Desde Mi Ventana [bilogia parte I]

5

Jacob 
12 de enero 2019

Casi derrapé en mi auto para llegar esta vez antes que ella. La tarde era soleada, perfecta para mirarla desde mi ventana. De verdad deseaba ver su cara fusionándose con la luz del atardecer. Al llegar noté que no se encontraba bajo el árbol, y eso me hizo pensar que por primera vez había logrado llegar antes que ella. Bajé del auto y entre a la casa muy emocionado. Mi hermana se encontraba esperándome en la sala de estar y aún tenía la nota en las manos.
  
—¿Qué sucede? —la miro confundido—. ¿Por qué aún no entregas la nota?

—Ella no llegó Jacob, la esperé algunas horas y no lo hizo.

—Entonces no debe de tardar en hacerlo, ve a dejarla—le digo empujándola hace fuera de la casa.

—Jacob, ella no llegó hoy—me repite Kathlyn con pena—. Ella siempre está ahí cuarto para las cuatro y ya son las seis de la tarde. No vendrá.

—Pero… No puede ser, siempre está ahí. —Le digo quitándole la nota de la mano.

Yo solo podía pensar que cosa tan grave había sucedido ayer para que hoy no estuviera ahí bajo el árbol.  Becca siempre estaba ahí, nunca faltaba. De verdad eso me preocupaba mucho. Mi cabeza hacia especulaciones tontas, «¿habrá tenido algún accidente?, ¿tendrá problemas en casa?» No me cabía en la cabeza que no apareciera.

Subí a mi habitación a escribir otra nota y enumeré la que tenía en la mano. Las manos me temblaban al escribir la nota, pero no expresaría en ella lo que sentía en aquel momento.

"¿ha sucedido algo Becca?, porque hoy me privaste de mirar sus lindos ojos, espero que todo esté bien, me preocupa un poco no verte hoy. Espero que esto no sea por las notas, porque de verdad me gustan escribirlas para ti. La otra nota de igual manera te la dejaré aquí junto a esta, tiene la fecha para que sepas cual va primero. Espero que te encuentres bien Becca, no verte me preocupa. 
Posdata: Me encantan tus gafas. 
Att: Anónimo enamorado. Y un chico que se preocupa por la hermosa chica debajo del árbol. 
 

Guardo la nota con la esperanza de poder verla mañana. Los últimos meses la he visto sin excepción, y me siento raro al no verla. Cada día que pasa, puedo sentir que la empiezo a conocer más, aunque es una locura. Sé que las gomitas son su snack favorito al igual que el chocolate, y pienso dejarte unos cuantos junto a la nota de hoy en adelante.  

Su libreta aún sigue sobre mi escritorio, aún me da curiosidad abrirla, pero no lo hago, así que me quedo con la curiosidad. Pero si pasa un día más sin aparecer, prometo que la leeré. 

La noche cae tan espesa que las estrellas se pueden ver más de lo normal. Y me recuerdan a ella, me recuerdan a su hermosa cara. 

Tomo una ducha muy rápida y salgo del baño rápidamente. Aun llevo la toalla enrolada en la cintura y me observo el vientre el cual es muy delgado, pero no tan fuerte como los de otros chicos. Me ponga la camiseta y me hecho en la cama mirando al techo. 

Kathlyn entra a la habitación y me mira como si quisiera decirme algo importante. Sus ojos grises iguales a los míos, parecen estar preocupados. 

—¿Qué sucede Kathlyn? —pregunto confundido—. ¿Te sucede algo? 

—Nada. Pero me enteré de algo—dice autoritaria.

—¿De qué? 

—Pues hace un momento estaba hablando con Vanessa y me cometo que unos de sus compañeros de escuela tuvieron un accidente. Nada grabe en general, pero si algunos moretones y raspones. Investigando un poco pude darme cuenta que los compañeros de Vanessa son los hermanos de la chica que observas siempre. 

—¿De verdad? —pregunto, pero Kathlyn se dio la vuelta sin responder mi pregunta. Pero pude saber porque Becca no había llegado ese día, y además de que tenía hermanos gemelos.
 


 



#22687 en Otros
#6738 en Relatos cortos
#35392 en Novela romántica

En el texto hay: notas, amor, arbol

Editado: 07.06.2020

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.