Ana estaba decidida a hablar con Tomás, decirle que le gustaba. No solo físicamente, sino en lo emocional: le
gustaba todo de él. Se enamoró. Fue al parque. No llevó a Tobi. Tomás no llevó a Luna. "Acá estoy para que
hablemos, para que me digas la verdad." Él respondió: "Te mentí. Lucía no es mi vieja amiga. Es mi ex. Y
estos días traté de volver con ella, pero está difícil... porque yo también te pienso." "¿Como amigos?",
preguntó Ana. "No. Como algo más." "Pero dijiste que nada de amor." "Es verdad. Pero vos también lo
sentís." "Mañana decidimos qué hacer", dijo ella. Y se fueron por un café.
Editado: 07.07.2025