29. Un equipo

La pregunta de Lily me tomo por sorpresa.

— no lo sé— negué— no lo creo, el gen mínimo de lobo que tendría si mi abuelo fue uno seria la habilidad de no enfermar, no suelo enfermarme de hecho. 

Ella rio.

— comprendo, pero si tienes gen de lobo, si llegas a tener un hijo, él lo sera. 

— por parte de su padre— asegure.

— Exac-

Gritos se empezaron a escuchar desde afuera.

— están atacando— dijo la loba pasando a mi lado para ir corriendo al lugar en donde se escucharon los gritos.

Todos salieron asustados y el bosque fue cubierto por fuego.

— ¡son doce!—grito la artemisa tomando su arco.

Siete desterrados.

— ¡Nivarna!—grito Oliver llegando a mí.

— tengo que luchar— dije alejándome para correr en dirección a la artemisa y la loba.

— ¡ellas se encargaran!

— ¡es nuestra manada!—grito Adrián pasando a mi lado y yo acompañándolo.— ¡cuida a Taylor, yo me encargare de Oliver!— dijo por último.

— ¿en verdad son doce?—pregunte.

— si ¿el vestido no te complicara luchar?—preguntó.

— será fácil.

— será mejor que proteja a la luna, puede que sepan la noticia— dijo la loba llegando a nosotros.

— ¿me permites?—pregunte viendo su arco.

— ¿sabes como usarlo?

— ella usa todo tipo de arma— dijo Adrián— será de ayuda.

La loba asintió.

— iré a la frontera, detendré a quien entro— dijo Adrián en su forma lobuna.

Lily lo siguió y yo tome el arco caminando a las afueras de la mansión, las personas estaban empezando a correr.

Levante el arco observando a un lobo, dispare justo en su pecho y cayo dejando al grupo de niños.

— ¿están bien?—pregunte llegando a ellos.

— si señorita.

Me acerque al lobo quien volví a su forma humana.

— Nivarna...— dijo mal herido.

— ¿la artemisa?

— corriendo en dirección a la frontera.

— lo lamento— clave otra fecha en su garganta para luego correr en dirección a ellos, el vestido si era molesto y ni hablar de los zapatos.

Solo un lobo entro, eso significaba que diez permanecían en la entrada, al llegar a la frontera observe a cinco lobos en el suelo.

— ¡Nivarna! ¡ayuda a la artemisa!—grito Adrián en mi dirección.

Al girar la observe esquivar al lobo, se había quedado sin armas, al menos conservo algunas en su pequeña cartera.

Ella parecía cansada, me acerque con cautela y sonreí, tenia el camino libre, Ariana clavo una daga en el pecho del lobo y se levanto agitada.

— ¡ARIANA VENANDI!— grite apuntando en su dirección.

La flecha estaba preparada, ella estaba débil. Ella amplio los ojos sorprendida, casi estática.

Dispare...

Ella cerro los ojos y los abrió al escuchar a algo caer detrás de ella, el lobo se había levantado y mi flecha fue a parar a su cráneo.

— gra... Gracias— dijo tartamudeando.

— de nada.

Adrián peleaba con uno, Alfa Jasper con otro, mientras la loba cuidaba la mansión, mis cuentas eran rápidas. Aun hay dos...

Alguien lanzo mi cuerpo en dirección a la artemisa y  ambas caímos al suelo aturdidas. 

Me levante y observe a los tres lobos rodearnos, Ariana al igual que yo se levanto, el única arma que tenia era una flecha y ella una daga.

— y ninguna tiene loba— reí.

— pero ambas sabemos lo poderosas que podemos ser.— añadió.

Me levante y tome la flecha, Ariana permaneció de espaldas a mí, cubriéndonos una de la otra.

— ¿tienes buena puntería?—pregunte.

— si.

— dame tu arma— pedí, ella lo hizo y cuando la obtuve la lance con fuerza en dirección a uno de los lobos clavándola en sus ojos, este se lanzo a mí y Ariana me jalo cayendo ambas al suelo, otro de los lobos volvió a balancearse sobre nosotros, tome a Ariana de los hombros y la empuje a mi lado levantando mis pies e impidiendo que el lobo se acercara a mí.

— ¡Nivarna!—grito Ariana al verme tan cerca del lobo.

— ¡rápido!—grite estirando mi mano.

Ella me paso la punta de su flecha y yo la clave en el pecho del lobo.

Ariana corrio al lugar en donde bote el arco y las flechas, las tomo y se apresuro lanzando la primera al lobo, el lobo fue más rápido volviendo a su forma humana y tomándola por detrás.

— si quieres seguir vivo, suéltala— dijo el alfa Jasper acomodando su ropa y caminando con tranquilidad hacia nosotras.

Me agache y tome la daga del cuerpo del ojo del desterrado, se me dificulto pues creo llego al cráneo hasta hacerlo morir.

— ¡No te muevas!—amenazo en mi dirección.

Di un paso atrás dándole a entender que estaba de acuerdo.

— repito, suéltala— dijo Jasper,  Adrián observaba la situación sin decir nada. 

— no me importan tus amenazas— dijo el desterrado.

Jasper rio y luego lo vio— no son amenazas—dijo— solo te advierto lo que es mejor,  tienes nada más y nada menos que a la artemisa.

Mire la sonrisa de ariana Venandi.

Ariana golpeo su estomago con su codo y tomo el brazo del desterrado para empujarlo hacia adelante y torcerlo hasta ser ella quien lo tuviera prisionero.

— no me subestimes.

Me acerque y Ariana se hizo a un lado dejando que clavara la daga en el cuello del desterrado.

—prefiero el corazón— dijo ella.

— el cuello hace que desangren lentamente— me aleje y ella torció el cuello del desterrado.

— para asegurar....

— ¿no eres loba?—me preguntó alfa Jasper.

— para nada—dije negando.

— gracias por tu ayuda— dijo Ariana.

— de nada, me siento satisfecha al haber peleado al lado de la artemisa, que honor...

Adrián miro hacia otro lado evitando su sonrisa.

— será mejor que volvamos, los deltas se encargaran de esto— dijo Adrián.

Jasper se transformo en su forma lobuna llevando a Ariana y Adrián llevándome a mí.