Julie
Observo a la chica, sin poder evitarlo, el enojo comienza a recorrer mi cuerpo. Según habían mencionado, ella no mantenía contacto con su madre, pero aun así, el sólo verla me recordaba la muerte de todos. Adonis me observa y se pone de pie rápidamente, se coloca frente a mí sus ojos me ven fijamente y sé que me está pidiendo que me controle. Cierro mis ojos, respiro profundamente, mas no logro calmarme. Camino rápidamente saliendo de la habitación y recuesto mi cuerpo en la puerta, escucho la voz de Adonis hablando.
-Creemos que tu madre es la responsable de la desaparición de Sebastian. No sólo de eso, sino de la muerte de varias personas importantes para ella. Tomará tiempo, pero sé que se llevarán bien- escucho pasos acercándose y corro hacia la sala de entrenamiento. Cuando entro, respiro profundamente y trato de tranquilizar los acelerados latidos de mi corazón.
Después de unos minutos, Caroline y Adonis llegan a la sala, comenzamos a calentar y después Caroline comienza a mostrarme ciertos movimientos para defenderme.
-No creo que lo necesites, pero de igual manera, te mostraré lo más básico, en caso de que pierdas el control de tus poderes- asiento y sigo cada una de las instrucciones dadas. Cuando puedo defenderme de los ataques que da Caroline, estiramos nuestros cuerpos y empezamos con lo más importante.
-Puedes controlar lo más básico del agua, ahora. Seguiremos con en el aire e intentaremos que puedas usar ambos al mismo tiempo. Después veremos si podemos despertar tu poder de la tierra y el fuego- asiento a cada una de las palabras que dicen y me enfoco.
Relajo mi cuerpo y suspiro antes continuar con el entrenamiento. Me piden que cree una pequeña ráfaga de viento y pienso en ello. Intento una y otra vez hasta que siento una ráfaga formarse. Una sonrisa en mi rostro aparece y me siento feliz.
Luego de practicar hasta que el sol se pone, cuando terminamos, caminamos hacia la sala privada del día anterior. Donde nos esperaban, Kira y William junto a otro chico, recordaba su rostro, sin embargo, no sabía quién era.
-Juliet, él es Antonio, el jefe de la guardia real- fruncí mi ceño, lucía muy joven para ser el jefe.
-Hemos estado pensando en el plan, lo llevaremos a cabo pasado mañana, así tendrás un día más para entrenar. Primero Juliet, Kira y yo asistiremos al evento. Adonis y Caroline estarán en la cabaña, dirán que quieren pasar tiempo juntos, en medio de la cena, Kira y yo despediremos a Juliet y ella cabalgará hasta la caballa, cambiarás tu ropa y después irás al bosque. Entrarás y te estaremos esperando junto con los guardias en la salida del camino principal, si no llegas a salir en una hora, Rachel entrará- frunzo mi ceño inconscientemente.
-Puede que a ti no te agrade, pero ella es mucho más educada que tú y ha vivido aquí. Además, cuando te cases con Sebastian, será parte de tu guardia- asiento. –Repasaremos las distancias perfectamente y los caminos que seguirás- me acerco al escritorio y noto que había un croquis del castillo hacia el bosque.
Cuando despierto la mañana siguiente, mi cuerpo estaba ligeramente adolorido. Me levanto de la cama y comienzo a prepararme para el desayuno, me dijeron que usara ropa formal, así que tomo uno de los conjuntos que ya estaban preparados en el armario. Tomo unos zapatos de tacón bajo y me observo en el reflejo, la ropa no me desagradaba del todo, pero me hacía sentir incómoda, estar en este castillo, me hacía sentir incómoda. Comienzo a cepillar mi cabello y me doy cuenta que otro de los mechones de mi cabello había cambiado de color, esta vez era rojo. Peino mi cabello en una cola baja y salgo de la habitación.
Camino por los pasillos hasta llegar al comedor y tomo asiento en el lugar reservado para mí, saludo a la reina y a las chicas. Tomo el primer bocado del desayuno y escucho la voz de la madre de Sebastian.
-Mañana asistirás a un evento en representación de Sebastian, anunciaremos a los habitantes que ha desaparecido- me pregunto por qué habría un evento si su futuro rey está desaparecido. Pero seguiré el plan según lo que ha mencionado William.
Después del desayuno camino de regreso a mi habitación con Caroline, cambio mi ropa por una deportiva y cuando salgo me encuentro con la rubia de nuevo. Recorremos los pasillos hasta llegar a la sala de entrenamiento y Adonis se acerca a nosotras, deja un beso en los labios de Caroline y me observa.
-Comenzaremos a practicar con fuego, iremos a la sala especial para ello- asiento y los sigo.
Tratar de crear una llama o controlar el fuego de una vela, era mucho más difícil que controlar el agua o el viento, mi mente comienza a llenarse de pensamientos y suspiro por la desesperación de no poder hacerlo.
Cierro mis ojos por un momento y tengo la necesidad de tocar mi marca, cuando lo hago comienzo a sentir mi cuerpo siendo golpeado por algo húmedo, era una extraña sensación, la fuerza de los golpes ejercían presión. Mi garganta comienza a cerrarse mientras los golpes se hacen más constante y cierro mis manos con fuerza, el aire comienza a faltarme mientras el dolor de los golpes crece, una lágrima cae por mi mejilla y abro mi boca tratando de obtener un poco de oxígeno.
Cierro mis ojos cuando mi vista comienza a volverse borrosa y entonces puedo respirar de nuevo, tomo una gran bocanada de aire y bajo mi cuerpo hasta sentarme en el piso. Mi corazón latía desesperado y siento mis mejillas mojándose, seco las lágrimas mientras busco calmar mi respiración entrecortada.