1. Desterrada

— ¡Corre!— grito Dhalia a mis espaldas.

— ¡Hago lo mejor que puedo!—grite frustrada.

— ¡BUENO PUES HAZLO MEJ-— noqueada.

Voltee y justo en eso me tiraron al suelo, rodee hasta topar con un tronco.

— ¡CORRER! ¿ES ENSERIO?— Grito Aura.

Dhalia se levanto con dificultad al igual que yo.

— No puedo sacar a mi loba, tengo justificaci ¡AHHH!—grite cuando ella me tiro al suelo y tomo mi mano clavando el cuchillo en mi palma.

— Oh lo siento... Ser débil no es justificación.

Lo saco, respire olvidando cualquier dolor, el dolor es mental....

Lo es Nivarna...

Esa maldita voz, me levante y la mire.

— Lo lamento...— dije bajando la mirada ante ella, además prefirió evitar ver su parche, a ella le molestaba que lo hiciéramos.

— ¡ahora sigan entrenando que no quiero más fallas!—grito ella a mí y a los demás desterrados.

— ¿Estas bien?—preguntó Dhalia.

— Oh claro que lo estoy, solamente me clavo un cuchillo en la mano—dije sarcástica mientras ella miraba la sangre brotar.

— Dime mal amiga pero tengo hambre—rodé los ojos, tenia que ser vampira...

— Solo tienes que esforzarte más...

— Lo haré, Aura me dio la oportunidad de ser alguien y no lo desperdiciare.

— y eso suena bien...—dijo ella caminando detrás de mí  — Los cazadores y lobos nos siguen buscando.

— Espero se cansen pronto...

— no lo harán, lo que hizo Aura hace años fue demasiado.

Me gire para verla.

— y lo que haré yo también lo será...—sonreí con malicia para luego seguir mi camino.

Al llegar al final de nuestro escondite tome mi espada y la metí en su funda empezando a caminar sola.

Si le llevaba a Aura más desterrados nuestro grupo crecería, mejor aún... Si lastimaba a más personas Aura me reconocería.

Llegue al centro del bosque.

— date la vuelta y regresa

Ignore esa voz, no tenia sentido escucharla si era débil, me volvería fuerte por mi cuenta y no necesitaba a mi loba.

— Nivarna... Escúchame— la voz de nuevo.— Nivarna. 

— ¡silencio!—grite— No  tengo loba...

Al llegar al centro de la manada escuche ruidos, tome la empuñadura de mi espada y antes de que se lanzara a mí la espada quedo cerca de su hocico.

— ¿Desterrado?—pregunte, este gruño en respuesta.— eso es un si, ahora vuelve a tu forma humana...

Se alejo de mí y lo hizo... Amplié los ojos al verlo en ropa.

— Caiste...—intente darme la vuelta para huir pero una mujer me apuntaba con su espada, tenia el cabello rojo y un uniforme de cazador.

Los lobos que vuelven a su forma humana con vestimenta tienen alianza con el Rey de los lobos... y el rey de los lobos tiene como familia al mejor grupo de brujas, las Black, eso significa que no es un desterrado, sino nuestro enemigo.

— No huirás...

— ¿Según quien?—pregunte burlona.

Gire mi espada clavándola en su pata

Saque la espada y me gire antes de que la cazadora me atacara, mi espada y la suya sonó.

—¿quien eres?—preguntó la cazadora.

— Nivarna— dije con voz clara— la desterrada más poderosa...— okey estoy alardeando.

— Ni tanto...— se burlo.

Unas manos me tomaron de la cintura por detrás.

— ¡no! ¡suéltenme!—grite.

— Te llevaremos ante los alfas  y ellos decidirán tu muerte, pues eso le pasa a los desterra- —Una garra atravesó su cuerpo.

La chica de cabello rojo cayo al suelo.

— Julieta, cazadora de los Venandi...— mire a Aura detrás de ella.—muerta...

— Suéltala...— El hombre me soltó al escuchar una voz masculina.

Mire detrás del hombre, era Zack, un vampiro alma gemela de Aura.

Cuando me soltó Zack degolló al hombre, sonreí al ver la sangre.

Me gire para agradecerle a Aura pero en lugar de eso recibí una bofetada.

— ¿la desterrada más poderosa?—inquirió riendo— por favor Nivarna... No pudiste ni matar al lacayo de los cazadores—mire a la chica de cabello rojo.

— Eran dos...— escusas.

— Y en la guerra serán miles y miles...  No quiero que en esa guerra este alguien tan débil como tú.

Baje la cabeza, tenia razón...

— Somos fuertes...

— Hay que irnos, pronto vendrá la líder de los cazadores y al ver a su equipo muerto nos querrá a nosotros igual.

Camine detrás de Zack y Aura.

Necesitaba ser más fuerte, pero para eso...

Antes de entrar a nuestro refugio me detuve. 

— Quiero ser como tu— Aura se giro para verme.

Zack puso atención a mis palabras.

— ¿enserio lo quieres?—asentí, ella camino a mí y tomo mi mentón.— ¿que estas dispuesta a hacer?

— Cualquier cosa...

— Veamos que tan cierto es.

Aura me llevo lejos del refugio y los demás desterrados, llegamos a una cueva en donde al abrirla saco a una familia, una mujer, un hombre, un bebé y dos niños...

— en tus dieciocho años no has matado a nadie... —dijo Zack con el bebé en brazos— solo los has herido y eso... Eso no se podrá hacer en la guerra.

— ¿son desterrados?—pregunte señalando a la familia.

— no, son humanos—contesto Aura caminando hacia mí— y en unos segundos serán cadáveres.

— ¿los mataras?— Aura tomo un cuchillo y se acerco al hombre hasta ponerse detrás de él, me sonrió para luego alzar la mano e insertar el cuchillo en el cuello del hombre, la sangre empezó a brotar y los gritos de los niños igual...

Una familia... Herirlos era diferente a matarlos... 

El cuerpo del hombre cayo.

— ¡papá! —los niños gritaron, la escena se estaba volviendo horrible ante mis ojos.

— ¿Por qué me has traído?—pregunte horrorizada.

— porque si quieres ser como yo te entrenare.... Pero yo no me tiento el corazón Nivarna, tú tampoco lo harás, toma tu espada y acaba con ellos.