17. La habilidad para seguir

Catalina no tenía idea alguna del plan que tenía Eme, quien se había percatado de que las viejas cadenas de las celdas habían sido amarradas muchas veces, cosa que le recordaba a los viejos arapos de su aldea que por más que intentarán anudarlas, con el peso y el movimiento siempre se rompían.

-Detente ya que solo provocaras que la celda caiga! Estamos a varios metros sobre el suelo!- Decía el señor Ulher

Eme seguía abalanzandose, sosteniéndose de las barras horizontales con una mano y con la otra parecía apuntarle a un punto específico, el reciente nudo que hizo Aracno antes de que se calleran. Catalina Observó como está se movia y pequeños trozos negros salían como polvo del roce del movimiento.

Las demás personas gritaban que se detuviera, Aracno se levantó de su asiento y grito furioso

-Callense, están bajo mi mando y ustedes...-

No llegó a terminar lo que dijo cuando una enorme celda colgante le cayó encima. Eme sonreía levantando la mano con el pulgar arriba dentro de la celda, su plan había tenido éxito. O algo así.

El palonde madera no había atinado en el punto exacto pero el resultado fue el mismo. Ya con Eme abajo y liberado, Saco a Raj y a Samy de sus jaulas. El pequeño Colibrí abrió las celdas de todos los prisioneros.

Eme ayudo a Catalina a bajar de su jaula. Ella aun estaba intranquila por la confesión, esperaba que como cualquier otra persona Eme se sintiera decepcionado o hasta traicionado por no haberle dicho la verdad.

El señor Ulher se acercó a Eme y se disculpo por haberlo llamado ignorante.

-Usted decía la verdad, pero el no saber también es una ventaja... Aprendes muchas cosas que los que saben mucho no ven- respondió alegre. El señor Ulher solo se rió.

Catalina dejo de sentirse intranquila, se había olvidado de la habilidad de adaptarse a lo que sea de ese joven.

-Saldremos por la salida del alcantarillado a la ciudad, la mayoría de nosotros no posee poderes, así que lo más seguro es camuflarse con la población - Mencionó el señor Ulher en voz alta para que todos los escucharán

-Eme y yo nos dirigiremos a la base Destinataria, para envíar un mensaje de ayuda inmediata -Dijo Catalina mientras toma su maleta de nuevo, a Eme estaba feliz de que no lo hubiera excluido como las veces pasadas.

-Niña, la zona está llena de guardias y posiblemente también esté esa mujer pelirroja. El riesgo es alto.

-Lo sé, pero tengo el presentimiento de que lo lograremos

El señor Ulher no dijo nada, solo se negó con la cabeza y guío a sus colegas fuera de los calabozos. Samy y Raj se adelantaron a los dos jóvenes a verificar que no hubiera enemigos al frente.

Cómo esperaban un guardia los encontró y se enfrentó a ellos, recubriendo su puño con su pequeño escudo de hierro, Catalina estaba preparada para defenderse, pero Eme y Raj fueron más rápidos al unirse en un fuerte brazo recubierto de cristal endurecido.

-Solo copie lo que hacia este guardia

Catalina estaba sorprendida de la habilidad de Eme y se preguntaba ¿Si hubiera crecido bien sería un talentoso prodigio?