7. Algunos secretos

Nadia me importaba muchísimo, y verla decaída era devastador. Estaría dispuesta hacer todo lo que esté a mi alcance para ayudarla. Dave ha estado con nosotras últimamente, por el contrario, Matt se ha disculpado por no estar conmigo, con nosotros, pero tenía unos motivos por los que debía ir a casa de sus padres.

Dave y yo compartimos muchos momentos, incluso llegó a contarme como conoció a Matt, me pareció lo más adorable que he escuchado. Nos hicimos buenos amigos, mejores amigos... lo que otras personas no llegarían a ser ni en años, nosotros en tan solo un día.

Es la conexión con las personas...

-Matthew estaba en el kínder armando unos legos, mientras yo estaba jugando con unos carritos; un niño más grande que todos nosotros y corpulento intentó llevarse los legos de Matthew, obviamente llegué yo a salvarlo.- enarqué el cejo, él rió vergonzosamente y habló. -En realidad, los dos tomamos los legos que pudimos y salimos corriendo, el niño se quedó parado viéndonos correr. Y desde ahí nos empezamos a llevar bien, compartíamos nuestro almuerzo y nuestros juguetes. Todas las tardes íbamos a la casa de él o a la mía, nos alternábamos. La primera vez que Matthew fue a mi casa, mi madre dijo que parecía un dejá vù, porque esos rizos le hacían acuerdo de una amiga de su infancia. Ella se llevó una enorme sorpresa cuando la madre de Matthew fue a recogerlo, se saludaron y resultó que ellas fueron amigas en la escuela y en el colegio, pero perdieron el contacto, así que fue un bonito reencuentro.

-WOW, que lindo, adorable y gracioso.- fue lo que pude pronunciar, me hizo recordar cómo conocí a Nadia, cómo crecí con Nadia.

-Si que lo fue.- le sonreí y él continuó. -Seguro que tu historia es más aburrida...

Sabía que él lo decía para que me molestara y le contara, lo extraño fue que no me molesté, pero si le conté desde el momento en que nacimos que mi madre nos había contado, tenía un par de fotos en mi celular que mi madre nos había sacado y le mostré.

Tiempo después.

Era lunes por la mañana, no sabía nada de la Nana, ni de mi mamá, ni de Charlie, ni de Adrien... ni de Matt.

Dave nos silbó para que nos apuráramos, los tres salimos corriendo del departamento y nos subimos a su auto. No estaba Matt.

-Buen día chicos ¿Listos para el primer día?

-Hola Dave, claro que sí.- dijo Damon con una sonrisa.

-Buenos días Dave.- dijimos Nadia y yo al mismo tiempo.

En 5 minutos llegamos al campus, Dave nos alentó y entramos al salón. Las primeras horas estuvieron bien, solo presentaciones, instrucciones por parte de los profesores y las primeras tareas grupales por hacer.

Los grupos eran de cuatro personas, así que nuestro grupo estaba conformado por un chico alto, moreno llamado Kurt y una chica que por sus rasgos se parecía a alguien... pero no estaba segura, era castaña con ojos un poco grises y una enorme sonrisa, se llamaba Mara, Nadia y yo. 

Acordamos que por la tarde ellos irían a nuestro departamento, dado que éramos las únicas con un departamento... los demás aún se estaban instalando.

Las siguientes clases fueron igual, solo que los trabajos ya no fueron grupales. Cuando salimos, fuimos a buscar a Dave al lugar que ellos nos indicaron antes de entrar a clases, y ahí estaba Matt. 

¡Por fin! 

Sus hermosos ojos grises se encontraron con los míos, corrí a abrazarlo, nos saludamos y nos fuimos a nuestros departamentos. En el camino, íbamos compartiendo nuestras experiencias del primer día.

Cuando mencioné a Mara pude notar que Matt se tensó al escuchar ese nombre, pero no sabía el porqué. Un misterio más por descubrir...

Les informamos que estaríamos en nuestro departamento y que cualquier cosa que necesitáramos los llamaríamos de inmediato, ellos asintieron y entramos a los edificios.

Llegó Mara y unos minutos después llegó Kurt, empezamos hacer nuestro trabajo grupal y unas horas más tarde acabamos... les ofrecimos picaditas mientras la pasamos un rato conversando. Kurt fue el primero en irse. Mara se quedó un rato más, tiempo suficiente para saber que su apellido es Harrison.

-Claro Ily, soy la hermana menor de Moch... Matthew.

Ohhh, así que su hermanita lo llamaba Mochi, que adorable. 

-Sabes quién es Ad...- y antes de que pudiera terminar de preguntar alguien tocó la puerta. 

¿Quién puede ser? Cómo sea ella, le cierro la puerta en la cara, no puedo permitir que haga llorar a mi amiga de nuevo. 

Cuando abrí la puerta vi a Matt.

-Hola Matt, me supongo que vienes por tu hermana...

-Hola Il, sí vengo por Mara... y lo que te haya dicho, no es cierto. No es mi hermana... sólo llevamos el mismo apellido.

Okey, pero ¿Eso no los hace hermanos?

-Chao Ily, fue un gusto conocerlas. Las quiero. Nos vemos en clases.

-Chao Mara.- dijimos Nadia y yo al mismo tiempo. Casi siempre hablábamos al mismo tiempo.

Matt se acercó a mí y me susurró. -Paso por ti a las 6.- dio media vuelta y empezó a salir.

-Hablamos luego flaca.- me guiñó un ojo. -Chao Nadia.- nos dirigió una sonrisa amable.

Estaba tan emocionada, que acabé todas mis tareas antes de lo previsto, le dije a Nadia que me ayude a escoger un outfit para salir con Matt, después de todo, no sabía a dónde iríamos.

Me puse un pantalón y un top crop. -Y... ¿Qué tal?

-Ily por favor. Con todo te ves bien.

-¿Segura?  

-Sí Ily. Hermosa como siempre. Anda que debe estar por llegar, no lo hagas esperar.

-Ily ¿Me traes unos chocolates?- Dijo Damon antes que cruzara la puerta principal del departamento.

-Está bien, ya regreso. 

Cuando salí vi a Matt con su sudadera en mano, me di cuenta que olvidé tomar la mía... Matt me ofreció la suya jeje. Que aroma tan agradable, me fascina. Oh no, aún tengo su ropa... debo devolverle su calentador y camisa lo antes posible.