Un nuevo encuentro.

Pensé demasiado durante esos diez minutos todos los pro y contras que podía tener en mente pasaron en ese momento como si de una lista se tratara, me quedé sumida en ese pensamiento mientras mis manos estaban demasiadas frías, aunque la calefacción estaba encendida.

Volvió a sonar el timbre y mis pies no reaccionaron, papá fue el que abrió y yo me quede ahí en el sofá con mamá; escuche cuando papá lo saludo y el respondió; pero no salí de mis pensamientos hasta que el saludo: - Buenas noches Sra Llanos.

-Buenas Noches Jhoseph.

Miro al lado y solo fue ver su reacción que me dejo sin frio y sin ganas de hablar. Hizo una sonrisa ladeada y con unos ojos brillantes al verme, pero su boca fue otro escenario.

• Hola enana.
• Hola niño. ¿Cuánta emoción? Pues si quieres me regreso.
• Pues no es que sea la gran cosa. Pero me alegro que estes aquí con tus padres.
• No pues gracias. Te lo dije papá no era buena idea avisar.

Mi papá solo se ríe porque sabe que lo estaba usando para que el Niño entendiera que yo no era la que le había avisado.

Mamá nos sirvió vino menos a Joss, aún era menor para tomar lo cual me recordó que aun era menor como para yo tener relaciones sexuales con él. Yo era mayor.

Mientras el vino entraba por mis labios solo pensaba en ello, sabia que unas partes era a los 16 o 17 pero la verdad no sabia que pasaba con las leyes en Wisconsin.

Cuando estaba sumergida en mis pensamientos escuchando de fondo a los tres conversar sobre toda la programación semanal del congreso, siento que me dice Joss; - Bomm se murió otra neurona!! Deja tus pensamientos y solo fluye Enana.

• Mira vuelve el chico que piensa mil cosas a dar consejos que no aplica.
• Ya sabes que por edad tengo más neuronas que tú.

Todos ríen, pero yo solo hago mala cara y me levanto a lavar mi copa.

Llego a la cocina con la idea de dejarlos hablando e irme a buscar mi nueva cama para así terminar mi día y prepararme para uno nuevo; cuando de repente llega Joss y me dice:

• Adivino que ya quieres irte a dormir
• Si, ya es hora de descansar
• Bueno por lo menos estarás segura de que no voy a irrumpir en tu habitación dado que vives con tus padres.
• Vivo junto a mis padres, pero no con ellos. Y no me preocupa que irrumpas.
• Pues donde vas a vivir. ¿Puedo llevarte a tu apartamento?
• La verdad puedo ir sola, no será muy largo el trayecto.
• Déjame acompañarte.
• Créeme que no necesito de tu compañía.

Salimos de la cocina cuando mamá dice:

• Bueno chicos es hora de descansar. Ve muéstrale tu casita a Joseph.
• Mamá no hay necesidad de ser sutil.
• Dice Joss: si, muéstrame tu casita.
• ¡¡Ajá claro Niño vamos!!

Me despido de mamá y papá mientras Joss nos mira y se despide distante, asumo que algún recuerdo paso por su mente porque no era su habitual manera de ser con mis padres.

Mientras Joss se dirige a la puerta yo me dirijo a la puerta auxiliar para salir a la casa de huéspedes que ya es mi casita.

- Enana me hubieras dicho que era por ahí.

Pasar por ese sendero que papá mando a hacer era como sentirme en casa se podía ver todo afuera, pero se sentía en casa, calientito y seguro.

Abro mi puerta electrónica y hago espacio para que entre Joss.

• Muchas gracias Enana, que bonito y frio se ve todo.
• ¿Frio? Es acogedor y limpio que es diferente pero bueno que sabaras tu.
• Pues si tu eres la experta.
•  Pero muéstrame todo quiero ver donde te hare el amor por primer vez.
• Nada de eso niño, no quiero terminar con correctivos legales ni con acusaciones de pedofilia.
• Ahhh pero si que pensaste en las leyes, ósea que la Enana ya pensó en llevarme a la cama wow
• Deja de hablar locuras que no han pasado por mi mente y ven te muestro todo.

Le hago el pequeño recorrido por mi sala de estar y le encanto mi espacio de trabajo y luego lo lleve a la habitación, inmediatamente se tiro en la cama.  

• Debemos hacer la prueba del colchón, de momento se siente rico.
• Joss deja las insinuaciones, no habrá prueba de nada. Mira el baño
• Quieres que repitamos lo del baño de tu apartamento.
• ¡No! La verdad solo diré fin del recorrido.
• ¿Me puedo quedar? Extraño dormir contigo
• No, Joss así no pueden ser las cosas recuerda que para mi eres como un hermano.
• Deja de hablar bobadas April que sabes que ya no sientes eso o mejor dicho nunca lo sentiste. Mejor dime que no quieres que me quede y punto.
• Exacto Joss, no quiero que te quedes. Mejor nos vemos otro día.
• No enana, otro día no; nos vemos mañana regálame 24 horas contigo y te prometo que si no quieres luego volver a verme te dejo en paz.
• Niño tan rápido te rendiste, por mi esta bien.
• Segura, por que luego vas a querer volver a verme todos los días; decídete.
• Pues no tengo nada mas que decidir. Mañana empiezan tus veinticuatro horas a las 10 am. Llegas mas temprano o mas tarde y se acaba el trato.
• Bueno Enana hasta mañana.