Y heme aquí, hastiada de hipocresía, de arrogancia y malos procederes....
Colmada de blásfemos, de los ególatras y de personas frustradas que disfrutan ver la piel del prójimo arder....
Me siento asqueada de lo ruín y superficial en que se puede convertir un humano....
De ver cascarones vacíos como cuerpos y sonrisas dibujadas con un pincel que se deshace en lágrimas...
No soporto las máscaras para ocasiones y la vanalidad de palabras...
Me dejan deshecha la estupidez y el aparentar con que se vive en estos tiempos...donde la atención cuesta, sonreír genuinamente esta prohibido y ser feliz genera envidias y aberración.