Después de esas palabras decido cambiar el tema, aún no me siento segura en contarle la verdad a Jeremy.
— ¿Quieres ver alguna película?— Pregunto.
—Pensé que querías que me fuera —Encojo mis hombros.
— Pues ya que - Susurro — Eres un grano de culo difícil de eliminar — Escucho su risa y se levanta.
—Préstame el baño primero y me ducho, creo que ya estoy empezando a oler a muerte —Dice.
— ¿Apenas te das cuenta?—Arrugo mi nariz. — Tendré que cambiar las sábanas y hacer una gran limpieza a mi cuarto para quitar el mal olor — Sonríe y se va cojeando hasta el baño.
Mientras él se baña empiezo a pensar en todo lo que está pasando, mi madre sufrió mucho en el pasado y no quiero que nadie le haga daño. Tendrá que hablar seriamente con ella y tomar una decisión si quedarnos o irnos definitivamente.
Jeremy sale del baño y luce con otra ropa, al parecer la maleta que le trajo el hombre era ropa para él.
—Espero que también te hayas lavado la boca, porque tu boca huele a aliento de dragón — Me burlo y Jeremy se sienta a mi lado.
— No mientas, desde que me levante me cepille los dientes — Sonríe mostrando sus dientes.
— ¿Y con qué cepillo si no tienes acá?—
— Pues con el tuyo—
— ¿Cómo que con el mío?— Preguntó y él se encoje sus hombros.
—Anoche vi cuando te cepillabas y tomé ese —
— ¡Idiota! - Golpeo su hombro — Eres asqueroso, ahora tendré que cambiar de cepillo — Murmuro molesta.
— No te preocupes no tengo caries —Dice abriendo la boca mostrándome su dentadura perfecta.
—Idiota—Susurro golpeando su hombro y suelta una carcajada.
—¿Tienes Netflix?— Pregunta y yo niego.
—Nop—
—¿No tienes Netflix?— Pregunta sorprendido.
—No— Niego —No soy mucha de ver televisión, prefiero un buen libro o ir a cine.
—Ñoña-—Dice y yo lo golpeo — Deja de golpearme o le diré a tu madre de tus maltratos -
—Chismoso— Digo.
—Gruñona —
—Bipolar —
—Nerd—
— No me ofende que digas nerd, al contrario me encanta que lo digan, no me avergüenza estudiar, en cambio a ti que andas repitiendo el año —Digo y su rostro se contrae.
—No sabes cómo fueron las cosas — Dice molesto y antes que su temperamento empeore decido quedarme callada.
—¿Entonces qué vamos a ver?—Digo sin mirarlo.
— Ven, pásame el control. Te daré mi cuenta de Netflix — Dice cambiando el semblante.
—¿Me vas a dar tu cuenta de Netflix?— Preguntó con burla —¡Oh por Dios! Un sueño hecho realidad —Digo con sarcasmo. Jeremy rueda sus ojos y empieza a buscar qué ver.
La tarde pasa tranquila aunque estuvimos discutiendo un poco en qué ver, al final puso una serie que terminó enganchándome y terminamos viendo todo desde la primera temporada. Eso sí, cada vez lo sacaba de quicio por mis preguntas y más de una vez tuvo que detener la serie para explicarme lo que sucedía.
Mi madre llegó con el mercado y Jeremy y yo ayudamos a acomodar las cosas mientras ella se alistaba para su turno en el hospital. Aprovecho que mi madre está en la habitación y dejo a Jeremy terminar de acomodar las cosas para hablar con mi madre.
Entro a la habitación y en susurro para que Jeremy no me escuche le digo lo que me comento él. Mi madre luce preocupada pero me dice que ella aclarará todo cuando su hermano regrese del viaje y me dijo que estuviera tranquila, que sabía que ellos no nos harían daño, cosa que no estaba segura. Jeremy tiene un temperamento fuerte y no me imagino a su hermano.
Ambos nos despedimos de mi madre y ella no demora en hacer sus comentarios en broma sobre no acabar los condones, Jeremy solo se ríe y yo no sé dónde meterme.
Mi madre confía mucho en mí, sabe que no soy de tener sexo, es más, aún sigo siendo virgen esperando al hombre correcto.
Jeremy y yo vemos una que otra película y después cada uno se va a su cuarto, bueno él se va al mío y yo al de mi madre.
Doy vueltas en mi cama, Jeremy se ha portado bien conmigo y no se ha sobrepasado. Otro hombre habría intentado ligar conmigo pero él parece no tener ningún interés en mí, cosa que me decepciona ya que de verdad me estoy sintiendo atraída por él.
Domingo temprano mi madre nos despierta con un buen desayuno. Entre risas y conversaciones terminamos de comer. Jeremy y yo organizamos la cocina mientras mi madre emocionada por tener Netflix empieza a buscar qué ver. Hoy es su día de descanso así que no tiene afán de irse a dormir.
De nuevo Jeremy termina casi enloquecido por mi madre, le comenté sobre la serie que nos vimos ayer y ella es peor que yo con sus preguntas. Aunque él con ella no explota como lo hacía conmigo, al contrario con mucha paciencia le explicaba cada capítulo.
Mi madre no tardó en darse por vencida de ver todas las temporadas y se fue a dormir, ya cansada por el trasnocho decidió dejar en paz por un rato a Jeremy.
Aproveche la mañana en arreglar un poco la casa y después prepare el almuerzo junto con Jeremy que aprovechó el momento para sacarme de quicio con sus preguntas.
¿Qué preparas? ¿Porque le echas eso? Eso no se cocina así y muchas otras más hasta que tuve que sacarlo de la cocina y me dejara cocinar tranquila.
En la tarde jugamos cartas con mi madre, cosa que él no sabe es que mi madre es la reina del drama y de la trampa. Al final terminamos discutiendo con ella y dejándola sola en la mesa.
El celular de mi madre suena, Jeremy se levanta del sofá y va al baño y yo me emociono al escuchar a mi madre hablar con Lili, la mejor amiga de mi madre.
Lili tiene un hijo de ocho años que me adora, dice que soy su novia y cuando crezca se casará conmigo. Yo le sigo el juego, adoro a ese niño como si fuera un hermano para mí. Mi madre me lo pasa y empezamos a conversar de lo que ha hecho desde que me fui.
Jeremy se sienta a mi lado y me mira serio, no entiendo su cambio de actitud y lo ignoro para seguir conversando con Nico.
Editado: 08.04.2020