Todas las tardes la podía ver bajo aquel árbol después de su entrenamiento, la observaba todas las tardes hasta que un día se había enamorado de aquella chica sin darse cuenta, sin saber por qué. Se sentía tan cobarde por no tener el valor de decir lo que sentía, pues él jamás se lo había demostrado a alguien, y temía ser rechazado por aquella bella chica. Un día se le ocurrió una gran idea, que aún cobarde decidió llevar a cabo.
Unos días después de comenzar con su plan, sin previo aviso encontró algo que puso su mundo al revés, y que lo animó a seguirse enamorando de la bella Chica debajo del Árbol.