Destino, Brick Lane #6174 (ae 1)

XXXI.

Un mes después.

Hasta este punto todos los seres de Blamon dentro y fuera de este mundo sabían que se estaba generando la guerra, pero, ¿donde? Los seres de Osiris que se encontraban en Blamon no sabían cuándo iniciaría la guerra, todo había estado tan tranquilo durante este tiempo; los mismo ataques de siempre habían sucedido, aunque eso conllevaba a que sus guerreros no se recuperaran tan rápido a falta de recursos. Al contrario, los seres de Osiris en la tierra estaban seguros que los arcángeles estaban más que cerca que terminar con su hogar, mientras los cabazan en la tierra.

Para su raza el mundo se seguía moviendo igual, había muchas problemáticas de las cuales preocuparse, pero para Anzu, no era algo que ella podía solucionar, tal vez los pequeños problemas de su vida, aunque su mente solo pensaba en lo que estaría pasando con aquel mundo llamado Kepler, que estaría pasando con Siwon. <<¿Se encontraría a salvo? ¿Estaría bien? ¿la extrañaría como ella lo extraña? >> De repente sintió nostalgia, miró el sol que estaba empezando a ocultarse y soltó un suspiro.

-Vamos, te llevaré a casa -le dijo Alice en cuanto salieron de la universidad.

-Esta bien, gracias -le devolvió la sonrisa.

-Hace mucho que no veo a Siwon -dijo de repente, sorprendiendo a Anzu -¿sucedió algo?

Después de que se marchara esa tarde no lo había vuelto a ver su rostro, pero algo que mantenía viva su esperanza era una carta que había llegado una semana después de que se fuera. La carta no era extensa y explica muy poco lo que sucedía en Kepler: “Anzu, se que esperas por mi como prometiste, y yo también cumplire mi promesa de volver, pero por un largo tiempo estaré en casa, han cambiado ciertas reglas a causa de una posible guerra, así que, no te desveles mucho y come bien. -Siwon.”Anzu hizo una línea en sus labios y negó. 

-Siwon no se encuentra aquí -susurro -volvió a su hogar, y está muy ocupado con su trabajo.

-Después del incidente de los templos, todo parece más tranquilo, pero eso me parece demasiado extraño -Anzu asintió -hay muchos rumores sobre ello.

-¿Rumores? -frunció su ceño.

-Los peregrino piensan que fue un acto del diablo, o que posiblemente el arcángel Gabriel volviera a tener un enfrentamiento con el demonio -soltó un suspiro -pero Mateus me ha desmentido todo eso, dice que aquel acto no tiene que ver con su raza, más bien proviene un acto de los arcángeles en busca de poder y supuesta protección a los humanos -hizo una mueca -aunque de lo que no dudan es que fue un acto sobrenatural que hace pensar que si existe algo en el más allá, salio en cada noticiero del mundo la noticia de cómo cada puerta de los templos de su ciudad se incendiaron sin explicación alguna. 

-Es normal que piensen que fue algo sobrenatural, todas las puertas quedarán intactas después de una hora de un fuego intenso -Alice asintió en aprobación.

-Aunque también me parece extraño que la Cafetería Fallen Angel la cerraran, ¿crees que tenga algo que ver con esto? -alzó una de sus cejas, Anzu hizo una mueca recordando a Adrian, el lucifer, amigo de Siwon.

-No estoy segura -frunció su ceño. De repente el automóvil de los Collins, conducido por Bastian, se estacionó frente suyo.

Alice abrió la puerta de atrás del automóvil y entró seguida por Anzu -¿A que te refieres con no estar segura? -susurro cuando el motor arrancó.

-Recuerdas a la chica que se encontraba en la caja registradora aquel día -Alice frunció levemente su ceño y luego asintió -su nombre es Nia, fue ella quien me entregó la tarjeta para que fuera a la biblioteca Shin. Y al parecer uno de sus empleados es un lucifer -Alice entreabrió sus labios y luego soltó un suspiro.

-No hay mucho que podamos hacer nosotros, ¿verdad? -Anzu asintió.

-Mantenernos a salvo.

En cuanto Bastian estacionó el automóvil en frente del edificio donde vivía Anzu, Alice le entregó una pequeña tarjeta a su mejor amiga. Ella la tomó y la abrió enseguida.

-¿Una reserva? -frunció su ceño.

-La invitación es para dos personas -sonrío -es para los dos. Espero que para ese día, Siwon esté presente.

-Tu madre volverá a lucirse en su fiesta -sonrió, queriendo evitar el tema -¿de qué se trata esta vez?

-El cumpleaños de Papá, no olvides venir, sabes que ellos te adoran -entrecerró levemente sus ojos -no perdonarían tu inasistencia -las dos rieron.

-Está bien, estaré ahí -Anzu abrió la puerta y salió del automóvil -vuelve segura a casa -sonrió antes de cerrar la puerta para luego ver marchar el automóvil.

. . .

Luhan volvió a sentarse en la misma mesa de la cafetería que había visitado los últimos meses, tenía una excelente vista hacia el edificio del frente, y desde el tercer piso, donde él se encontraba, podía ver perfectamente el apartamento de los demonios. El sombrero fedora que llevaba hacía un buen juego con su camisa ceñida al cuerpo y sus pantalones de tirantes. Acomodo muy bien sus gafas de sol y fingió leer la carta, aunque sabía lo que pediría, incluso el mesero lo sabía, <<un latte con una rosquilla, por favor.>> repitió en su mente con una sonrisa.

-Todo en el menú se ve delicioso -Luhan frunció su ceño y bajó la carta de su rostro, sorprendiendose -el lugar también es muy acogedor -sonrio -no te cansas de pedir lo mismo de siempre.



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En el texto hay: angeles, angel caido, angeles y demonios

Editado: 30.12.2022

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