CAPITULO 19: Love & War/ Drowning Pool

     Abri los ojos, él estaba sentado frente a mi, viendome dormir, cuando mis ojos hacen contacto con los suyos sonríe, su sonrisa es natural y dulce, mi corazón se desboca, respondo su sonrisa y me siento en la cama, cubriendome con las sabanas, acomodo mi cabello lo mejor que puedo.

-¿Dormiste bien? (lo pregunta con una sonrisa en la boca)

-Jajajaja ¿es capsiosa la pregunta? (lo veo con una sonrisa que no logro ocultar) dormi de maravilla... (le guiño un ojo) 

     El se levanta y me da la espalda, se dirige al baño, veo toda su espalda rasguñada, se estira y los músculos de la espalda se marcan.

-Pues yo creo que dormi con un gato entre las sabanas, me arde la espalda jajajaja (se mete al baño riendo mientras yo me sonrojo) ¿no quieres bañarte? (voltea antes de cerrar la puerta y me guiña un ojo)

-¡Si! ¡si quiero! 

     Brinco de la cama, me doy cuenta que me duelen las piernas, siento como si hubiera corrido toda la noche, me da gracia saber el motivo de mi dolencia. Entro al baño y lo veo en la regadera, tan escultural y sexy, entiendo por que los demonios se pueden volver una tentación. Me acerco a él y me meto en la ducha, me coloco a su espalda, el deja de tallarse el cabello y voltea aun con los brazos en su cabeza, viendome de reojo. Me acerco por su espalda y lo abrazo.

//Desde los ojos de Lucifer//

     Su tacto provoca mucho en mi, siento sus brazos alrededor de mi torso, pongo mis manos encima de las suyas, me doy la vuelta y la tomo de la cara, es tan hermosa, su cuerpo tiene cicatrices, es una guerrera y estoy perdidamente enamorado de ella, aunque no se si pueda llamarlo asi, no se si un demonio pueda enamorarse y querer a alguien, por lo general solo buscamos controlar y poseer. Beso su frente y nos quedamos un momento abrazados bajo el agua de la regadera. 

      Terminamos de bañarnos y empezamos a vestirnos, en un par de horas es mi jucio, termino de vestirme y veo como ella esta terminando de ponerse sus botas, no puedo creer que ahora que la tengo me obliguen a alejarme. Busco en mi armario unos papeles que necesito darle, me acerco a ella me siento a su lado y se los extiendo.

-¿Qué es esto? (me pregunta confundida)

-Son papeles (abro el folder y se los extiendo) necesito que los firmes, es el documento de propiedad de este edificio, del penthouse y del club... a mi partida quiero que sean tuyos, no está de más que tengas un lugar donde refugiarte y un club que te deje dinero (su rostro se endurece, la idea no le agrada, los extiende de regreso)

-No hables así, aún no sabemos que va a pasar.. si necesito dinero tú me lo puedes prestar... ¿vale? (se levanta de la cama y se dirige hacia la puerta)

-Si me regresan al infierno no será tan fácil ¿sabes? quedate con los papeles, firmalos y quedate con esto... (se lo pido suplicante)

     Se recarga sobre la puerta, intenta no verme, mueve su pie como una clase de tic, sus ojos se empiezan a llenar de lágrimas Me levanto y camino hacia ella lentamente, me planto enfrente, pero ella sigue sin hacer contacto visual, levanto su barbilla con suavidad y la veo a los ojos, su tristeza se encaja en mi corazón.

-Cuando me vaya... tú sabes que el tiempo pasa diferente allá, no se si cuando nos volvamos a ver sea el mismo, además, el infierno te endurece... te cambia, no te confies tanto de mí ¿sí? ¿entiendes lo que te digo? 

-Espera... esto me suena a que ya obtuviste lo que quisiste de mí (señala la cama) y que ahora simplemente te irás y que cuando nos veamos harás como que no me reconoces, ¿a caso darme todo esto es como mi paga? 

-No estás entendiendo... las cosas no son así, no las deformes...¿sabes lo que es castigar a miles de almas todo el día? si crees que eso no te cambia entonces tenemos un problema... además... el tiempo de la tierra y del infierno es diferente... un segundo en la tierra es una semana en el infierno... puede que nos veamos dentro de un año y para mi ya haya pasado un lustro... un lustro torturando y maltratando... (me quedo pensativo, ¿en verdad regresaré a eso?)

-Lo siento yo... simplemente... tengo miedo... (esquiva mi mirada y ve al piso, veo como una lágrima se desliza por su mejilla)

     Me acerco a su mejilla, y beso su lágrima, recorro con mis labios el camino que deja, beso ambos ojos y después su frente, vuelvo a encararla, la veo fijamente a los ojos y beso sus labios, con todo el cariño que puedo expresar, intentando que sienta lo que siento por ella, el miedo que tengo de separarme, por que el problema no es regresar al infierno, el problema es que ya no estaré con ella y eso es lo que me tortura y me mata. Su beso también tiene tintes de tristeza y dolor. Cuando nos separamos nos vemos profundamente a los ojos.

//Desde los ojos de Florence//

     Antes de que si quiera podamos decir algo, tocan la puerta, nos separamos y permitimos que esta se abra, es Eris que se recarga en la puerta y nos ve de arriba a bajo.

-Señor... la camioneta está lista, ¿desea que partamos ya? (está seria)

-Si, vamos... (voltea hacia mí y extiende su mano)

     Tomo su mano y en ningún momento la suelta, entramos al elevador y el acerca mi mano para depositar un beso en ella. Atravesamos el club, empieza a llenarse de gente, los demonios que están ahí voltean a verlo con curiosidad. Salimos y está lloviendo a cantaros, él extiende sus alas y me cubre de la lluvia, llegamos a la puerta de la camioneta, la abre y me da el paso, una vez a dentro vuelve a sujetar mi mano, yo me acurruco contra él, pasa su brazo por mis hombros y me acerca a su cuerpo, la angustia me corroe, no quiero perderlo ahora.

     Llegamos al edificio del covenant, no deja de llover, al salir del auto veo llegar a Tony con Erick, se quedan los dos con la boca abierta al vernos de la mano, Lucifer los ve, les sonríe y entra conmigo al edificio, llegamos a la puerta principal. Antes de entrar nos detenemos todos, Lucifer voltea hacia mí, besa mi frente y me ve directo a los ojos.