho más
que cualquiera que haya existido.
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Editado: 19.03.2025